El jefe del gobierno alemán destituye a su ministro de Finanzas y deja la coalición al borde de la ruptura

German Chancellor Olaf Scholz arrives to take part in a Summit on Peace in Ukraine at the luxury Burgenstock resort, near Lucerne in central Switzerland, on June 15, 2024. The two-day gathering brings together Ukrainian President and more than 50 other heads of state and government, to try to work out a way towards a peace process for Ukraine -- albeit without Russia. (Photo by Ludovic MARIN / AFP)

BERLÍN.- El canciller alemán, Olaf Scholz, destituyó este miércoles a su ministro de Finanzas, Christian Lindner, y dejó al borde de la ruptura a la coalición de gobierno de socialdemócratas, verdes y liberales, tras semanas de disputas sobre el rumbo que debería tomar la economía de la mayor potencia europea.

El diario Bild había informado anteriormente de que el liberal Lindner había propuesto elecciones anticipadas como solución a la fragilidad del Ejecutivo, lo cual fue rechazado por el socialdemócrata Scholz.

Lindner es el líder del FDP, uno de los tres partidos que componen la llamada “coalición semáforo” junto con el SPD de Scholz y los verdes. Los tres partidos han formado parte del Ejecutivo alemán desde 2021, aunque en los últimos meses su estabilidad se había erosionado y habían crecido los rumores de una posible convocatoria de elecciones.

El canciller alemán, Olaf Scholz (derecha), junto al ministro de Economía, Robert Habeck (centro) y el recién destituido ministro de Finanzas,  Christian Lindner, durante un debate en el Parlamento
El canciller alemán, Olaf Scholz (derecha), junto al ministro de Economía, Robert Habeck (centro) y el recién destituido ministro de Finanzas, Christian Lindner, durante un debate en el Parlamento - Créditos: @Markus Schreiber

La salida de Lindner deja al borde de la ruptura esta coalición. En los últimos días se habían multiplicado las reuniones tratando de ver si las propuestas de Lindner permitían alguna aproximación con sus otros dos socios, o si estaban tan alejadas que resultaba imposible continuar. Representantes de los tres partidos se reunieron de nuevo este miércoles para abordar los motivos que habían separado las posturas, principalmente la redacción del nuevo presupuesto, así como la política económica.

Competencia e innovación

El PBI alemán se está encogiendo por segundo año consecutivo, y la vieja potencia industrial teme verse desbordada por la competencia china y quedar descolgada de la carrera global por la innovación.

La situación coincide, además, con las elecciones de Estados Unidos, un pretexto que sirve tanto para defender una continuidad del gobierno alemán (no es el momento de experimentos en Berlín) como para abogar por acelerar el cambio (un nuevo Ejecutivo en Washington coincidiría con otro nuevo en la capital alemana, preparados ambos para empezar de nuevo).

Lindner argumentó que las elecciones estadounidenses y su previsible impacto hacían aún más urgente cambiar el rumbo económico de Alemania hacia un mayor liberalismo, una política rechazada por los socialdemócratas y los verdes.

Por su parte, Según el Frankfurter Allgemeine Zeitung, Scholz había reclamado a Lindner que levantara su veto a abrir la mano con la deuda pública alemana, algo que rechazó de plano el líder de los liberales, que durante años han hecho bandera de una política económica de control de la deuda y el déficit, a costa del gasto público.

“Si el gobierno fracasa, solo hay una salida: elecciones”, dijo el martes Friedrich Merz, favorito en los sondeos para suceder a Scholz. Desde que la coalición semáforo comenzó a gobernar en 2021, su historia ha sido la de una sucesión de crisis, derivadas en parte por las ideologías difícilmente conciliables, y agravadas por los malos resultados económicos y por las recientes derrotas en elecciones regionales.

Agencia Reuters y diario El País