Treinta destacados peloteros cubanos en el béisbol de Estados Unidos

Cuba fue la segunda potencia beisbolera del mundo antes de que en 1961 se interrumpiera la entrada de sus jugadores a la pelota profesional de Estados Unidos debido a la abolición de la Liga Profesional Cubana.

Pasaron 23 años para que el próximo pelotero proveniente de los nuevos campeonatos cubanos (Serie Nacional) volviera a vestir un uniforme de Grandes Ligas. Ese fue el santiaguero Bárbaro Garbey que debutó en 1984 con los Tigres de Detroit.

A partir de la década de los noventa comenzaron a escapar de la isla otros jugadores a través de salidas ilegales o de eventos internacionales en busca de progreso económico y profesional.

Desde entonces, el renacer del pelotero cubano en Norteamérica comenzó a crecer y en estos momentos se puede asegurar que al hablar de estelaridad en Grandes Ligas es obligatorio hablar de los antillanos.

Hoy vamos a mencionar a un grupo de 30 peloteros que encabezan por nivel de calidad la larga historia del béisbol cubano en Estados Unidos. Lo hacemos dividiéndolo en cuatro grupos de jugadores:

los que actuaron cuando en la isla existía el segundo mejor torneo del mundo, los que lograron salir en el momento de eliminarse el profesionalismo, los que actuaron en Series Nacionales para luego hacerlo en Ligas Mayores y los mejores exponentes de las Ligas Negras (hoy consideradas como Grandes Ligas) que jugaron en épocas donde en la MLB se discriminaba por el color de la piel.

Sabemos que las comparaciones crean polémicas, pero son obligatorias en los deportes. También entendemos que las opiniones difieren, pero deben ser respetadas.

Usted pudiera estar de acuerdo con nuestra lista o agregar algún jugador que considere merecerlo, pero esta es nuestra selección de 30 peloteros cubanos más destacados en Estados Unidos.

¡Bienvenido al debate respetuoso!

Rafael Palmeiro: Nació en La Habana. Creció y desarrolló su carrera en Estados Unidos. Si hablamos por puras estadísticas, Palmeiro es el más destacado cubano en Grandes Ligas. Se encuentra en el grupo élite de seis bateadores con 500 jonrones y 3,000 imparables.

Con 569 vuelacercas, 1,835 impulsadas y 3,020 incogibles, su nombre no se encuentra en el Salón de la Fama por sus declaraciones ante el Congreso de Estados Unidos y porque su positivo por esteroides sigue en la mente de los periodistas, convirtiéndose en una barrera difícil de romper para llegar a Cooperstown.

Tony Pérez: Oriundo de Camagüey. Terminó con 379 jonrones y 1,652 impulsadas. Logró siete temporadas con más de 100 remolcadas y fue uno de los mejores en este renglón ofensivo en su etapa de esplendor. Por méritos propios fue elegido al Salón de la Fama en 2000.

Tony Oliva: El pinareño fue uno de los mejores bateadores de su generación. Con los Mellizos de Minnesota ganó tres coronas de bateo, lideró cinco veces en imparables, ganó el premio Novato del Año en 1964, terminó dos veces en segundo lugar por el galardón de Más Valioso y su promedio fue de .304.

Actuó sólo en 10 temporadas estando en buena forma física debido a una seria lesión que le afectó su carrera. Fue seleccionado al Salón de la Fama en 2022.

Orestes Miñoso (Minnie): Nació en Perico, Matanzas. Por el problema racial que existía en su época tuvo que jugar con los New York Cubans en las Ligas Negras de Estados Unidos antes de iniciarse con Cleveland y luego como luminaria de los Medias Blancas de Chicago.

Fue el primer pelotero negro latino en Grandes Ligas y participó en 13 Juegos de Estrellas. A la defensa fue un buen jardinero izquierdo que ganó tres premios Guante de Oro. A la ofensiva un excelente robador de bases, bateador de promedio y fuerza.

