El River que recibirá Marcelo Gallardo: qué tiene y qué le falta según sus gustos

Martín Demichelis y Marcelo Gallardo en mayo de 2023, en la inauguración de la estatua del Muñeco
Martín Demichelis y Marcelo Gallardo en mayo de 2023, en la inauguración de la estatua del Muñeco

¿Qué plantel le deja Martín Demichelis a Marcelo Gallardo? Una vez que las emociones de la despedida del entrenador saliente y la ilusión que a los hinchas millonarios les genera el regreso del DT más ganador de la historia, vuelve a ganar espacio la razón, la actualidad y las urgencias que River tendrá en el corto y mediano plazo. Se apunta a los partidos por la Liga Profesional, el primero el próximo domingo ante Unión, en Santa Fe, pero sobre todo a la serie con Talleres de Córdoba, por los octavos de final de la Copa Libertadores.

El nuevo entrenador tendrá cinco entrenamientos antes del debut y más allá de los disparadores emocionales, los resortes motivacionales que la sola presencia del Muñeco puede generar en los jugadores, va a tener mucho trabajo por delante porque Demichelis le dejó tres certezas a Gallardo: 1) Un plantel rico técnicamente pero desbalanceado en características; 2) Un equipo con apenas tres titulares consolidados, pero que no defiende ni termina de atacar bien, y 3) El poder de gol de Borja.

Miguel Borja, la principal carta de gol de River para ganar la Copa Libertadores
Miguel Borja, la principal carta de gol de River para ganar la Copa Libertadores - Créditos: @LUIS ROBAYO

En la ruleta de nombres y que la mayoría no logró afianzarse cabe la figura del huevo o la gallina: ¿Demichelis cambió porque los futbolistas no les respondieron, o no les respondieron porque él cambiaba mucho? ¿La abundancia le exigía tener a todos contentos y para eso debía rotar? En el último recorrido del entrenador saliente (sacando la excelencia de su primer semestre al frente del equipo) tomó decisiones que no siempre fueron acompañadas de la lógica. Y el mejor ejemplo se puede centrar en el volante central. Los entrenadores suelen coincidir que, si un DT tiene en claro su 5, lo demás lo termina de resolver bien. En el caso del River de Demichelis en 2024, ya eso no terminó de fluir de manera correcta.

Su volante central titular terminó siendo, para este último equipo post receso de Copa América, un Peña Biafore que venía de dos préstamos (en Arsenal y Lanús). Ante Sarmiento fue titular Matías Kranevitter, que nunca le terminó de cerrar a Demichelis, más allá de las lesiones que sufrió el 5 surgido de las inferiores; por Rodrigo Villagra el club pagó sobre el cierre del anterior libro de pases 12 millones de dólares, pero nunca logró salir de la transición en la que cayó desde que llegó de Talleres al Monumental. Nicolás Fonseca sigue siendo una apuesta en la que las evaluaciones del día a día no lograron darle continuidad. Definir su 5 será la prioridad para Gallardo, sobre todo con una figura reciente de Enzo Pérez que River nunca se logró reemplazar.

Este problema River lo tiene en el eje, pero también en casi todos los puestos, exceptuando las situaciones de Armani, Paulo Díaz como uno de los defensores centrales (por derecha o por izquierda en función de quién sea su acompañante de zaga) y Miguel Borja, al que se le caen los goles de los bolsillos.

Paulo Díaz, uno de los pocos titulares afianzados en River
Paulo Díaz, uno de los pocos titulares afianzados en River

En el caso del lateral derecho, frente a Sarmiento apareció Milton Casco, al que Demichelis había descartado como titular por el sector izquierdo. Eso reflejó que las (insistentes) pruebas con Santiago Simón (mediocampista por naturaleza) no dieron el resultado esperado, más allá de un buen partido ante Central. Quedó relegado Marcelo Herrera luego de sus errores en el clásico ante Boca y Agustín Sant’Anna, lateral que había llegado de Defensa y Justicia por el desembolso de otro buen dinero, tampoco se afianzó. En el lateral izquierdo, en la actualidad encuentra la misma flaqueza porque Enzo Díaz bajó mucho su nivel y Franco Carboni llegó más como una alternativa de recambio que como una realidad. Quizás Gallardo tenga todo mucho más claro y sepa cómo arrancar, qué equipo ubicar en su “práctica cero”. La desventaja es que está en medio del río, sin la chance de hacer una pretemporada que equilibre los niveles futbolísticos y físicos.

