Un rastro de sangre y desolación muestran el camino de la derrota del Caos en la UFC de Tampa

Durante mucho tiempo, Colby Covington fue uno de los pilares de la división welter. Esos días, sin embargo, parecen haber finalizado, porque el sábado en la noche el peleador conocido como “Caos’‘ resultó apenas una sombra de su mejor versión.

Joaquin Buckley es el último guerrero de 170 libras que se ha abierto paso hasta la élite tras vencer a Covington en el evento UFC Fight Night que tuvo lugar en la Amelie Arena de Tampa para poner punto final a una temporada inolvidable de la mejor empresa de artes marciales del mundo.

Decir que vapuleó a Covington no hace justicia al tremendo castigo que tuvo lugar de principio a fin, pues el joven guerrero conectó con potentes combinaciones que pusieron a prueba la siempre resistente barbilla del veterano, al punto que un médico indicó poner punto de cierre a la pelea en el tercer asalto.

“Va a perder el párpado’‘, comentó el médico de la Comisión de Florida al árbitro Dan Miragliotta, que dio por concluida la pelea a las 4:42 minutos del tercer asalto, mientras Covington no parecía poner mucha protesta en contra de la decisión del galeno.

Aunque Buckley nunca derribó ni estremeció del todo a Covington, su victoria sobre el ex campeón interino del peso welter de la UFC fue bien merecida, porque lo superó de manera evidente y lo castigó con ganchos al cuerpo y volados a la cabeza que no hacían presagiar nada bueno para “Caos’‘.

Cuanco salgan los rankings el martes, Buckley (21-6) ocupará probablemente puesto 6 de Covington en el top 15 del peso welter de la UFC, aunque el ganador no estaba muy contento con su faena, pues esperaba una acción espectacular de su parte.

“Gracias Florida, ustedes han sido muy buenos conmigo’‘, apreció Buckley, quien ha estado imparable desde que descendió del peso mediano a las 170 libras, donde ha eslabonado una cadena de seis triunfos. “Sé que querían ver un nocaut. Lo siento’‘.

Más allá del resultado, Buckley demostró que ahora ocupa un lugar importante entre los luchadores de élite en la división welter junto a Shavkat Rakhmonov, Jack Della Maddalena, Ian Machado Garry y Carlos Prates, que van ocupando los puestos de veteranos como Gilbert Burns, Kamaru Usman y un Covington que ya no da más.

En primera fila, muy cerca del octágono, se encontraba Usman, quien pareció algo sorprendido cuando escuchó su nombre en boca del ganador del combate en Tampa.

“Creo que será Kamaru Usman, baby’‘, agregó Buckley, quien se guardó de retar al campeón vigente Belal Muhammad que muy seguramente va contra Rakhmonov en algún momento del próximo verano. “Vamos hombre’‘.