Notre-Dame, el suntuoso renacer de la catedral de París

La noticia le dio la vuelta al mundo: la catedral Notre-Dame de París abrió sus puertas luego de una increíble restauración que duró cinco años. Se utilizaron técnicas ancestrales y tecnología de punta para este monumento. Fuimos al Museo Cluny donde se conservan las estatuas medievales que han sobrevivido a los sobresaltos de la historia. La semana inaugural incluyó una Fiesta mexicana en honor a la Virgen de Guadalupe, cuya imagen regresó a su capilla en el corazón de la catedral.

La construcción de Notre-Dame comenzó en 1163 y tardó 182 años en completarse. Desde entonces, la catedral ha deslumbrado por sus volúmenes imponentes, su arquitectura refinada y luminosa. Se encuentra en la céntrica isla de la Cité, donde se fundó la ciudad de París. Y a través de los siglos ha sido una referencia religiosa y patrimonial.

“Notre-Dame de París representa a Francia. En primer lugar, porque es una catedral gótica, y el gótico es el arte francés por excelencia. Además, se encuentra en el centro de París y ha sido desde hace ocho siglos la iglesia de los reyes, de los presidentes franceses y de los poetas, como Victor Hugo. Se construyó en la edad media y ha sido testigo de toda la historia de Francia. Desde que se puso la primera piedra, Notre-Dame fue un proyecto colosal: 121 metros de largo, 40 de largo y 33 metros de altura. Esos volúmenes gigantescos se pensaron para que fuera la catedral de París. En ese momento, Francia era el reino más poblado de Occidente; París era la ciudad más grande y necesitaba una catedral a su medida", explicó a RFI el historiador francés Mathieu Lours, quien es especialista de la arquitectura religiosa.

Un museo de esculturas a cielo abierto

Contacto: info@notredamedeguadalupe.org


Leer más sobre RFI Español