Una trágica muerte y una vida para recordar. Roberto Clemente presente a 52 años de su fallecimiento

El propietario de los Piratas, Robert Nutting (derecha), entrega al relevista David Bednar el premio Roberto Clemente, antes del partido ante los Reales de Kansas City, celebrado el 15 de septiembre de 2024 en Pittsburgh.

Fue un héroe del deporte de las bolas y los strikes que sirvió de inspiración para centenares de peloteros y lo debe seguir siendo para las futuras generaciones.

Por su excelencia en el terreno de juego y por su conducta ejemplar como ser humano, su nombre merece un tributo eterno.

Hoy, queremos recordar la historia del legendario atleta puertorriqueño Roberto Clemente en el aniversario 52 de su muerte ocurrida el 31 de diciembre de 1972 cuando se trasladaba en un avión DC7 a Managua, Nicaragua, con un cargamento de ayuda humanitaria para los damnificados del terremoto ocurrido ocho días antes (23 de diciembre).

Clemente nació el 18 de agosto de 1934 en el barrio de San Antón en Carolina, Puerto Rico. Fue el menor de cuatro hermanos cuyos padres fueron Melchor Clemente y Luisa Walker.

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Su debut en Grandes Ligas ocurrió el 17 de abril de 1955 con los Piratas de Pittsburgh y su último juego fue el 3 de octubre de 1972 con el mismo equipo.

Fue uno de los peloteros más dominantes de su época. Por sus jugadas sensacionales y por sus tiros precisos a las bases, ganó 12 premios Guantes de Oro consecutivos entre 1961 y 1972.

Para muchos expertos, ha sido el mejor jardinero derecho defensivo de la historia. A la defensa está ubicado como segundo de la historia en asistencias en su posición con 256, solo superado por Harry Hooper.

Sus 4,471 outs realizados también lo ubica segundo detrás de Paul Waner.

A la ofensiva conquistó cuatro coronas de bateo, alcanzó 3,000 imparables para ser el décimo jugador en lograrlo, su promedio fue de .317, sumó 3,000 imparables, 240 cuadrangulares, 1,416 anotadas, 1,305 remolques, .359 de embasamiento, 83 bases robadas, 4,492 en total de bases y un OPS de .834.

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Clemente bateó por encima de la marca de .300 en 13 de sus 18 temporadas, siendo la mejor en 1967 con .357 de promedio, 209 imparables, 23 cuadrangulares, 110 impulsadas y .400 de embasamiento.

En cuatro temporadas acumuló más de 200 incogibles liderando dos veces en 1964 con 211 y en 1967 con 209. Impulsó más de 80 carreras siete veces con tres superando las 100.

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Ganó el premio Babe Ruth en 1971 y su WAR Jugador es de 94.9 que lo ubica en el lugar 25 de todos los tiempos.

Participó en 15 Juegos de Estrellas y en 1966 obtuvo la distinción de Jugador Más Valioso de la Nacional. Ganó dos Series Mundiales, la primera en 1960 ante los Yankees de Nueva York con un promedio de .310 y luego en 1971 frente a Baltimore (.414); pegando un jonrón en el séptimo juego que le sirvió para ser elegido el Más Valioso.

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En 26 partidos de postemporada su average fue de .318. De no haber sido por su fallecimiento a los 37 años los números de Clemente hubieran sido mejores, pues aún estaba en buenas condiciones para jugar al menos otras dos o tres temporadas.

En su última campaña de 1972 tuvo promedio de .312 con 118 imparables (378 turnos), .356 de embasamiento, 60 remolques y 68 anotadas.

A la defensa actuó sin cometer errores en 88 partidos.El 8 de agosto de 1973, Clemente fue elegido de manera póstuma al Salón de la Fama del béisbol de Grandes Ligas, en Cooperstown.

Este mismo día fue establecido el premio que lleva su nombre que se le otorga al jugador con servicios destacados a la comunidad y excelencia en el terreno.

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En Puerto Rico fue nombrado Atleta del Siglo XX y en 2002 las Grandes Ligas instituyó la fecha del 18 de septiembre como el “Día de Roberto Clemente’’.

Además de su brillante desempeño como jugador, Clemente se destacó por su lado humano en defensa de los jugadores latinoamericanos en una etapa donde todavía prevalecía la discriminación racial en Estados Unidos, así como la preocupación constante que tuvo por la juventud de su país natal.

Luego de su muerte fue honrado por el entonces presidente Richard Nixon con la “Medalla de Ciudadanos y la del Congreso’’, mientras que en 2003 se le otorgó por George W. Bush la ‘’Medalla de La Libertad’’, que es el más alto honor que se le entrega a un ciudadano civil en Estados Unidos.

Roberto Clemente estuvo casado con Vera Cristina Zabani y la pareja tuvo tres hijos.