Quién es Simona Brambilla, la primera mujer en la historia que tendrá el cargo de prefecta en el Vaticano
Una mujer, por primera vez en la historia, dirigirá una de las principales instituciones religiosas del Vaticano.
Se trata de la monja Simona Brambilla, de 59 años, que ha sido nombrada este lunes por el papa Francisco como prefecta del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, un organismo de la Santa Sede.
Esta designación significa que Brambilla será la máxima autoridad de una institución religiosa que tiene como misión supervisar las órdenes religiosas, tanto para hombres como para mujeres, y las relaciones con sus fieles.
"Le pido al Señor la gracia de que podamos abrir nuestros corazones cada vez más para recibir este aliento y dejar que nos transforme como personas, como comunidad, como la Iglesia y como humanidad", había dicho Brambilla en diciembre.
Este nombramiento confirma la voluntad expresada por el papa Francisco de dar a las mujeres un mayor lugar en las posiciones de liderazgo al interior de la Iglesia católica.
Sin embargo, el Papa nombró junto a ella al cardenal Ángel Fernández Artime como proprefecto para acompañarla en la tarea, lo que plantea dudas para los especialistas sobre la división de responsabilidades y la posible reducción del papel de la religiosa.
En cualquier caso, la agencia de noticias AP señala que teológicamente, parece que Francisco creía que el nombramiento de Fernández era necesario, ya que el jefe de la oficina debe poder celebrar la misa y realizar otras funciones sacramentales que actualmente sólo pueden llevar a cabo los hombres.
"La designación de Brambilla es una constatación de una realidad presente hace mucho, que es la superioridad numérica de las mujeres en la Iglesia en todas las instancias", le dice a BBC Mundo la doctora en Ciencias Sociales, Sol Prieto, investigadora y profesora de Sociedad y Religión de la Universidad de Buenos Aires.
De acuerdo al Anuario Estadístico de la Iglesia de 2022, publicado por el Vaticano, hay más religiosas mujeres que sacerdotes y diáconos. Las casi 600.000 mujeres religiosas profesas –o monjas– superaron en casi un 47% al número de sacerdotes en todo el mundo.
"Pero este reconocimiento no pasa solo por la estadística. Además, tiene que ver con el diálogo al interior del mundo religioso. Es un gesto vinculado al proceso de sinodalidad que está atravesando la Iglesia, es decir, al momento de discusión que se está dando en la Iglesia católica en los llamados sínodos", agrega Prieto.
Los sínodos son encuentros en los que los jerarcas católicos discuten asuntos importantes que afectan a la Iglesia, como la familia, el matrimonio o el sacerdocio.
Una reforma que el papa Francisco introdujo en el último fue la participación de sacerdotes, religiosas y religiosos, laicas y laicos en igualdad de condiciones que los obispos.
Sobre este punto, la futura perfecta dijo el mes pasado que el sínodo "es soplo, susurro, movimiento que transforma, libera, une y armoniza, sin aplanar jamás" y pidió "abrir cada vez más nuestros corazones para recibir este soplo y dejar que nos transforme como personas, como comunidad, como Iglesia y como humanidad".
Desde hace poco más de un año, Brambilla ocupa el puesto de secretaria en el dicasterio que ahora dirigirá, es decir, es la número dos.
Por eso, su nombramiento es interpretado por los especialistas como un ascenso clave que puede abrir puertas a otras designaciones y, en definitiva, a un cambio crucial sobre el papel de las mujeres en las instituciones católicas.
Quién es Simona Brambilla
Simona Brambilla, nacida en la ciudad de Monza, en Italia, estudió enfermería antes de unirse al Instituto de las Hermanas Misioneras de Consolata, que dirigió de 2011 a 2023, y tiene experiencia como misionera en Mozambique.
El puesto que pasará a ocupar, en términos de organigrama, es la autoridad más importante después del Papa respecto a las definiciones de la Iglesia católica en lo que concierne a la vida religiosa, según la investigadora.
"Pero cuidado, los institutos de la vida religiosa si bien forman parte de la Iglesia son espacios con mucha autonomía dado que no se rigen por la misma lógica vertical del clero secular", aclara Prieto, autora del libro "El fin del mundo. El fenómeno del papa Francisco desde la sociología" (Eduvim, 2016).
La designación no ha sido sorpresiva ya que responde a un proceso progresivo de incorporación de las mujeres religiosas en instancias de decisión dentro de las estructuras de la Santa Sede.
Hasta antes de 2019, todos los miembros del Dicasterio para la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica habían sido hombres, lo que había generado algunas críticas internas debido a la ausencia de mujeres en puestos de toma de decisiones.
Pero ese año, Francisco nombró por primera vez a siete mujeres como miembros del dicasterio y, más tarde, Brambilla fue elegida primero como su secretaria y ahora como prefecta.
Desde el comienzo del pontificado de Francisco, la presencia de mujeres en el Vaticano ha ido en aumento.
En 2016, Barbara Jatta fue designada directora de los Museos Vaticanos y, en 2022, Raffaella Petrini fue nombrada secretaria general de la Gobernación, cargo habitualmente asignado a un obispo.
Según Vatican News, el porcentaje de mujeres pasó de representar el 19,2% en 2013 al 23,4% en 2023.
Para eso fue necesaria la reforma la Constitución de la Santa Sede de 2022, que permitió a los laicos, incluidas las mujeres, dirigir un dicasterio y convertirse en prefectos.
Si bien los cambios son paulatinos, la designación de la italiana confirma la voluntad de Francisco de ampliar el espacio a las mujeres religiosas, una decisión resistida en el interior de los sectores más conservadores de la Iglesia católica.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR | EN VIDEO
El papa Francisco pide condonar la deuda de los países más pobres