“Es una competencia desleal”: el antes y el después del megaoperativo porteño por los manteros en Once
“Pagamos cuatro millones de pesos por mes en alquileres, más impuestos y servicios, mientras en la vereda están vendiendo lo mismo sin ningún control. Es una competencia desleal”, se quejó Ricardo Fernández, propietario de una tienda de ropa ubicada en la intersección de Sarmiento y la Avenida Pueyrredón, en la zona de Once. Mariana Álvarez, dueña de un local de artículos electrónicos a pocas cuadras, en Pueyrredón y Bartolomé Mitre, también compartió su frustración: “Nosotros hacemos malabares para mantener todo en regla. Pagamos impuestos y alquileres altísimos, y aun así la gente sigue creyendo que comprarle a un mantero es más barato. Pero muchas veces tenemos mejores precios porque compramos al por mayor”.
Estos reclamos de los comerciantes, que vienen de larga data, se repiten por doquier en esa zona. De hecho, esta mañana la Policía de la Ciudad realizó un operativo encabezado por el Ministerio de Seguridad porteño, en el que se allanó 197 depósitos de manteros en busca de mercadería falsificada. El procedimiento, que incluyó a 600 efectivos, estuvo dirigido por el ministro de Seguridad, Waldo Wolff, y contó con la participación de diversas divisiones, como la de Investigaciones Especiales. Según las autoridades, el objetivo fue combatir la venta ilegal que, desde hace años, afecta tanto a los comerciantes establecidos como a los vendedores informales.
“La venta ilegal en Once no solo perjudica a los comerciantes que cumplen con la ley, sino que también fomenta redes de contrabando y trabajo esclavo”, explicó Wolff en conferencia de prensa. “Estos operativos buscan desarticular una estructura de ilegalidad que afecta a toda la ciudad”, agregó.
Los allanamientos, que se realizaron bajo una orden emitida por el Juzgado en lo Penal, Contravencional y de Faltas 26, a cargo del juez Nicolás Repetto, incluyeron el desalojo y la incautación de grandes cantidades de mercadería. El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, celebró la operación como un golpe importante contra la ilegalidad: “En Once se terminó la joda. Le dimos un golpe durísimo a la mafia que inundaba de suciedad y trabajo esclavo las calles. Recuperar la libertad también es hacer cumplir la ley. Felicitaciones a los 600 policías que participaron”.
El conflicto con los manteros
Mientras tanto, los manteros que habían sido trasladados meses atrás a la Feria de la Estación, ubicada a metros de la intersección de Sarmiento y Boulogne Sur Mer, esperaban poder regularizar su situación en ese espacio y vender sus productos legalmente, pero las operaciones allí no cumplieron con sus expectativas, según indicaron a LA NACIÓN.
“Nos prometieron que si nos mudábamos a la feria, todo iba a estar bien, pero ahora nos quitan lo poco que tenemos”, dijo Maritza Huamán, mientras la Policía incautaba las bolsas de ropa de su puesto. Hace unos meses, varios de estos vendedores ambulantes fueron acreditados por las autoridades y trasladados a la Feria de la Estación, donde les prometieron un lugar para vender sus productos de manera legal. “Invertí todos mis ahorros en montar mi puesto y ahora no tengo ni para comer. Casi nadie viene a comprar acá”, explica Jaime Quispe, otro vendedor peruano que se instaló en la feria con la esperanza de mejorar su situación.
Durante los allanamientos que se realizaron entre la madrugada y la mañana de hoy, los efectivos incautaron toda la mercadería que estaba en bolsas cerradas bajo el argumento de que esos productos eran de manteros y los puestos estaban siendo usados como depósitos. Sin embargo, estos vendedores afirmaron que gran parte de esa mercadería les pertenecía y estaba destinada a sus puestos en la feria. “Yo pago para estar aquí y aun así se llevaron mi mercadería. Es mi sustento, lo que me permite vivir día a día”, indicó Rosa Quispe . “Nos tratan como si fuéramos delincuentes, pero solo estamos tratando de sobrevivir”, concluyó.
Postura oficial
Desde el Ministerio de Seguridad porteño, las autoridades defendieron la legalidad del operativo y aseguraron que fue ejecutado en cumplimiento de una orden judicial. “Estamos ejecutando una manda del juez Repetto que busca frenar la venta de mercadería falsificada. Los depósitos de los manteros forman parte de esta estructura de ilegalidad y vamos a seguir trabajando para desarticularla”, afirmó Diego Kravetz, secretario de Seguridad.
Las autoridades sostuvieron que la venta ilegal no solo perjudica a los comerciantes formales, sino que también genera un mercado paralelo donde no se respetan las normativas laborales ni de comercio. “La informalidad fomenta redes de trabajo esclavo y contrabando, y afecta a los sectores más vulnerables, tanto a los manteros que son explotados, como a los comerciantes que no pueden competir de manera justa”, expresó Kravetz.
Por su parte, desde el gobierno de la Ciudad afirmaron que continuarán con los operativos para garantizar el cumplimiento de la ley y reordenar el espacio público, aunque reconocen que la solución al conflicto de los manteros no será sencilla ni rápida.