Tomás Etcheverry y Facundo Díaz Acosta pisaron fuerte en una jornada especial para los argentinos en el ATP 500 de Barcelona

El platense Tomás Etcheverry se prepara para sacar durante su triunfo ante Brandon Nakashima en los 8vos de final del ATP 500 de Barcelona
El platense Tomás Etcheverry se prepara para sacar durante su triunfo ante Brandon Nakashima en los 8vos de final del ATP 500 de Barcelona - Créditos: @Pedro Salado

El segundo court en trascendencia del tradicional ATP 500 de Barcelona lleva el nombre de Andrés Gimeno. Nacido en la ciudad catalana en 1937 y fallecido en 2019, fue uno de los pioneros de la raqueta en España junto con Manolo Santana y veterano campeón de Roland Garros 1972, con 34 años y diez meses. Esa pista, con amplias tribunas laterales y una coqueta cabecera cubierta por ligustrinas, fue una suerte de escenario albiceleste en la cuarta jornada del certamen, con desafíos por los octavos de final. Tomás Etcheverry, Marco Trungelliti y Facundo Díaz Acosta se presentaron allí.

El drive de Tomás Etcheverry durante su éxito ante Brandon Nakashima en el Real Club de Tenis Barcelona
El drive de Tomás Etcheverry durante su éxito ante Brandon Nakashima en el Real Club de Tenis Barcelona - Créditos: @Pedro Salado

Fue el platense Etcheverry, 30° del ranking, quien abrió el programa en ese court, a las 11 de Barcelona (las 6 en nuestro país). Su rival, el estadounidense Brandon Nakashima (87°), representó un desafío de riesgo. Pero Etcheverry, cuartofinalista de Roland Garros el año pasado, logró revertir un encuentro espinoso y triunfó por 3-6, 7-6 (7-5) y 6-4, en tres horas y diez minutos. Entrenado por Wally Grinóvero, el argentino alcanzó su undécimo cuarto de final en el circuito (marca de 4-6), el noveno sobre polvo de ladrillo y el tercero por encima del nivel ATP 250 (Roland Garros 2023 y Basilea 2023).

Con su estilo vertiginoso por naturaleza, Etcheverry también mostró una faceta más luchadora para contener, correr y batallar hasta anular a Nakashima, un norteamericano que en distintas etapas de su carrera contó con consejos de entrenadores albicelestes (Franco Davín, Eduardo Infantino y hasta Mariano Puerta). “Jugué muy agresivo, un gran tenis. Más allá de que fue un partido que se definió en una o dos pelotas. Estoy súper contento porque venía buscando este nivel y está apareciendo. Me siento feliz por estar jugando de esta manera en este torneo tan importante”, apuntó Etcheverry, que finalizó con seis aces, tres dobles faltas, el 67% de primeros servicios, el 77% de puntos ganados con el primer saque (48 de 62) y el 45% con el segundo (14 de 31). Cedió dos veces su saque y, en doce oportunidades de rompimiento generadas, logró quebrárselo sólo dos veces a Nakashima.

La celebración de Etcheverry tras vencer a Nakashima en Barcelona
La celebración de Etcheverry tras vencer a Nakashima en Barcelona - Créditos: @Pedro Salado

El rival de Etcheverry en los cuartos de final del Conde de Godó será el zurdo británico Cameron Norrie, actual 31° del mundo, que derrotó al español Roberto Bautista Agut (84°) por 6-4 y 6-3. El match de este viernes será desde las 7.30 de la Argentina (Star+), en el court central “Rafa Nadal”. El historial está 1-0 en favor del europeo entrenado por el argentino Facundo Lugones.

Etcheverry, de 1.96m, poco a poco recupera su mejor versión luego de varias semanas de inactividad tras el severo desgarro en el músculo semimembranoso que padeció en el ATP de Buenos Aires, a mediados de febrero y que no le permitió competir en Indian Wells, el primer Masters 1000 del año. Tommy vio interrumpida una progresión que tiene un anhelo inmediato (ser top 25) y otro a largo plazo (ser top 10). “Tuve un infortunio bastante importante que me costó mucho a nivel mental para salir adelante. Pero lesionarse es parte del deporte y el desafío es volver más fuerte. Trabajamos mucho con mi equipo para mejorar muchas cosas (...) Este año quiero estar en el top 20. ¿A largo plazo? Ser top 10, obviamente”, expresó el argentino en los pasillos del Real Club de Tenis Barcelona.

Resumen del triunfo de Etcheverry

La progresión de Díaz Acosta

Martín Jaite (en 1987) y Gastón Gaudio (en 2002) fueron los únicos campeones argentinos en el Conde de Godó (también fueron finalistas Enrique Morea, Guillermo Vilas, Guillermo Pérez Roldán y Guillermo Cañas). Además de Etcheverry, otro jugador albiceleste que sigue de pie en el certamen es el zurdo Díaz Acosta (53°). Sorpresivo ganador del último ATP de Buenos Aires, el jugador de 23 años venció por 3-6, 6-3 y 6-1, en 1h46m, al húngaro Fabian Marozsan (39°) y avanzó a los cuartos de final de un ATP por tercera vez, la primera fuera de la Argentina (Córdoba y Buenos Aires). El jugador entrenado por Mariano Monachesi ya figura en el número 46 del ranking en vivo.

El próximo próximo rival de Díaz Acosta será el griego Stefanos Tsitsipas (7°; flamante campeón de Montecarlo), que venció al español Roberto Carballes Baena (72°), no antes de las 11 de la Argentina, en el court central. Antes de enfrentarse con Marozsan, Díaz Acosta, nacido en La Lucila (partido de Vicente López), tenía marca de cuatro triunfos y siete derrotas contra los mejores 50 jugadores del tour, incluida la victoria sobre el número 32, el croata Bora Coric, en la segunda ronda de Barcelona.

Trungelliti y el final de una semana muy productiva

A los 34 años, siendo el 197° del ranking mundial y cuando muy pocos lo esperaban, Trungelliti dibujó una tarea muy productiva sobre el polvo de ladrillo del Conde de Godó, certamen al que llegó con confianza tenística (en marzo obtuvo el Challenger de Kigali 2, en Ruanda), pero con poca preparación, tras dos semanas con dificultades en el tobillo derecho. Luego de ganar dos partidos de la clasificación y dos en el cuadro principal (uno de ellos, ante el chileno Nicolás Jarry, 22° del mundo; fue el segundo mejor éxito de su carrera teniendo en cuenta el ranking del rival), el santiagueño se quedó sin energía en su desafío por los octavos de final frente al italiano Matteo Arnaldi (40°), que se impuso por 6-3 y 6-0, en una hora y 24 minutos.

Marco Trungelliti cayó en los 8vos de Barcelona frente a Matteo Arnaldi
Marco Trungelliti cayó en los 8vos de Barcelona frente a Matteo Arnaldi

Trunge se mostró con poca pimienta y, ni bien Arnaldi logró tomar ventaja en el score, no pudo poner demasiada resistencia. El europeo, que en la primera ronda había vencido al argentino Sebastián Báez (19°) en tres sets y luego de salvar cuatro match points, le rompió el servicio cuatro veces a Trungelliti. Más allá de la despedida, se marcha de Barcelona con un dulce sabor de boca e ilusionado con el resto de la temporada. Su gran anhelo, todavía hoy, es ser top 100 por primera vez (su ranking más destacado fue 112° en 2019). En el ranking en vivo figura como 166° (+31).