Alerta: cuatro de cada diez bebés que requieren leches especiales no acceden al tratamiento indicado por el pediatra
Luca nació hacia el final de la pandemia, el 3 de agosto de 2021. Casi al mes empezó a tener trastornos digestivos que le generaban alergias, vómitos, irritabilidad. “Había distintos síntomas. No dormía él ni nosotros; en vez de subir de peso, bajaba”, cuenta Leandro Desplats, el padre. Cuando consultaron al pediatra, el primer problema fue lo difícil de conseguir turno con un gastroenterólogo infantil, que luego les recetó una leche medicamentosa. Cuando Leandro fue a la farmacia, se quedó sorprendido del precio. Una lata de 400 gramos, que le duraría unos tres días, costaba a valores de hoy unos 80.000 pesos. No tardó mucho en cargar la factura en su prepaga para el trámite de reintegro, pero se lo rechazaron: el argumento era que ellos solo cubrían las leches maternizadas.
Como Leandro es abogado, empezó a buscar información sobre qué decía la ley y se encontró con dos leyes. Por un lado, la 27.305, sancionada en 2016, conocida como la ley de leches medicamentosas, que obliga a las obras sociales y prepagas –y en caso de que la familia no cuente con ninguna, al Estado– a cubrir al 100% el consumo de leches de fórmula medicamentosa. Por otro lado, en la ley 27.611 de “Atención y Cuidado Integral de la Salud durante el Embarazo y la Primera Infancia”, conocida como ley 1000 días, el artículo 20 en su inciso C habla de las leches maternizadas.
Mientras que las leches maternizadas son aquellas que tienen su fórmula modificada para ser aptas para el consumo de lactantes, las leches medicamentosas son aquellas que se desarrollan para ser aptas específicamente para niños que tienen algún rechazo particular, ya sea alergia a la proteína de la leche u otro tipo de alergia, o modificadas para ser toleradas por chicos con determinados problemas metabólicos. Estas últimas son más costosas que las primeras y se venden en farmacias.
Con aquella información, Desplats presentó un amparo para reclamar a la prepaga la cobertura, con una medida cautelar para la cobertura mientras durara el proceso judicial. Finalmente, un año después la Justicia le dio la razón. Su experiencia, sumada a la de muchos otros padres y madres que fue contactando a través de las redes sociales, le dio la pauta de que era mucho más frecuente de lo que se cree esta situación, en la que obras sociales y prepagas no cumplen con la ley.
“Muchas veces, el argumento es alguna resolución del Ministerio de Salud que ya no está vigente. O simplemente ganan tiempo porque saben que las familias no van a poner en riesgo la vida de sus hijos y, mientras tanto, van a hacer lo que tengan que hacer para poder pagarlas. Sin embargo, la razón oculta detrás de las demoras y los rechazos es que son leches muy caras, y no está en la posibilidad de la mayoría de las familias poder pagarlas”, explica Desplats.
Después de atravesar esa experiencia, Desplats decidió armar una asociación civil llamada “Leches medicamentosas”, desde la que ofrecen asesoramiento legal gratuito a las familias que viven esta situación. Hasta ahora, más de 900 familias lograron destrabar la situación a través de la ayuda que recibieron, por la vía legal o administrativa, ya que en ocasiones es fundamental saber qué puerta tocar y cómo presentar el pedido, detalla Desplats.
Sin embargo, según denuncia, actualmente la dificultad para acceder a estas leches especiales, se agudizó. Una encuesta que realizó la consultora Ipsos entre julio y septiembre pasados, apunta que cuatro de cada diez familias argentinas que reciben la indicación médica de incorporar leches maternizadas o medicamentosas en la alimentación de sus hijos no acceden a ellas, por el rechazo del trámite por parte de quien lo debe proveer.
El relevamiento se realizó entre 305 familias, de niños entre 0 y 2 años. También se consultó a 150 especialistas, entre pediatras, alergistas y gastroenterólogos de distintas partes del país. Según los resultados, en los últimos años habrían crecido los obstáculos impuestos por las obras sociales, prepagas y el Estado para acceder en tiempo y forma a las leches que se indican ante cuadros de alergias alimentarias, trastornos digestivos, prematurez y determinadas enfermedades metabólicas. El relevamiento alcanzó a familias y especialistas de la ciudad de Buenos Aires, Mar del Plata, La Plata, Córdoba, Santa Fe, Rosario, Mendoza y Tucumán.
“Se trata de un derecho fundamental, que está protegido por ley. No obstante, como la información que manejan las familias es bastante dispar, no siempre terminan consiguiendo que los proveedores les entreguen las leches que sus hijos necesitan, cuando las necesitan. Por eso es importante que las autoridades tomen intervención. Los padres de chicos a los que por alguna razón se las indican hemos comprobado que, cuando las reciben y se empiezan a alimentar correctamente, experimentan un cambio total. Comen, tienen otro semblante, descansan, suben de peso, como se espera para su edad”, afirma.
Y aclara que no se trata de sustituir la leche materna, que siempre es el alimento fundamental, sino que esto aplica para casos puntuales en los que la alimentación de leche materna no es posible por problemas metabólicos, de alergias u otros que contempla la ley.
LA NACION consultó a la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) que regula e interviene ante incumplimientos de las obras sociales sobre si hay un aumento de reclamos en este sentido, pero hasta el cierre de esta nota no había recibido respuestas. También se consultó al Ministerio de Salud en el mismo sentido, desde donde tampoco hubo un pronunciamiento oficial. En tanto, la Cámara de Empresas de Medicina Privada de la República Argentina (Cempra), contactada por esta situación, informo que no se registraban demoras en la entrega de las leches. Extraoficialmente, algunos de los consultados deslizaron que se trataría de una campaña impulsada por los laboratorios que elaboran este tipo de leches.
Al ser consultado sobre si reciben apoyo por parte de estas empresas, Desplats sostuvo que no existe vínculo entre la asociación y los fabricantes de leches especiales.
Las familias que estén atravesando situaciones similares pueden solicitar asesoramiento legal gratuito y contactarse con la Asociación de Leches Medicamentosas en su Instagram @leches.medicamentosas, en su sitio www.lechesmedicamentosas.com.ar o por el teléfono 11 6554-3565.