El caso Dani Olmo: un entramado que puede dejar en ruinas al Barcelona

El fichaje de Dani Olmo, una de las figuras de la última Eurocopa con España, por parte del FC Barcelona, ha desatado un complejo conflicto legal con LaLiga, que pone a prueba las normas de inscripción del campeonato. Su inscripción dentro de la plantilla está bloqueada, debido a que el organismo considera que el club no cumple con los requisitos financieros exigidos por el control económico de la competición.

Los problemas llegaron desde su fichaje en unos 55 millones de euros aproximadamente, a mitad de año. Olmo había podido jugar hasta ahora gracias a una licencia provisional, por la lesión de larga duración del defensor central Christensen, que venció el 31 de diciembre. Ahora debería ser inscripto definitivamente.

El conflicto pone de manifiesto las dificultades que enfrentan los clubes en España para ajustar sus cuentas a las estrictas normas de LaLiga, que en 2021 generó la partida forzada de Lionel Messi a PSG. En el caso de Olmo, el Barcelona habría superado los límites salariales dispuestos, lo que imposibilita su incorporación formal al equipo en el presente mercado de pases.

Desde el club catalán, diversas fuentes aseguran que se están explorando todas las vías legales y financieras para destrabar la situación, según el diario AS. La solución sería pedir una nueva licencia bajo el argumento de “fuerza mayor”.

El motivo esgrimido por la entidad azulgrana es un ingreso clave: la cesión de la explotación de parte de los palcos VIP del futuro estadio Spotify Camp Nou. Según el Barcelona, mañana estarán depositados los primeros fondos de esta operación, que asciende a una cifra cercana a los 100 millones de euros. Esto permitiría al club cumplir con las exigencias del “fair play” financiero y, así, desbloquear su inscripción.

En medio, el ente rector de la competición emitió un contundente comunicado nocturno el 31 de diciembre, señalando que el club no había presentado “ninguna alternativa” que, bajo el cumplimiento de la normativa económica, le permitiera inscribir jugadores el 2 de enero o fechas posteriores.

La resolución favorable para el Barcelona parece difícil y sería un giro sin precedentes, ya que en casos similares de otros clubes la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) no dio el brazo a torcer.

El precedente cercano es el de Kike García, delantero del Alavés, cuya inscripción también fue denegada en circunstancias similares. La comparación ha llevado a sectores del entorno barcelonista a cuestionar si las normas son igual de estrictas para todos los clubes o si existe margen de discrecionalidad en su aplicación.

El otro jugador involucrado que tampoco pudo ser inscripto es Pau Víctor, el joven delantero español procedente del Girona. De momento, los dos futbolistas no aparecen en la plantilla oficial del Barça en La Liga, y si no surge una solución, no volverían a jugar a las órdenes de Hansi Flick esta temporada. El punto crítico es la garantía que LaLiga exige para que el Barça acredite que tiene los fondos disponibles; en este caso, por la venta de los asientos VIP del Camp Nou que está en plena construcción. Desde LaLiga tienen claro que, si ceden ante el club blaugrana, habrá que darles explicaciones a otros clubes en situación similar, como Sevilla, Athletic Bilbao y Atlético de Madrid.

Cabe destacar que, en el caso de Dani Olmo, por una cláusula de su contrato, tiene la potestad de rescindir con el Barcelona, cobrar una cuantiosa indemnización (cerca de 50 millones de euros por el total de su ficha) y fichar por cualquier otro club, según informa ESPN. Además, el contrato del jugador, firmado hasta 2030, implica una obligación financiera que podría agravarse si no logra inscribirlo antes del cierre del mercado. Además, en caso de verse obligado a dejarlo en libertad, al Barcelona no le entraría nada de dinero por un futbolista que, se estima, tiene un valor actual de 60 millones de euros.

Mientras tanto, Dani Olmo no ha dado ninguna señal en este sentido y, de hecho, ayer acudió a entrenarse con normalidad. Sin embargo, a futuro esta situación podría ser un problema para el mediocampista ofensivo, porque necesita tener una ficha federativa para poder jugar con la selección española. La Nations League vuelve en marzo, cuando España se enfrentará a Países Bajos por los cuartos de final, mientras que en junio sería una hipotética semifinal.

Con el cierre del mercado de invierno europeo acercándose, una posible solución sería un préstamo a otro club, tanto para Dani Olmo como para Pau Víctor. El Barcelona arranca este 2025 a contrarreloj para garantizar la inscripción de ambos futbolistas. Si no lo logra, para el club blaugrana será un golpe económico y deportivo durísimo