Pachuca y su negocio con los jugadores mexicanos que explica por qué no se van a Europa

Pachuca: Hirving Lozano, un canterano emblema del club, vendido en 2017 al PSV. (PEDRO PARDO/AFP via Getty Images)
Pachuca: Hirving Lozano, un canterano emblema del club, vendido en 2017 al PSV. (PEDRO PARDO/AFP via Getty Images)

Pachuca se ha convertido en un club formador por excelencia en México. Su sistema de captación y desarrollo de talentos es el que más progreso ha tenido en los últimos años. Con una metodología destinada a encontrar jugadores en todo el país, han logrado emparejar y rebasar a clubes que tradicionalmente fueron los mejores en el ámbito formativo, como Pumas y Atlas. Sin embargo, de un tiempo a la fecha, hay una pregunta recurrente cuando se habla de los Tuzos: ¿por qué no dejan salir fácilmente a Europa a sus jugadores?

Armando Martínez, presidente del club, ha explicado en qué consiste la política de Pachuca cuando se trata de jugadores mexicanos con calidad de exportación. "¿Por qué voy a regalar a mi jugador? Yo tengo 200 becados. ¿Voy a vender debajo de mi costo de venta? ¿Tú te vas a ir a trabajar por menos a la competencia? Tenemos que ver cómo hacerle para producir más jugadores y llevarlos a Europa. Tenemos una política: a Europa lo vendo 30% más barato de lo que lo puedo vender aquí. Si con Kevin Álvarez hubiera llegado un equipo de Europa, y me da 30% más barato de lo que me dio el América, yo lo hubiera vendido a Europa", expresó en Caliente TV.

Pachuca ha exportado a jugadores como Héctor Herrera, Hirving Lozano y Erik Gutiérrez, pero también ha habido jugadores que no salieron: Rodolfo Pizarro o Jürgen Damm, que en su momento fueron vendidos a Chivas y Tigres, respectivamente. Dio a entender Martínez que por Álvarez no hubo ofertas reales y por eso se fue al América. Sin embargo, es un hecho que su brazo no se da a torcer con ninguna facilidad.

Es una postura firme por parte de Martínez. Por ejemplo, al finalizar el Mundial de Qatar 2022, se habló mucho de Luis Chávez y de una salida a Europa por el nivel que mostró en aquella justa. El presidente tuzo tenía claro que no lo dejarían irse fácilmente: "Hay que apoyar al jugador, pero a nosotros nos cuesta mucho dinero la estructura para tener esos jugadores. Tenemos que darle el valor a nuestros jugadores. Porque si Luis fuera portugués, brasileño o argentino, pudiera valer más. Y por ser mexicano vale el 20% de lo que pudiera valer. Tenemos que apoyarlos, pero no podemos regalar nuestro trabajo", señaló entonces a Marca Claro.

Finalmente, Chávez firmó con el Dinamo de Moscú, pero también acusó dificultades para cerrar el fichaje. En noviembre pasado, dijo a AM León que Pachuca no hizo lo suficiente por fluir en las negociaciones y que intentaron ponerle a la afición en contra, aunque él les había expresado el deseo de probarse en Europa. "Dinamo pagaba más de lo que era mi cláusula, pero ellos (Pachuca) no quisieron negociar. Entonces a mí me obligan a pagar la cláusula y gracias a Dios lo tenía, porque si no, no estuviera acá, y Dinamo se porta muy bien y buscamos la forma de poderles hacer llegar el dinero… Hasta Dinamo terminó pagando menos de lo que de lo que iba normalmente a pagar”.

Chávez tuvo que pagar su propia carta a Pachuca para poder irse. La postura de Tuzos fue que se hizo así porque los clubes mexicanos, ante las sanciones a equipos rusos por la invasión a Ucrania, no pueden negociar directamente con ellos. Martínez, en noviembre también, respondió así a Chávez: "La negociación directa con el equipo ruso representaba un 35% a 40% más de lo que era la cláusula de rescisión. Nosotros renunciamos a ese dinero extra y le dijimos a Luis que la única forma que podíamos hacer para que fuera a Rusia era que él pagara su cláusula de rescisión". Finalmente, Pachuca apela a la protección de las inversiones que hace, aunque no sea lo más beneficioso en términos deportivos.