Milei no tiene más remedio que llevarse bien con AMLO, Lula y demás líderes de izquierda de América Latina

En noviembre de 2023, el ultraliberal Javier Milei logró alzarse con el triunfo en las elecciones presidenciales de Argentina y acabó con varias décadas casi ininterrumpidas de peronismo en el país. Su triunfo fue de la mano de un discurso rupturista contra el Estado, contra el establishment político y, especialmente, contra las formaciones de izquierdas.

Javier Milei, presidente de Argentina. (Photo by Matias Baglietto/NurPhoto via Getty Images)
Javier Milei, presidente de Argentina. (Photo by Matias Baglietto/NurPhoto via Getty Images)

"Al zurdo de mierda no le puedes dar ni un milímetro". Esta frase que Milei pronunció en junio de 2021 resume perfectamente su postura en este sentido. Pero no es lo mismo decirla cuando eres alguien ajeno a la política que cuando representas a casi 50 millones de personas.

Ocupar la presidencia de un país es una gran responsabilidad en la que se deben anteponer las necesidades del Estado por encima de opiniones personales. Y por mucho que a Milei no le gusten los políticos de izquierdas, no le queda más remedio que llevarse de forma correcta con ellos, especialmente si se trata de socios fundamentales para la economía argentina.

Cabe recordar que salvo contadas excepciones (Uruguay, Paraguay, Ecuador, Guatemala, Costa Rica y Panamá), el mapa de América Latina se ha teñido en los últimos años del color rojo que representa a la izquierda. Esto incluye a grandes potencias regionales como México, Brasil, Colombia o Chile. Es decir, para que Milei no se quede aislado, y es algo que debería evitar dada la difícil situación económica, tiene que encontrar un cierto entendimiento con líderes muy poco afines a él.

A nivel internacional, el presidente argentino ya ha tenido que moderar sus críticas y dar marcha atrás. Así pasó con China y también con el papa Francisco. Tras amenazar con cortar relaciones con el gigante asiático y acusarle de régimen asesino, Milei defendió los intercambios mutuos y la cooperación.

En América Latina, también ha tenido enfrentamientos sonados con naciones como Brasil o Colombia. Con los primeros también amenazó con romper relaciones, mientras que con los segundos ha vivido en las últimas semanas un importante conflicto diplomático. Milei llamó al presidente colombiano, Gustavo Petro, "asesino terrorista" en una entrevista con CNN.

Estos graves insultos provocaron la reacción inmediata de Bogotá, que expulsó a diplomáticos argentinos. Sin embargo, solo han sido necesarios unos pocos días para que las aguas volvieran a su cauce y los respectivos embajadores volvieran a sus puestos en Argentina y Colombia. Ayudaron y mucho las conversaciones bilaterales entre ambas naciones para evitar que la crisis fuera a más.

Y aunque está claro que las relaciones entre ambos no pasan por su mejor momento histórico, sí que es evidente que Milei sabe perfectamente que no puede traspasar esa línea. Ni con Petro ni con ninguno de los otros países de izquierdas del subcontinente.

Socios comerciales clave

No hay más que recurrir a los datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos de Argentina para comprobarlo. El principal socio comercial, a fecha de agosto de 2023, era Brasil, país donde gobierna el izquierdista Lula. Es, además, con mucha diferencia, la principal nación a la que Argentina exporta sus productos. Es muy evidente que pese a la fobia de Milei con los zurdos, su Gobierno no puede permitirse un enfrentamiento con el Ejecutivo brasileño que afecte a estas relaciones comerciales. Sería un golpe de gran magnitud para su maltrecha economía.

Brasil es el principal socio comercial de Argentina. (REUTERS/Ueslei Marcelino/File Photo)
Brasil es el principal socio comercial de Argentina. (REUTERS/Ueslei Marcelino/File Photo)

Por detrás, China, país con el que ocurre lo mismo que con Brasil, y Estados Unidos, donde actualmente gobierna Biden y no Trump, que sería más cercano a los postulados de Milei. Cuarto lugar para Paraguay, donde sí hay un Gobierno más afín. Quinto para Chile, donde gobierna el izquierdista Gabriel Boric.

Completan el top ten Vietnam (régimen socialista), Uruguay, Alemania (socialdemócrata), India y España (socialdemócrata). Resumiendo, de los 10 grandes socios comerciales argentinos, siete tienen Gobiernos de izquierdas (incluyendo a Estados Unidos). Y si ampliamos el foco a los 20, también hacen su aparición México (puesto 12), Perú (17) y Bolivia (19).

En definitiva, más allá de que Milei piense que "no se puede negociar con los zurdos", lo cierto es que la situación geopolítica en la región es la que es y los distintos países del entorno han votado algo muy diferente a lo que piensa el presidente argentino.

Le toca, por tanto, tragarse sus palabras, hacer un ejercicio de pragmatismo y negociar con ellos por el bien de su propio país, esperando que las urnas cambien un poco el color del mapa de la región.

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