Terminó su carrera con average de .299, sumó 2,113 imparables, 1,089 impulsadas, 1,228 anotadas, 195 jonrones, 216 estafas, .387 de embasamiento, 3,253 en total de bases, un OPS de .848 y recibió 197 pelotazos (#11). Lideró en varias temporadas en renglones ofensivos y defensivos. Fue elegido al Salón de la Fama en 2022.

Luis Tiant: Natural de Marianao, La Habana. Sumó 229 victorias, 172 derrotas y efectividad de 3.30. Ponchó a 2,416 bateadores. Ganó más de 20 juegos en cuatro temporadas y fue uno de los mejores serpentineros de su época. Su nombre debería estar en el Salón de la Fama, pero sigue esperando a que la justicia lo ubique en el lugar que merece.

José Canseco: Nació en La Habana y creció en Miami. Sumó 462 jonrones, remolcó 1,407 carreras y se estafó 200 bases. Fue el primer jugador en dar 40 jonrones y robar 40 bases (42-40) en una temporada. Ganó los premios Novato del Año en 1986 y Jugador Más Valioso en 1988.

Camilo Pascual: Nacido en La Habana. Brilló en la pelota profesional cubana en la década del cincuenta con los Elefantes del Cienfuegos. Fue uno de los lanzadores con mejor lanzamiento de curva en Grandes Ligas. Ganó más de 20 juegos en dos temporadas.

Retiró a 2,167 bateadores por la vía de los strikes. Lideró en tres ocasiones en ponches propinados, blanqueadas y juegos completos. Terminó con 174 victorias y efectividad de 3.63 actuando en gran parte de su carrera con un equipo sotanero como los Senadores de Washington.

Miguel Cuéllar: Nació en Las Villas. Es el único lanzador cubano en ganar el premio Cy Young (1969). Terminó su carrera con 185 victorias, 130 derrotas y efectividad de 3.14. Sumó más de 20 triunfos en tres temporadas.

Adolfo Luque (Papá Montero): Oriundo de La Habana. Leyenda del béisbol profesional cubano como lanzador y mánager. En Grandes Ligas ganó 194 juegos, perdió 179 con efectividad de 3.24. En 1923 lideró en victorias con 27, carreras limpias (1.93), promedio de ganados y perdidos (.771), repitiendo en efectividad en 1925 con 2.63.

Dagoberto Campaneris (Bert): Nació en Matanzas. Está ubicado en el lugar 14 de todos los tiempos en bases robadas en Grandes Ligas, con 649. Sumó 2,249 imparables, lideró en estafas durante seis temporadas, en una ocasión en incogibles (1968) y triples (1965).

José Cardenal: Natural de Matanzas. En 18 temporadas de Grandes Ligas terminó con promedio de bateo de .275, pegó 1,913 imparables, 138 jonrones, 775 impulsadas y 329 estafas. A la defensa, fue un excelente jardinero central.

Tony Taylor: Nació en Matanzas. Pegó 2,007 imparables, anotó 1,005 carreras, se robó 234 bases y terminó con average de .261. Buen jugador defensivo en la intermedia y en la antesala.

Octavio Rojas: (Cookie): Oriundo de La Habana. Acumuló 1,660 incogibles, tuvo promedio de .263 y en dos temporadas superó la marca de los .300. A la defensa fue uno de los mejores intermedistas de su época, liderando tres veces en promedio defensivo, una vez en doble matanzas con 110 en 1968; así como en asistencias y outs realizados.

Leonardo Cárdenas (Leo): Nació en Matanzas. Pegó 1,725 incogibles, dio 118 jonrones, remolcó 689 carreras y anotó 662. A la defensa fue uno de los mejores torpederos de su etapa con un excelente desplazamiento hacia todos los ángulos del terreno.

Ganó el Premio Guante de Oro en 1965, lideró en cuatro ocasiones en outs realizados, una vez en asistencias con 570 (1965), dos en doble matanzas, tres en promedio de fildeo y cinco en total de partidos en su posición.

