Corte de EEUU permite mantener norma que limita contaminación de centrales eléctricas de carbón

ARCHIVO - El vapor emana de una central eléctrica de carbón el 18 de noviembre de 2021, en Craig, Colorado (Foto AP/Rick Bowmer, Archivo)

WASHINGTON (AP) — En una victoria para el gobierno del presidente Joe Biden, una corte federal de apelaciones dictaminó el viernes que una nueva normativa federal destinada a limitar la contaminación de las centrales eléctricas de carbón —una de las causas del calentamiento global— podrá seguir vigente al tiempo que continúan las impugnaciones legales en contra de dicha normativa.

El gremio industrial y algunos estados liderados por republicanos habían pedido a la corte que bloqueara de urgencia la norma de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), alegando que era inalcanzable y amenazaba la fiabilidad de la red eléctrica del país.

La norma de la EPA, anunciada en abril, obligará a muchas centrales eléctricas de carbón a capturar el 90% de sus emisiones de carbono o cerrar en un plazo de ocho años. La normativa es un elemento clave de la promesa del presidente demócrata de eliminar la contaminación que ocasionan las centrales eléctricas de carbón para el 2035 y de toda la economía para el 2050.

Un panel de tres juezas de la Corte Federal de Apelaciones del Circuito del Distrito de Columbia rechazó la petición del gremio industrial de bloquear la norma, alegando que los grupos que se oponen a ella no habían demostrado que sus impugnaciones legales tuvieran probabilidades de éxito. La corte de apelaciones dictaminó que el caso tampoco invocaba una cuestión importante en virtud de una sentencia anterior de la Corte Suprema, ya que la EPA únicamente pretende “establecer límites para las emisiones... de manera que se reduzca la contaminación y haciendo que la fuente regulada funcione de forma más limpia”.

El fallo unánime también rechazó el argumento de perjuicio inmediato, alegando que los plazos de cumplimiento no entrarán en vigor hasta el 2030 o 2032.

La sentencia fue dictada por las juezas Patricia Millett, Cornelia Pillard y Neomi Rao. Millett y Pillard fueron nombradas por el presidente Barack Obama, demócrata, mientras que Rao fue nombrada por el presidente Donald Trump, republicano.