Rusia lanza sus peores ataques contra el sector energético de Ucrania y provoca apagones masivos

Los bomberos apagan un incendio en una subestación eléctrica después de un ataque con misiles en Kharkiv, el 22 de marzo de 2024.
Los bomberos apagan un incendio en una subestación eléctrica después de un ataque con misiles en Kharkiv, el 22 de marzo de 2024. - Créditos: @SERGEY BOBOK

KIEV.- Rusia lanzó una serie de ataques contra las instalaciones de energía eléctrica en gran parte de Ucrania, incluyendo la mayor central hidroeléctrica del país, que provocaron apagones generalizados además de la muerte de al menos cinco personas, según anunciaron las autoridades ucranianas este viernes.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, indicó que en la ofensiva se emplearon más de 60 aviones no tripulados y alrededor de 90 cohetes.

“Rusia está en guerra con la vida cotidiana de las personas. Mis condolencias a los seres queridos de aquellos que fueron asesinados por este terror”, escribió el mandatario en X al mismo tiempo que exigió más armamento a sus aliados occidentales.

El ataque se produjo un día después de que Rusia disparó 31 misiles en un único operativo contra la capital, Kiev. El del viernes fue el mayor asalto a la infraestructura energética en lo que va de año y uno de los más importantes desde el inicio de la guerra, apuntaron las autoridades ucranianas.

“Incluso el invierno pasado, los ataques a nuestro sistema energético no fueron tan grandes como los de esta noche”, indicó el director de la empresa de eléctrica Ukrenergo, Volodimir Kudrytskyi.

El invierno pasado, Rusia atacó deliberadamente la infraestructura energética del país, lo que causó frecuentes apagones en toda Ucrania. Muchos habían advertido que Rusia podría repetir la estrategia de cara a este invierno, pero en su lugar Moscú lanzó masivos ataques con drones y misiles contra la industria de defensa.

En esta foto proporcionada por el Servicio de Emergencia de Ucrania, personal de emergencia ucraniano trabaja en el lugar del ataque aéreo de Rusia en Kharkiv, Ucrania, el viernes 22 de marzo de 2024.
En esta foto proporcionada por el Servicio de Emergencia de Ucrania, personal de emergencia ucraniano trabaja en el lugar del ataque aéreo de Rusia en Kharkiv, Ucrania, el viernes 22 de marzo de 2024.

Cada ataque aéreo gran escala del Kremlin merma la capacidad ucraniana para repeler los misiles rusos. Zelensky lleva semanas pidiendo a sus aliados occidentales que suministren más sistemas de defensa antiaérea y munición ante la demora en la llegada de la ayuda estadounidense.

“Con los misiles rusos no hay retrasos, como ocurre con los paquetes de ayuda a nuestro Estado. Los Shahed no tienen indecisión, como algunos políticos. Es importante entender el costo de las demoras y las decisiones aplazadas”, declaró el presidente ucraniano en referencia a los drones de fabricación iraní que utilizan las fuerzas del Kremlin en la guerra.

Los ataques causaron un incendio en la planta hidroeléctrica de Dnipro, que abastece a la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa.

La línea principal con la planta quedó cortada, explicó el director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), el argentino Rafael Grossi, a primera hora del viernes. El operador nuclear ucraniano indicó horas más tarde que la conexión se había restablecido.

La central está ocupada por las tropas rusas y los combates en sus inmediaciones han sido una constante preocupación debido a la posibilidad de un accidente nuclear.

La represa de la planta hidroeléctrica no corría peligro de derrumbe, según las autoridades. Un accidente de este tipo no solo interrumpiría el suministro a la central nuclear, sino que podría causar graves inundaciones similares a las ocurridas el año pasado tras el colapso de la presa de Kajovka, más abajo en el río Dniéper.

Tres personas murieron y al menos ocho más resultaron heridas en el ataque ruso, afirmó el gobernador de la región de Zaporiyia, Ivan Fedorov.

Una vista del daño después del ataque aéreo de Rusia en un edificio residencial, en Zaporiyia, Ucrania, el viernes 22 de marzo de 2024.
Una vista del daño después del ataque aéreo de Rusia en un edificio residencial, en Zaporiyia, Ucrania, el viernes 22 de marzo de 2024. - Créditos: @Andriy Andriyenko

“Brutales bombardeos”

La Casa Blanca condenó los ataques y sostuvo que los republicanos en el Congreso deben cesar con su “inexcusable” bloqueo a la ayuda militar para Kiev.

“Condenamos los brutales bombardeos lanzados en la madrugada contra ciudades e infraestructuras civiles de Ucrania”, dijo en un comunicado Adrienne Watson, portavoz del Consejo Nacional de Seguridad.

