Alejandro Toledo, expresidente de Perú, condenado a 20 años de cárcel por el caso Odebrecht

Alejandro Toledo, expresidente de Perú, condenado a 20 años de cárcel por el caso Odebrecht

El expresidente Alejandro Toledo, de 78 años, que gobernó entre 2001 y 2006, ha pasado de haber denunciado la corrupción y el autoritarismo del régimen de Alberto Fujimori, a ser condenado por corrupción. Ha sido sentenciado a 20 años y seis meses por haber recibido un soborno de 35 millones de dólares (32 millones de euros) de la constructora brasileña Odebrecht para otorgarle en 2005 la licitación para la construcción de la carretera Interoceánica que une Brasil con la costa del Perú.

"Este colegiado asume el pedido hecho por la Fiscalía de 20 años y 6 meses de prisión para el señor Alejandro Toledo Manrique", anunció la Corte Superior en una audiencia en la que estuvo presente el exmandatario.

Un caso de corrupción que involucra a otros tres exmandatarios

Tras el escándalo de corrupción de Odebrecht, el pago de este soborno fue revelado, en noviembre de 2016, por el entonces jefe de la constructora en el Perú, Jorge Barata, como parte de un acuerdo con la Fiscalía para no ser acusado.

Los fiscales probaron que Maiman transfirió más de diez millones de dólares a una 'offshore' abierta a nombre de la suegra del expresidente. Con esta sentencia, Toledo se convierte en el primer presidente peruano en ser condenado por la trama de corrupción de Odebrecht, que involucra a otros tres exmandatarios.

La cola de corrupción de la constructora brasileña ha puesto ante la Justicia a otros cuatro expresidente peruanos, Alejandro Toledo, Alan García, Ollanta Humana y Pedro Pablo Kuczynski.

Toledo cumplirá condena en una prisión exclusiva

El exmandatario cumplirá su condena en una prisión exclusiva para expresidentes en la que ya estaba con detención preventiva desde abril de 2023, cuando fue extraditado desde Estados Unidos.

Las autoridades acusaron a Toledo de aceptar los 35 millones de dólares en sobornos de Odebrecht a cambio de permitir la construcción de una carretera en el país sudamericano. La Corte Superior Nacional de Justicia Penal Especializada de la capital, Lima, impuso la sentencia tras años de disputas legales, incluida una disputa sobre si Toledo, quien gobernó Perú de 2001 a 2006, podría ser extraditado desde Estados Unidos.

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La juez Inés Rojas dijo que las víctimas de Toledo fueron peruanos que "confiaron" en él como su presidente. Rojas explicó que en ese papel, Toledo estaba "a cargo de administrar las finanzas públicas" y era responsable de "proteger y asegurar el correcto" uso de los recursos. En cambio, dijo, "defraudó al Estado".

Agregó que Toledo "tenía el deber de actuar con absoluta neutralidad, proteger y preservar los bienes del Estado, evitando su abuso o explotación", pero no lo hizo.

Odebrecht, el gigante de la construcción en América Latina

Odebrecht, que construyó algunos de los proyectos de infraestructura más cruciales de América Latina, admitió ante las autoridades estadounidenses en 2016 haber comprado contratos gubernamentales en toda la región con generosos sobornos. La investigación del Departamento de Justicia de Estados Unidos dio lugar a pesquisas en varios países, incluidos México, Guatemala y Ecuador.

En Perú, las autoridades acusaron a Toledo y a otros tres expresidentes de recibir pagos del gigante de la construcción. Afirmaron que Toledo recibió esos 35 millones de dólares de Odebrecht a cambio del contrato para construir 650 kilómetros de una carretera que une Brasil con el sur de Perú. Se estimó inicialmente que esa parte de la carretera costaría 507 millones de dólares, pero Perú terminó pagando 1.250 millones de dólares (1.155 millones de euros).

Toledo niega las acusaciones en su contra y apelará la sentencia

Toledo ha negado las acusaciones en su contra. Su abogado, Roberto Siu, dijo a los periodistas después de la audiencia que apelarán la sentencia. El expresidente sonrió con frecuencia el lunes durante la vista, y a veces se rió, particularmente cuando la juez mencionó sumas multimillonarias centrales para el caso, así como cuando tuvo dificultades para leer las transcripciones y otras pruebas del caso.

La semana pasada, Toledo pidió al tribunal con la voz quebrada y las manos juntas, como si estuviera rezando, que lo dejaran regresar a casa citando su edad, cáncer y problemas cardíacos.

Toledo fue arrestado por primera vez en 2019

Toledo fue detenido por primera vez en 2019 en su casa de California, donde estuvo viviendo desde 2016, cuando regresó a la Universidad de Stanford como profesor visitante para estudiar la educación en América Latina. En un principio, el político estuvo recluido en régimen de aislamiento en una cárcel del condado al este de San Francisco, pero en 2020 fue puesto en libertad bajo arresto domiciliario debido a la pandemia de COVID-19 y al deterioro de su salud mental.

Fue extraditado a Perú en 2022 después de que un tribunal de apelaciones denegara una impugnación a su extradición y se entregara a las autoridades. Desde entonces ha permanecido bajo prisión preventiva.

Una prisión construída específicamente para expresidentes peruanos

Rojas dijo que Toledo recibirá crédito por el tiempo cumplido a partir de abril de 2023. Cumplirá el resto de su condena en una prisión en las afueras de Lima que fue construida específicamente para albergar a expresidentes peruanos. El fiscal José Domingo Pérez calificó la sentencia como "histórica" tras la audiencia y dijo que demuestra a los peruanos que "los delitos y la corrupción se castigan". Odebrecht cambió su nombre a Novonor en 2020.