En cuanto al central que acompañe a Paulo Díaz, cuenta con el recién llegado Gattoni, González Pirez, Funes Mori, Boselli y el juvenil Zabala, que tras su gran irrupción en la cancha de Huracán luego cayó en una irregularidad lógica.

Como alternativas de Borja, tiene al recién llegado Adam Bareiro y Agustín Ruberto (como centrodelanteros) aunque también Facundo Colidio ha sido utilizado como segunda punta o falso 9. Y como demás delanteros contará con Pablo Solari y Subiabre.

Franco Mastantuono, presente y futuro en River
Franco Mastantuono, presente y futuro en River - Créditos: @Gonzalo Colini

Tiene variantes como números 10 ofensivos en Manuel Lanzini, Franco Mastantuono, Nacho Fernández y Claudio Echeverri (cuando regrese de los Juegos Olímpicos). Pity Martínez sigue lesionado. Y Rodrigo Aliendro entra más en la variable de los “mixtos”, los interiores, ya que no es 5 pero tampoco 10. Lo que River no mostró (hasta el momento) es contar con futbolistas con recorrido por las bandas en la zona de volantes, sobre todo por la izquierda (más allá que puede poner más adelantado a Carboni, pero hoy seguiría siendo una apuesta). En la derecha, por características, sólo está Santiago Simón.

En la anterior etapa, no fue un problema para Gallardo. Ni siquiera cuando perdió en la puja por Walter Montoya, el futbolista estrella en el mercado de pases del verano de 2017 que no fue de Rosario Central a River ni a Boca y recaló en Sevilla. “Si no se puede contar con Montoya, no hay problema, jugamos sin ‘8′”, había dicho puertas adentro en aquel momento. Además, sabido es que el Muñeco llegó a armar equipos con tres números 10 y que tiene debilidad por los zurdos, del estilo Mastantuono. Pero para armar un equipo competitivo no alcanza solo con eso. Él confiaba mucho en sus laterales, eran bastiones que casi asumían responsabilidades de cubrir toda la banda, pero hoy el escenario no es el mismo. Y, justamente, donde arranca con dudas es en la zona de los laterales. Del plantel heredado por Demichelis, arrancarían Armani, Paulo Díaz y Borja. ¿El resto? Estaría todo por definirse.

El golazo de Mastantuono a Sarmiento

Gallardo tiene en mente incorporar en breve dos o tres refuerzos. ¿En qué zonas? Lo que más estaría necesitando hoy el DT, además de un volante zurdo con recorrido y dinámica para atacar y defender, es un De la Cruz. Un mediocampista que él formó a imagen y semejanza. La transformación duró casi dos años y terminó siendo el futbolista insignia de su primer ciclo, ya que el uruguayo llegó a convertirse en un jugador completo que hacía todo bien: tenía personalidad, agresividad para marcar e inteligencia táctica para estar siempre ubicado donde la jugada se lo pedía; dinámica, técnica y gambetas para los cambios de ritmo ofensivos, buen pase para asistir y ejecutar las pelotas paradas; y también definición, porque llegaba a pisar el área y convertir. Un box to box que solo su lesión crónica en la rodilla no lo llevó a la Premier League.

Si Gallardo tiene su columna definida en función de cómo arrancar y encuentra a su ‘nuevo De la Cruz’, tendrá gran parte de su nueva base resuelta. Y parte de la nueva batalla (de la Copa Libertadores), también.