Según la portavoz, se trata de la “mayor serie de ataques aéreos lanzados por Rusia contra la red energética de Ucrania desde el inicio de esta guerra”, en febrero de 2022.

Rusia disparó casi 90 misiles y más de 60 drones, dañando docenas de instalaciones energéticas, incluidas centrales eléctricas y la mayor planta hidroeléctrica del país, y causando la muerte de al menos cinco personas, informaron las autoridades ucranianas.

“Es fundamental que proporcionemos a Ucrania interceptores de defensa aérea adicionales para defenderse de estos ataques lo antes posible. Hay vidas en juego y cualquier otro retraso es inexcusable”, añadió Watson. “Los republicanos de la Cámara deben aprobar el suplemento de seguridad nacional ahora para que podamos proporcionar este equipo vital a Ucrania”, instó.

En el Congreso estadounidense, los republicanos llevan meses bloqueando la llamada petición suplementaria del presidente demócrata Joe Biden de 60.000 millones de dólares en asistencia militar para Kiev.

Apagones

Los ataques contra instalaciones energéticas en la región de Kharkiv causaron apagones en la segunda mayor ciudad del país e interrumpieron el funcionamiento de las cruciales alarmas antiáreas. El gobernador regional, Oleh Syniehubov, indicó que la policía informará a los residentes de los posibles ataques aéreos con altavoces e intercomunicadores, y se enviarán alertas a los celulares.

Además, se reportaron otros incidentes en el oeste del país, lejos de la línea del frente. Dos personas perdieron la vida en la provincia de Khmelnytskyi, de acuerdo con el Ministerio del Interior.

Los apagones dejaron a 1060 mineros atrapados en la provincia de Dnipropetrovsk, según la empresa privada DTEK, que añadió que las labores de evacuación estaban en marcha.

“El mundo ve los objetivos de los terroristas rusos de la forma más clara posible: centrales eléctricas y líneas de suministro de energía, una represa hidroeléctrica, edificios residenciales corrientes, incluso un trolebús. Rusia está luchando contra la vida cotidiana de la población”, dijo el presidente, Volodymyr Zelenskyy, en la aplicación de mensajería Telegram el viernes.

En esta foto proporcionada por el Servicio de Emergencia de Ucrania, el personal de emergencia ucraniano trabaja en el lugar del ataque aéreo de Rusia en Khmelnytskyi, Ucrania, el viernes 22 de marzo de 2024.
En esta foto proporcionada por el Servicio de Emergencia de Ucrania, el personal de emergencia ucraniano trabaja en el lugar del ataque aéreo de Rusia en Khmelnytskyi, Ucrania, el viernes 22 de marzo de 2024.

Por otra parte, las autoridades rusas reportaron el viernes que una persona murió y al menos tres más resultaron heridas a causa de los bombardeos ucranianos cerca de la frontera.

Según el gobernador regional de Belgorod, Vyacheslav Gladkov, una mujer falleció por el impacto de un proyectil cerca del lugar por donde paseaba a sus perros y otras dos personas sufrieron lesiones.

Además, los ataques sobre la ciudad de Tetkino, en la región de Kursk, dejaron un herido, apuntó su gobernador, Roman Starovoit.

Ambas regiones han sido objeto de bombardeos y ataques con drones en las últimas semanas, y las autoridades dijeron que se repelieron los intentos de incursión por parte de combatientes ucranianos.

Según el Financial Times, Estados Unidos habría instado a Ucrania a detener los ataques a la infraestructura energética de Rusia, advirtiendo que estas acciones amenazan con hacer subir los precios mundiales del petróleo y provocar represalias.

Las fuentes consultadas, que hablaron bajo condición de anonimato, indicaron que las advertencias de Washington fueron trasladadas a altos funcionarios del servicio de seguridad estatal de Ucrania, el SBU, así como a la dirección de inteligencia militar, conocida como GUR, que han venido ampliando el alcance de sus propios programas de drones para atacar objetivos rusos.

En este sentido, una de las personas dijo que la Casa Blanca se había sentido cada vez más frustrada por los ataques con aparatos no tripulados ucranianos contra refinerías, terminales, depósitos e instalaciones de almacenamiento de petróleo en todo el oeste de Rusia, perjudicando la capacidad de producción de petróleo de uno de los mayores exportadores de energía del mundo a pesar de las sanciones occidentales a su sector de petróleo y gas

Asimismo, a Washington también le preocuparía que si Ucrania insiste en seguir atacando instalaciones rusas, muchas de las cuales se encuentran a cientos de kilómetros de la frontera, Rusia podría tomar represalias contra infraestructura energética de la que depende Occidente, incluyendo el oleoducto CPC que transporta petróleo desde Kazajistán a través de Rusia y que usan compañías occidentales como ExxonMobil y Chevron.

Agencias AP y AFP