Los socialistas de Pedro Sánchez se encaminaban a una victoria en Cataluña, pero deberán pactar con otras fuerzas
MADRID.- El PSC habría ganados las elecciones catalanas celebradas en el día de hoy al conseguir entre 39 a 42 escaños, en unos comicios en los que el presidente, Pedro Sánchez, busca acabar con el dominio independentista en esta región clave imponiéndose a Carles Puigdemont, líder de la tentativa secesionista de 2017.
Los partidos independentistas, que gobiernan Cataluña desde hace una década, no alcanzarían la mayoría del Parlamento regional, según los resultados parciales de las elecciones del domingo, en las que vencería el Partido Socialista, seis años y medio después tentativa de secesión.
Con el 73% de votos escrutados, las tres formaciones separatistas que hasta ahora sumaban mayoría, entre ellas la de Carles Puigdemont, se quedarían en 59 escaños, sin alcanzar la mayoría absoluta de 68, mientras que los socialistas obtendrían 42 diputados.
La formación de Puigdemont, Junts per Catalunya (Juntos por Cataluña) obtendría 35 diputados, mientras que el otro gran partido separatista, Izquierda Republicana de Cataluña (ERC) del actual presidente Pere Aragonès se desplomaría a 20 y los separatistas de extrema izquierda de la CUP sumarían 4.
En las anteriores elecciones regionales, en febrero de 2021, las tres formaciones sumaron 74 escaños.
Con alrededor de 8 millones de habitantes, esta rica comunidad del noreste de España, uno de los motores económicos del país, eligió durante el domingo a los 135 diputados de su Parlamento regional.
Hasta ahora, los socialistas inician el recuento a la cabeza, pero la fórmula del presidente español Pedro Sánchez, liderados en Cataluña por Salvador Illa, tampoco alcanzarían la mayoría y deberán buscar alianzas para gobernar
El candidato Illa confirmó que se presentará a la investidura y aseguró que Cataluña “abre una nueva etapa para todos los catalanes piensen lo que piensen, hablen la lengua que hablen y vengan de donde vengan” y atribuyó a Pedro Sánchez los buenos resultados cosechados.
Los separatistas ocupan el gobierno regional de Barcelona desde 2012 y han obtenido mayorías en cuatro elecciones regionales consecutivas. Pero las encuestas y una elección nacional en julio mostraron que el apoyo a la secesión se ha reducido desde que Puigdemont lideró un intento de ruptura ilegal e inútil en 2017.
Desde entonces, los socialistas de Sánchez han invertido un importante capital político en reducir las tensiones en Cataluña, incluido el indulto de separatistas de alto perfil encarcelados y la aprobación de una amnistía para Puigdemont y cientos más.
Una fórmula posible para los socialistas podría ser sumar el apoyo de la izquierda radical, que ya forma parte del gobierno central, y seducir a ERC, del cual obtiene apoyo parlamentario en Madrid, en un movimiento que supondría su ruptura con casi una década de colaboración separatista.
Aunque no concurre directamente a las elecciones, Pedro Sánchez también se jugaba mucho en estos comicios, en los que pretendía demostrar que Cataluña dejó atrás su dominio separatista.
Los resultados parciales
En cuarto lugar sigue el PP con entre 11 y 13 escaños, superando a Vox que obtendría 10 o 11 escaños. Por su parte, los comunes conseguirían entre 5-7 escaños. La CUP se quedaría con entre 4-6 escaños. Finalmente entraría en la Cámara Catalana la Aliança Catalana con entre 3 y 5 escaños. Ciudadanos se queda fuera.
Las últimas elecciones autonómicas catalanas fueron ganadas por el PSOE que obtuvo el 23,04 por ciento de los votos y 33 escaños. En segundo lugar quedó ERC, también con 33 escaños y el 21,3 por ciento de los votos, mientras JxCat, el partido de Carles Puigdemont, obtuvo 32 escaños y el 20,04 por ciento de los votos.
La cuarta fuerza política fue Vox, con 11 escaños y el 7,69 por ciento. Le siguió la CUP con 9 escaños y el 6,67 por ciento y los comunes con 8 escaños y el 6,87 por ciento de los votos. Finalmente, Ciudadanos obtuvo 6 escaños y el 5,57 por ciento, mientras que el PP consiguió 3 escaños y el 3,85 por ciento.
Cataluña protagonizó un intento fallido de secesión en 2017, cuando Carles Puigdemont presidía la región, desatando una de las peores crisis políticas de la España contemporánea.
Agencias AP y DPA y diario El País