Calles vacías y destrucción en Metula: la punta norte de Israel convertida en zona militar
Metula (Israel), 10 oct (EFE).- En Metula, la localidad más al norte de Israel, que solían habitar unas 1.700 personas, las calles vacías y las casas destruidas muestran las consecuencias de un año de intercambio de fuego con el grupo libanés Hizbulá, en el que los milicianos han disparado contra la localidad más de 500 misiles antitanque.
"Toda la población ha abandonado esta comunidad judía que lleva aquí instalada 130 años", asegura el portavoz castrense Nadav Shoshani desde la sala de guerra del Ejército en este pueblo, convertido hoy en zona militar cerrada, en una visita de un reducido grupo de medios escoltado por los militares, entre ellos EFE.
Además de los misiles antitanque, el grupo chií ha disparado contra Metula, a unos 150 metros de la frontera, todo tipo de municiones que han hecho sonar las alarmas antiaéreas sin parar a lo largo del año, y también varias veces este mismo jueves.
Entre esas municiones se encuentran incluso granadas, como muestra Shoshani entre los restos de distintos armamentos recuperados por las fuerzas armadas. Los milicianos las conectan a drones que compran en la plataforma china Aliexpress y dirigen hacia el pueblo: "Llegan, la sueltan, y se vuelven", explica Shoshani.
El alcalde de Metula, David Azulai, muestra la destrucción de la ciudad a los medios visitantes y asegura que uno de los mayores cohetes disparados por Hizbulá contra el pueblo cayó en la noche del jueves.
Hacia las 16.00 hora local (13.00 GMT) de este jueves, las fuerzas armadas aseguraron haber detectado el lanzamiento de al menos 105 proyectiles contra Israel, y a lo largo de las siguientes horas interceptaron dos drones dirigidos contra la Alta Galilea, también en el norte del país.
Solo en Metula, a primera hora de la tarde, las alarmas sonaron al menos cinco veces por el lanzamiento de cerca de una treintena de cohetes en varias andanadas, lo que obligó a acortar el recorrido de los medios. "Hemos recibido alertas de un inminente ataque con misiles", avisó una soldado.
El intercambio de fuego entre Israel e Hizbulá comenzó el 8 de octubre del año pasado, cuando el grupo proiraní empezó a lanzar cohetes contra el Estado hebreo en solidaridad con el pueblo palestino de la Franja de Gaza, inmerso en una guerra con Israel desde la víspera tras los atentados de Hamás en suelo israelí.
Metula y la vecina Kiryat Shmona fueron algunas de las primeras ciudades en convertirse en una "zona militar cerrada" dada la proximidad del intercambio de fuego,
A un año del inicio de las hostilidades, una andanada de cohetes de Hizbulá mató ayer a dos israelíes de unos 40 años de edad que según medios locales estaban paseando a sus perros en Kiryat Shmona.
"Estamos decididos a cambiar la situación en el norte", subrayó hoy el jefe del Comando del Frente Interior, el general Rafi Milo, en una visita al lugar del impacto en la que apeló a la población a respetar las medidas de seguridad decretadas por el Ejército.
La pareja se convirtió en los dos primeros civiles muertos de lado israelí por los ataques de Hizbulá en las últimas dos semanas, cuando el conflicto en esta frontera escaló después de que Israel intensificara sus bombardeos en todo Líbano y emprendiera una ofensiva terrestre similar a la de Gaza.
Hasta el inicio de la guerra con Líbano, las hostilidades en la frontera habían matado a 52 personas en el norte de Israel, de las cuales unas 26 eran civiles. Tras el inicio de esta, otras 16 han perdido la vida, 14 militares israelíes, a ambos lados de la divisoria.
Del lado libanés los muertos superan los 2.000, y los ataques de la aviación israelí han provocado el desplazamiento de unos 1,2 millones de personas.
Alejandro Ernesto
(c) Agencia EFE