Mueren dos crías de mono aullador después de ser trasladadas al Edomex; Semarnat niega responsabilidad pese a advertencias

Dos de las nueve crías de monos aulladores, trasladadas de Tabasco al Estado de México murieron en su nuevo recinto. La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) indicó que la causa fueron las “condiciones de salud desfavorables” con las que llegaron.

Sin embargo, previamente, la organización Conservación de la Biodiversidad del Usumacinta (Cobius) había alertado que el nuevo hogar de los ejemplares no contaba con la infraestructura ni el personal adecuado para atenderlos.

A través de un comunicado, la Semarnat informó que ocho de los ejemplares se encontraban en estado de nutrición desfavorable cuando fueron entregados a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).

“Aunque se han logrado estabilizar dentro de este periodo de cuarentena a seis crías, dos de los ocho organismos lamentablemente fallecieron a causa de complicaciones metabólicas por su temprana edad”, detalló el boletín.

Pero el doctor Gilberto Pozo Montuy, director de Cobius, aseguró que las crías de mono aullador, también conocidos como monos saraguatos,  habían salido de la organización “en buen estado de salud”, incluso dijo que cuentan con un acta de requerimiento firmada por Profepa donde se establece el buen estado de los primates.

“Nosotros se lo dijimos de forma personal al médico encargado de trasladarlos, que iba a ser bajo su responsabilidad todo lo que ocurriera a esas crías. Iba a ser responsabilidad de la autoridad por su incompetencia, por su mala decisión, por no querer colaborar localmente”, dijo en respuesta al comunicado de Semarnat.

El primatólogo también informó que enviaron correos y cartas a la directora de vida silvestre de la Semarnat advirtiendo los riesgos de trasladar a los monos aulladores.

Semarnat traslada crías de mono aullador pese a advertencias

El 23 de junio de 2024, Cobius compartió a través de un comunicado de prensa que la Semarnat le estaba solicitando diversos ejemplares de mono aullador para su traslado.

Cuatro ejemplares serían llevados a la Unidad de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre (UMA) de Manejo Intensivo “Centro de Interpretación y Convivencia con la Naturaleza Yumka”. Dicho traslado no tuvo objeciones, pues de acuerdo con Cobius, es un “sitio que cuenta con las instalaciones y el personal necesario para dar continuidad a los procesos de rehabilitación”.

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Tres hembras adultas serían liberadas en la UMA “El Mono del Cacao”, a lo que la organización se opuso, pues es un centro “saturado de saraguatos”. Además, liberar un grupo de hembras sin ningún macho adulto “no considera la estructura social de los grupos en vida libre”.

Las nueve crías huérfanas también serían trasladadas al centro “El Mono del Cacao”, pero se desistió y fueron llevadas a Yumka; sin embargo, no tenían la capacidad para atenderlas las 24 horas, por lo que las trasladaron al Centro para la Conservación e Investigación de la Vida Silvestre (CIVS) en Los Reyes la Paz, Estado de México.

Finalmente, el 29 de junio, Cobius realizó un video en vivo en el que mostraba a las crías de mono aullador antes de ser trasladadas por la Profepa. Ese mismo día, la Semarnat anunció el traslado sin mencionar que estuvieran en mal estado.

“Como pueden observar, no presentan deshidratación, diarrea, no están tristes. Ellos están plenamente bien”, se escucha en el video.

En la misma publicación, la persona que se encontraba grabando dice: “Nosotros esperamos que este cambio no les vaya a generar daños o vaya a costarles la vida”.

Semarnat argumenta que crías de mono aullador llegaron en mal estado

El 16 de julio, la Semarnat emitió un comunicado de prensa en el que informaba sobre el estado de salud de las nueve crías de mono saraguato. Declararon que ocho se encontraban en estado desfavorable al ser entregados a la Profepa.

Un día después, en respuesta a las notas periodísticas, “que señalan la decisión errónea de trasladar a las crías de monos saraguato”, la secretaría detalló que “fueron diagnosticadas con un estado de nutrición desfavorable para su edad y con una carga parasitaria alta”.

Además, argumentaron que en Cobius la atención médica proporcionada fue únicamente de primeros auxilios y cuidados paliativos y que “no contaban con las instalaciones médicas adecuadas para su atención integral y especializada”.

Por último, señalaron que siete de las crías ya se encuentran estabilizadas “gracias al apoyo de la UMA del gobierno de la Ciudad de México y sus especialistas primatólogos, con casi 30 años de experiencia”.

¿Qué está pasando con los monos aulladores?

En mayo de este año, Animal Político informó sobre la muerte de al menos 78 monos aulladores en Tabasco y el noroeste de Chiapas.

Las causas en ese entonces eran desconocidas; sin embargo, se creía que era debido a golpes de calor y deshidratación por las altas temperaturas que azotaban la entidad.

Sumando a esto, la degradación de su hábitat natural, que provoca la escasez de agua y alimento, así como los incendios de pastizales y zonas agrícolas.

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En el último reporte, Semarnat determinó la muerte de al menos 222 monos aulladores, de los cuales 158 fallecieron en Tabasco, 37 en Chiapas, 24 en Veracruz y 3 en Campeche.

¿Por qué murieron?

Cobius, junto con la Alianza Nacional para la Conservación de Primates y SOS Saraguatos, realizó análisis de laboratorio para conocer el motivo de la muerte de los primates.

Los resultados señalaron que, de forma general, el detonante de la mortalidad fue el incremento de la temperatura y su permanencia por más de 30 días por encima de los 42 grados centígrados.

Además de estrés debido a la degradación de su hábitat y la baja calidad del alimento, provocando inflamación aguda y una respuesta inmune insuficiente.

Los ejemplares estudiados presentaban lesiones que sugieren enfermedades parasitarias y virales, que se pudieron haber complicado con el golpe de calor.

Algunos también tenían edemas pulmonares atribuibles a la alta presencia de incendios agropecuarios y forestales, lo que a su vez predispuso a los ejemplares a enfermedades bacterianas e infecciosas.