Inter campeón, con Lautaro Martínez como goleador, arrasó en Italia: la fiesta fue completa al vencer a Milan

La emoción de Lautaro Martínez en los festejos, subido al travesaño, de cara a los hinchas de Inter
La emoción de Lautaro Martínez en los festejos, subido al travesaño, de cara a los hinchas de Inter - Créditos: @GABRIEL BOUYS

La consagración se veía venir, no es ninguna novedad, Inter dominó la temporada de la Serie A con puño de hierro, abrió un océano de distancia con el resto. El campeón anterior, Napoli, perdió el rumbo desde temprano, cuando Luciano Spalletti dejó la dirección técnica para desembarcar poco después en el seleccionado de Italia.

La supremacía de Inter fue incontestable. Al anunciado scudetto, sellado este lunes, cuando quedan cinco fechas por delante, le sumó lo único que le faltaba: hacer coincidir el día de la consagración con un triunfo sobre Milan, el clásico rival, algo que nunca había sucedido en la historia del calcio. Fue por 2-1, con goles de Francesco Acerbi y Marcus Thuram.

El descuento de Fikayo Tomori a 10 minutos del cierre agregó incertidumbre y calentó los ánimos. Hubo grescas, peleas grupales y golpes, que dejaron tres expulsados. Los primeros en ver la tarjeta roja fueron Theo Hernández y Denzel Dumfries, a quienes tuvieron que separar en medio de una agresión mutua. Y en la última acción del encuentro, antes de un córner, el capitán Davide Calabria fue expulsado tras darle una trompada a Carlos Augusto. Antes de irse, Calabria le tiró un cachetazo a Lautaro Martínez, que segundo antes había estado a los forcejeos con el arquero Mike Maignan, presente en el área rival en busca del empate que evitara el título de Inter.

Lautaro Martínez, abrazado a Marcus Thuram, su compañero de ataque
Lautaro Martínez, abrazado a Marcus Thuram, su compañero de ataque - Créditos: @Antonio Calanni

Del clima crispado, el Toro pasó a la emoción. Tras el final, se le cayeron lágrimas de felicidad, mientras se levantaba tras arrodillarse y apoyar el rostro sobre el césped de San Siro (Milan fue local). Marcus Thuram, compañero de ataque, lo paseó sobre sus hombros; después se subió al travesaño, para celebrar de cara a los tifosi que estaban en la cabecera.

Inter arrasó fronteras adentro: le sacó 17 puntos al segundo (Milan), es el más goleador (79), el único que marcó en todos los partidos, el que menos tantos recibió (18, con la valla invicta en 18 encuentros), una sola derrota (ante Sassuolo, en septiembre).

Fiesta completa, alegría máxima y el orgullo por las nubes para el equipo vuelve a obtener el título luego de tres años, el 20° en su historia. Una satisfacción que pone en un lugar muy destacado a Lautaro Martínez, en su primera temporada como primer capitán. Líder del plantel, también es el goleador del torneo, con 23 tantos en 29 partidos mejorando ya sus cursos más eficaces, los dos últimos, ambos con 21. También dio cinco asistencias.

Acerbi, el 1-0

Es el segundo scudetto para Lautaro, tras el conquistado en 2021, cuando hizo 17 goles (siete menos que Lukaku). Su identificación con el club, al que llegó en julio de 2018, sigue en aumento. Está en vías de extender el contrato que vence en junio de 2026. El acuerdo económico se lograría con el punto intermedio (9 millones de euros por año) entre lo que pretendía el delantero (10 millones) y la oferta de la entidad que tiene en una de las vicepresidencias a Javier Zanetti (8).

Único argentino en el plantel, el Toro podría tener por compañero en la próxima temporada a Nicolás Valentini, en conflicto con Boca por la renovación del contrato. Según información de La Gazzetta dello Sport, el zaguero central, cuyo vínculo finaliza en diciembre de 2024, podría incorporarse en el mercado de pases de mitad de año por un valor inferior a los 10 millones de euros que pretende Boca.

Marcus Thuram, el 2-0

También fue el séptimo título de Lautaro en Inter; su palmarés se completa con dos copas Italia y tres Supercopas. En este curso hizo pareja ofensiva con Marcus Thuram, tras las salidas de Romelu Lukaku, Edin Dzeko y Joaquín Correa. El francés aportó 12 goles y 11 asistencias. A Milan le marcó tras esquivar dos defensores y sacar un fuerte derechazo desde fuera del área.

El Toro es protagonista de uno de los mejores pasajes de Inter en la historia del derby della madonnina. Este fue el sexto triunfo consecutivo por todas las competencias sobre Milan, que en la próxima temporada no tendrá a Stefano Pioli, entrenador del scudetto 2022. Entre los numerosos candidatos para reemplazarlo fue mencionado Marcelo Gallardo.

A Martínez solo le faltó extender su serie goleadora ante Milan. Con ocho tantos ocupa el tercer lugar entre los capocannonieri históricos de Inter en el clásico, detrás de Giuseppe Meazza (12) y Stefano Nyers (11). Tuvo una situación muy clara en el primer tiempo, cuando definió desviado frente al arco en una posición muy favorable. Un rato antes, otro remate se le fue por encima del travesaño.

Curiosamente, el éxtasis de Lautaro es en el momento que atraviesa por una pequeña sequía goleadora. Arrastra cinco partidos consecutivos sin marcar, su racha más extensa en la actual Serie A, dentro de una campaña en la que anotó durante cinco cotejos seguidos, con otros tramos en los que encadenó tantos en tres encuentros en fila. Para mayor paradoja, esta pólvora mojada del Toro lo atrapó después de que el 27 de marzo cortara 777 minutos sin convertir en el seleccionado argentino, con un gol en el 3-1 en el amistoso con Costa Rica.

En este curso, Lautaro escaló con su producción en la lista de los goleadores históricos de Inter. Progresó hasta el séptimo puesto, con un total de 128 tantos, cifra que lo pone como el argentino más efectivo, con cuatro goles más que Mauro Icardi. A punto de completar su octavo año, Martínez está plenamente consustanciado con el sentimiento interista. Se volvió a quebrar, se le ahogaron las palabras, mientras daba declaraciones a la cadena DAZN: “Tengo que llorar porque merecemos esta alegría. Trabajamos duro, sufrimos mucho y dedico este título a mi familia en Argentina, a mis hijos, a mis compañeros y a toda la afición. Estoy doblemente feliz, les dije a mis compañeros que estábamos ante una oportunidad histórica: ser campeón en el derbi es una de las cosas más lindas que la vida me ha regalado”.

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