Ucrania lanza casi 160 drones sobre Rusia en un ataque sin precedentes
Se intensifica el conflicto entre Rusia y Ucrania, las defensas aéreas rusas han logrado interceptar y destruir un número altísimo de drones ucranianos en una sola noche. Este evento marca un hito significativo en la guerra, llevando el conflicto más allá de las fronteras tradicionales y adentrándose profundamente en territorio ruso.
El Ministerio de Defensa ruso informó que se neutralizaron un total de 158 drones, con incidentes que se extendieron a lo largo de 15 regiones del país. La capital, Moscú, no quedó exenta de este ataque masivo, donde se derribaron dos drones, mientras que la región circundante enfrentó la amenaza de otros nueve.
Las regiones fronterizas con Ucrania soportaron el mayor impacto de este ataque sin precedentes. Kursk, en particular, se vio afectada por 46 drones, lo que se correlaciona con recientes incursiones de fuerzas ucranianas en la zona, descritas como las más significativas en suelo ruso desde la Segunda Guerra Mundial. Bryansk, Voronezh y Belgorod también experimentaron un alto número de interceptaciones.
Aumenta el alcance de los drones
Lo más alarmante de este ataque es su alcance geográfico. Drones fueron neutralizados en regiones tan distantes como Tver e Ivanovo, demostrando la capacidad de Ucrania para atacar más allá de las zonas de conflicto inmediatas. Este desarrollo sugiere una nueva fase en la estrategia ucraniana, enfocada en llevar el conflicto al corazón de Rusia.
En Moscú, el alcalde Sergei Sobyanin reportó que los restos de un dron derribado provocaron un incendio en una refinería de petróleo. Este incidente subraya la estrategia ucraniana de atacar infraestructuras críticas para debilitar la capacidad logística rusa y su economía de guerra.
Estos ataques con drones representan un cambio significativo en la dinámica del conflicto. Ucrania ha intensificado sus ataques aéreos en suelo ruso desde el inicio del año, centrándose en refinerías y terminales petroleras. Esta táctica busca ralentizar la ofensiva del Kremlin, afectando su capacidad para sostener operaciones militares a largo plazo.
Mientras tanto, Ucrania no está exenta de ataques. Las fuerzas aéreas ucranianas reportaron haber derribado ocho de once drones lanzados por Rusia. Además, se registraron víctimas civiles debido a bombardeos en las regiones de Sumy y Járkov, evidenciando que el conflicto continúa cobrando vidas en ambos lados de la frontera.