Tras retraso en convocatoria para la compra consolidada de medicamentos, Salud ahora aplaza cinco días más el fallo
La Secretaría de Salud aplazó cinco días más el fallo de la licitación para abastecer hasta 3 mil 900 claves de medicamentos para la compra consolidada 2025-2026 del sector salud. Eso a pesar de que en diciembre ya se había retrasado la emisión de la convocatoria.
A través de una ficha informativa, la dependencia que dirige David Kershenobich detalló que se recibieron más de 400 ofertas para abastecer 98.5 % de los medicamentos que se necesitan para el periodo, cantidad que calificaron de “histórica” y fue esa la razón que le dieron al aplazamiento.
A pesar de los retrasos de diciembre y este nuevo, la dependencia aseguró que la ampliación del plazo para definir qué proveedores serán los adjudicados no afectará los tiempos de entrega de los medicamentos.
Esta compra consolidada se da en el marco de un nuevo sistema de compra, que el gobierno presentó en octubre pasado. En ese momento se informó que la convocatoria de la licitación debía publicarse el 2 de diciembre, pero hasta el día 10 no se había publicado.
El nuevo proceso para adquirir medicinas: totalmente digital
Eduardo Clark, subsecretario de Integración y Desarrollo de Salud, detalló el pasado 31 de octubre (cuando se presentó el nuevo proceso) que el nuevo modelo de compra busca implementar sistemas digitales en todo el proceso para garantizar la transparencia y la máxima participación nacional e internacional de proveedores.
Clark aseguró que la planeación a largo plazo, con compras cada dos años, ayudará a garantizar el abasto. Además, explicó que los pedidos no se realizarán basados en cuánto medicamento habían podido adquirir las unidades médicas con su presupuesto en años anteriores, sino en cuántos insumos necesitan para atender a la población de acuerdo con los equipos médicos con los que cuentan.
De acuerdo con Eduardo Clark, la Secretaría de Salud será la encargada de todo el proceso en la compra de medicamentos para el IMSS, ISSSTE, IMSS-Bienestar y otras instituciones médicas de gobierno.
Las instituciones de salud definirán cuántos medicamentos requieren, de qué tipo y en dónde los requieren. Posteriormente, la Secretaría de Salud verificará si los medicamentos solicitados son relevantes terapéuticamente, si la calidad y la cantidad son correctas, y qué posibilidades tienen de negociar los precios.
Una vez concluida la planeación, el equipo de Laboratorios de Biológicos y Reactivos de México (Birmex), hace la compra. Para ello invita a proveedores a ofertar sus medicamentos y adjudica a los mejores postores los contratos.
¿Qué pasará con los medicamentos que no recibieron oferta?
La Secretaría de Salud detalló que el pasado 1 de enero inició el proceso administrativo para que Birmex realice la adjudicación de las piezas y se contará con el acta de fallo concluida el 13 de enero.
Dado que solo se recibieron ofertas para 98.5 % de los medicamentos que se necesitan y la dependencia solo negoció 348 claves directamente con laboratorios que manejan patentes especiales, se deberá abrir un nuevo proceso para cumplir con el 100 % de los medicamentos que se necesitan a nivel nacional.
También lee: Cubrir el abasto de medicamentos, una promesa que AMLO no pudo cumplir
“Iniciaremos un nuevo proceso enfocado en cubrir el porcentaje restante. Desde el 26 de diciembre hemos llevado a cabo reuniones con la industria y con las instituciones del sector salud para iniciar este proceso a partir del día 17 de enero iniciar la segunda ronda”.
Abasto de medicinas: el pendiente que dejó la austeridad
En marzo de 2024, Animal Político publicó que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador dejó de surtir 15 millones de recetas de pacientes de los servicios médicos públicos, una cifra que representa 5 veces más que las recetas no surtidas en 2018, último año del gobierno de Enrique Peña Nieto, cuando fueron 3.1 millones.
Y aun cuando no hay abasto de medicinas, tampoco se han conseguido ahorros. Hoy se gasta 29% más de lo que se gastó el sexenio pasado, aunque se compran menos medicinas.
El resultado: los pacientes gastaron 39% más en la compra de medicinas en 2022 que en 2018, en términos reales, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares 2022.