Balón de Oro: Messi y Cristiano Ronaldo ceden un reinado de 15 años (¿y ahora quién?)

Messi, con su último Balón de Oro, en 2023, que premió el título mundial en Qatar
Messi, con su último Balón de Oro, en 2023, que premió el título mundial en Qatar - Créditos: @FRANCE FOOTBALL

Los dos futbolistas que se repartieron 13 de los últimos 15 Balones de Oro no se hicieron un lugar entre los 30 nominados para el premio de este año que entrega la revista France Football desde mediados de la década del 50. El paso del tiempo alcanzó a Lionel Messi (37 años) y Cristiano Ronaldo (39), la exuberancia futbolística de ambos va apagándose, quedan destellos en ligas periféricas a la élite. Una cuestión lógica, natural, biológica. Una hora que iba a llegar, irremediable. Un crepúsculo creciente que a su vez empieza a agrandar el legado de dos bestias competitivas, dominadores de la gran escena internacional durante más de una década.

En 2003 fue la última vez que en la lista de candidatos no figuraron el rosarino y el portugués. Claro, por entonces, Leo todavía no había debutado en la primera de Barcelona y CR7, a mediados de ese año, despegaba con la transferencia de Sporting Lisboa a Manchester United. Estaba por alumbrarse una nueva época, las figuras emergentes que desembarcaban para tomar el testigo que dejaban otros delanteros destacados, como Ronaldinho, Ronaldo Nazario y Marco Van Basten.

Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, en uno de sus tantos encuentros en la gala del Balón de Oro
Cristiano Ronaldo y Lionel Messi, en uno de sus tantos encuentros en la gala del Balón de Oro

En 2004, Cristiano recibió la primera de sus 18 nominaciones (récord) para el Balón de Oro que obtuvo el ucranio Andriy Shevchenko (Milan). Messi tuvo su bautismo de 16 nominaciones en 2006, año de su primer título en la Champions League (no estuvo en la final por lesión) y su primer mundial. El trofeo fue para Fabio Cannavaro, la última vez que se lo llevó un defensor, en reconocimiento a una Italia campeona del mundo que no había cautivado con un estilo ofensivo.

Cristiano ganó en 2008 el primero de sus cinco balones. Messi lo sucedió en 2009, cuando comenzó con una colección de ocho premios, el último en 2023, el que más quería porque recompensaba el título mundial con el seleccionado argentino que persiguió con obstinación. Fueron 15 temporadas en las que apenas dejaron hueco para que se filtrara alguna otra individualidad. Solo lo consiguieron en 2018 Luka Modric, subcampeón del mundo con Croacia y de la Champions League con Real Madrid, y en 2022 Karim Benzema, colosal en la 14a Orejona que acabó en las vitrinas del museo del Santiago Bernabéu.

Si bien tanto Messi como Cristiano todavía gastan cartuchos en sus seleccionados, la vida de club que llevan en los Estados Unidos y Arabia Saudita relativiza la vigencia futbolística. El descenso de dos o tres escalones en el nivel competitivo los deja en un plano inferior en la comparación con quienes transitan la máxima exigencia.

Apenas aterrizó en Inter Miami, Messi fue decisivo para ganar la Leagues Cup, competencia entre los equipos de la MLS y de México de la que muchos tuvieron conocimiento a partir de la huella que fue dejando Leo. Cristiano hizo 35 goles en 31 partidos para Al Nassr en la Pro League de Arabia Saudita que se adjudicó Al Hilal. Encontraron un hábitat para mantener una influencia que se restringe cuando suben el peldaño que los lleva a la agenda de los seleccionados.

Los 30 nominados para el Balón de Oro 2024

Messi levantó hace un par de meses su segunda Copa América consecutiva, pero esta vez fue menos salvador y pasó a ser más contenido por el equipo, sin poder completar la final por una lesión en un tobillo que todavía lo tiene en período de recuperación. Un gol y una asistencia fue su balance en cinco partidos (estuvo en el banco y no ingresó ante Perú). Negativo fue el saldo que le quedó Cristiano Ronaldo en la Eurocopa. Ubicado más como centro-delantero para recortar los recorridos al arco, no marcó en cinco cotejos, falló un penal frente a Eslovenia y se despidió en cuartos de final ante Francia.

Ya veteranos, ninguno de los dos planea un retiro para lo inmediato. Cristiano expresó en los últimos días que nadie le pondrá fecha de caducidad en el seleccionado, que la decidirá él y que por el momento no la tiene en los planes. Messi también mide los tiempos para saber si llega al Mundial 2026. Esta semana, el preparador físico del seleccionado argentino, Luis Martín, expresó en radio Villa Trinidad: “Desde lo físico, Messi está en condiciones de llegar al próximo Mundial. Pero va más allá de su cuerpo: si él siente que tiene algo más para dar, lo vamos a tener”.

Mientras Messi y Cristiano se corren de la carrera por el Balón de Oro, no asoma alguien en condiciones de emular la hegemonía que ellos desplegaron. Neymar ya es pasado, nunca terminó de posicionarse como el tercero en discordia. Debería ser el tiempo de Kylian Mbappé o Erling Haaland, seguramente con las intermitencias que Messi y Cristiano no se permitieron. O habrá llegado el momento de reconocer a un futbolista que no llena titulares de los medios por sus golazos, pero que hace jugar de maravilla a Manchester City y el seleccionado de España, como Rodri. El Balón de Oro abre la sucesión al reinado de Messi y Cristiano.