UE exige a Rusia reinstalación de boyas estonias en río fronterizo

Hombres pescando cerca de las fortalezas de Narva, izquierda, en Estonia, e Ivangorod, derecha, en Rusia, el miércoles 24 de mayo de 2023. (Foto AP/Jim Heintz, archivo)

BRUSELAS (AP) — El jefe de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, calificó el viernes de “inaceptable” el retiro de boyas estonias por parte de guardias fronterizos rusos en un río que separa al país báltico de Rusia y exigió una explicación a Moscú y la devolución inmediata de los flotantes naranjas.

La madrugada del jueves, los guardias fronterizos estonios se dieron cuenta de que sus homólogos rusos habían retirado 25 de las 50 boyas que Estonia había instalado en el río Narva para evitar que los botes crucen accidentalmente la frontera.

Borrell afirmó que el incidente “es parte de un patrón más amplio de comportamiento provocativo y acciones híbridas por parte de Rusia”.

Estonia también lo calificó de “inaceptable”, pero dijo que su respuesta “sigue siendo tranquila y lúcida”.

“Tratamos esto como un incidente fronterizo provocativo”, señaló el jueves el Ministerio de Relaciones Exteriores en Tallin.

Durante décadas, ambos países han instalado boyas en el río Narva durante el verano, entre las ciudades de Narva, Estonia, e Ivangorod, Rusia.

Cada año, se verifica la señalización de las rutas marítimas porque “el lecho del río cambia con el tiempo”, explicó Eerik Purgel, el jefe local de la Guardia Fronteriza de Estonia. El año pasado, Rusia manifestó su desacuerdo sobre la ubicación de las boyas estonias.

Este año, “decidimos lanzar marcas flotantes al agua para la temporada de verano según un acuerdo de 2022, porque son necesarias para evitar errores de navegación, para que nuestros pescadores y otros aficionados no caigan accidentalmente en aguas rusas”, dijo Purgel.

Las primeras 50 boyas se instalaron el 13 de mayo. Sin embargo, 25 de ellas fueron retiradas por sus homólogos rusos a primera hora de la mañana, 10 días después, añadió.

El Ministerio de Relaciones Exteriores de Estonia convocó el viernes al jefe adjunto de la misión de Rusia, publicó la agencia Baltic News Service. BNS citó al canciller Margus Tsahkna diciendo que “expresaron claramente al encargado de negocios ruso que tales acciones son provocativas e inaceptables”.

La cancillería afirmó que la acción “encaja bien dentro del patrón más amplio del comportamiento provocador de Rusia” y trazó paralelismos con los incidentes de mapeo fronterizo en el mar Báltico a principios de esta semana. Según reportes de prensa, Moscú podría revisar las fronteras de sus aguas territoriales en la región.

Tras la invasión rusa a Ucrania a principios de 2022, Finlandia y Suecia se integraron a la OTAN, lo que significa que el mar Báltico —el punto de acceso marítimo de Rusia a la ciudad de San Petersburgo y su enclave de Kaliningrado— está ahora casi rodeado por miembros de la alianza militar.