El final desconocido del meme de infidelidad más famoso del mundo

Uno de los memes más famosos del mundo sobre la infidelidad, parece ser parte de una historia en la que el hombre, que no puede dejar de ver a otra chica mientras va con su pareja, termina bastante mal.

Un hilo de Twitter realizado por la usuaria @mlberp, muestra una secuencia de fotos en la que se pude ver que el famoso meme sería parte de una historia mucho más compleja.

En una primera imagen, podemos ver que el sujeto le entrega un arillo a su pareja mientras ve a una mujer de rojo. A continuación se muestra la foto que se hizo meme. En otro par de fotografías podemos observar que, al parecer, las dos chicas se conocían.

En la siguiente secuencia fotográfica somos testigos de cómo la relación entre las dos mujeres se va haciendo más estrecha hasta que, ¡sorpresa!, se terminan casando. En una última postal podemos ver cómo el sujeto que no podía controlar su mirada, está sentado frente a una ventana con un semblante melancólico.

Varios usuarios de la red social admitieron desconocer esa historia, sin embargo no es la única que tiene a esos modelos como protagonistas de historias de amor y desamor.

Las fotos pertenecen al fotógrafo español Antonio Guillem, quien se dedica a realizar imagines de stock para uso editorial y publicitario.

En una entrevista con VideoLab, Guillem comentó que es uno de los fotógrafos que más vende en el mundo y reveló la clave de su éxito, “El único modo de tener éxito en este mundo de la foto de stock es generar muchísimo contenido, que sea bueno. Y no parar.”

El fotógrafo español también dijo que realiza muchos tipos de secuencias con sus modelos para reflejar cosas cotidianas, por lo que es común encontrar historias basadas en sus imágenes.

Y por supuesto, el número de posibilidades en cuanto a historias es infinita.

Sobre su fotografía más famosa, la que se hizo meme, parece no interesarle mucho, incluso hasta parece molestarlo, “para mí no tiene ninguna importancia. No me hace sentir orgulloso, hasta hace poco ni siquiera sabía lo que era un meme. No me interesa, y la verdad, me molesta que me asocien con ese fenómeno”.

Guillem también mencionó que él no estudió fotografía y que fue ganando práctica al tomarles fotos a las aves que se posaban en su ventana, solo por hobby.

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