¿Otra demanda en EEUU contra FIFA? Cómo una carta abriría la puerta a ligas europeas para jugar en el país
De todos los lugares desde donde se podía abrir la posibilidad de ver juegos oficiales de futbol europeo en los Estados Unidos, que había evitado la FIFA, sorprendió que fuera la oficina del presidente Joe Biden con una carta emitida desde su oficina la que apoyara la iniciativa de llevar a la Suprema Corte una demanda contra el monopolio que supone el máximo órgano de fútbol en el mundo.
La administración Biden envió una carta a la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos en la que declaró su apoyo a la demanda antimonopolio de Relevant Sports en contra de FIFA y la Federación de Futbol de los Estados Unidos (USSF).
El reporte de 23 páginas entregado por el Gobierno estadounidense recomienda a la Corte que permita que el caso vaya a juicio, sentando en el banquillo al organismo rector del futbol mundial y su afiliado estadounidense.
¿De qué trata la demanda?
La demanda proviene de la negativa de la FIFA para permitir que el duelo entre Barcelona y Girona de La Liga 2018 fuera llevado a cabo en Miami. La promotora había acordado recibir ese partido, el cual sería el primero de La Liga disputado fuera del territorio español y busca ampararse en la ley antimonopolio, alegando un caso de monopolio y competencia desleal.
De acuerdo con la FIFA, los partidos de liga entre equipos del mismo país deben disputarse en dicho territorio, cerrando la puerta a la realización de encuentros oficiales en cualquier otro lugar del mundo.
Si bien no se han disputado partidos de liga española fuera del país, la Supercopa Española se ha jugado en Marruecos y Arabia Saudita.
Tras la determinación de FIFA, otro duelo oficial, ahora entre dos equipos de la Liga Ecuatoriana, fue cancelado. Dicho partido se disputaría en 2019.
Relevant Sports, perteneciente a Stephen Ross y también dueño de los Miami Dolphins de la NFL, habría buscado generar una serie de partidos oficiales de La Liga de España y la Premier League inglesa en el país norteamericano, algo similar a lo que sucede con las ligas estadounidenses y sus series internacionales.
Estados Unidos, némesis de la FIFA
Ya anteriormente hubo alguna demanda en el futbol de Estados Unidos en contra de la FIFA. Este fue el caso por corrupción en contra de altos funcionarios del organismo rector del futbol en la asignación de sedes mundialistas.
Entre las detenciones y dimisiones a partir del caso encabezado por la fiscal Loretta Lynch, figuras como el entonces presidente de la FIFA, Joseph Blatter, su vicepresidente, Jack Warner, el expresidente de Conmebol, Nicolás Leoz, y el presidente de la UEFA, Michel Platini enfrentaron cargos penales, y no fueron los únicos.
Gracias al operativo se desvelaron una serie de casos de corrupción que superó los 150 millones de dólares. Dentro de los casos más sonados estuvo la compra de votos para los Mundiales de Francia 1998, Sudáfrica 2010, Rusia 2018 y Qatar 2022.
Repercusiones posibles si la corte falla a favor
El resultado más claro y obvio es que se abriría la posibilidad para que ligas de cualquier país puedan llevar a cabo duelos de liga en la Unión Americana. La Liga y la Premier League podrían organizar eventos anuales, similares a la NFL, en los Estados Unidos.
No obstante, eso abriría la puerta a más posibilidades. ¿Si Estados Unidos puede llevar a la FIFA a la corte, por qué no habría de hacerlo cualquier otro país? Arabia Saudita, China, Qatar, Japón… todos podrían recibir partidos oficiales de ligas europeas, acercando a su afición a los mejores equipos de futbol del mundo.
Otra posibilidad clara en Estados Unidos sería la realización de partidos de ligas de América. La Liga Ecuatoriana ya estaba lista para comenzar en 2019 y la oportunidad económica podría llevar a otras ligas a buscar lo mismo.
Equipos de la Liga MX ya juegan una cantidad importante de partidos en el vecino del norte, entre duelos amistosos, Leagues Cup y Concacaf Champions League. Sin embargo, juegos oficiales de la Liga MX en estadios de la Unión Americana asegurarían buenas entradas y podrían recuperar algo de la popularidad que ha perdido el circuito, que ya no es la más vista en los Estados Unidos.