Tony González (Haitiano): Nacido en el Central Cunagua, Las Villas. Un bateador de promedio con cuatro temporadas por encima de la marca de .300. En su carrera terminó con average de .286 y embasamiento de .350.

A la defensa fue uno de los mejores en el bosque central. Lideró en dos ocasiones en promedio de fildeo, terminando inmaculado sin errores en 1962 en 110 juegos y 969.2 entradas. Cubría mucho terreno en el campo central y su brazo era poderoso.

Yasmani Grandal: Nació en Güira de Melena, antigua provincia Habana (ahora Artemisa). No actuó en Series Nacionales y llegó niño junto a su familia a Estados Unidos. Desarrolló su carrera a través del sistema universitario jugando para Miami.

Debutó en Grandes Ligas en 2012 con los Padres de San Diego. Luego con los Dodgers de Los Ángeles, Cerveceros de Milwaukee y Medias Blancas de Chicago. Ha sido el receptor cubano más completo en Grandes Ligas. En 12 temporadas suma 928 incogibles, 185 jonrones, 565 remolcadas, un embasamiento de .347 y un OPS de .773.

Ha estado en dos Juegos de Estrellas. A la defensa realiza un buen trabajo detrás del plato.

JUGADORES PROVENIENTES DE SERIES NACIONALES

José Abreu (Pito): Natural de Cienfuegos. Comenzó en Grandes Ligas a los 27 años y desde su debut ha estado repartiendo batazos de todas las dimensiones. En diez temporadas suma 261 jonrones, 953 impulsadas, con .348 de embasamiento, .286 de promedio, un slugging de .494 y un OPS de .843.

Cinco veces ha superado los 30 cuadrangulares, en seis ocasiones las 100 remolcadas, siendo líder en 2019 (123) y 2020 (60). En la temporada corta del 2020 guió en slugging (.617), total de bases (148) y extrabases (34).

Ganó el premio de Mejor Novato en 2014 y de Jugador Más Valioso en 2020. Ha actuado en tres Juegos de Estrellas. Desde que se inició en Grandes Ligas ha estado ubicado entre los mejores bateadores de la Liga Americana.

Yordan Álvarez: Este joven de 26 años está considerado en estos momentos uno de los cinco mejores bateadores de Grandes Ligas. Ganó el premio Novato del Año en 2019 con los Astros de Houston.

En cuatro temporadas reales suma 513 imparables, 129 jonrones, 380 impulsadas, un embasamiento de .390, slugging de .588, un OPS de .978, con 324 anotadas y .295 de promedio.

En 2020 tuvo nueve turnos al bate al pasar por el quirófano por una lesión en la rodilla. Ganó el premio Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana en 2021. Ha estado en tres Series Mundiales y su ofensiva ha sido brillante en las series de postemporada. Logró Bate de Plata en 2022 y ha estado en dos Juegos de Estrellas.

Jorge Soler: Un poderoso bateador que acumula 170 jonrones y 452 impulsadas. Fue líder en cuadrangulares de la Liga Americana en 2019 al conectar 48. En 2023 con los Miami Marlins dio 36 bambinazos. Ha estado en un Juego de Estrellas.

Liván Hernández: Nació en Las Villas. Fue un lanzador que nunca estuvo en la lista de lesionados durante su carrera de 17 temporadas, sumando 177 victorias en Grandes Ligas. Lideró tres veces en entradas lanzadas, dos en aperturas y en otras dos en juegos completos.

En 1997 con los Florida Marlins ganó el premio de Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional y luego lo repitió en la Serie Mundial ante Cleveland.

Aroldis Chapman (El Misil Cubano): Nació en Holguín. Ha tirado el lanzamiento con mayor velocidad en la historia de Grandes Ligas. Suma 321 juegos salvados (#21), 1,148 ponches en 698.1 entradas y un WHIP de 1.084. En 2019 ganó el premio de Mejor Relevista de la Liga Americana. Ha participado en siete Juegos de Estrellas.

Yuli Gurriel (La Piña): Nació en Sancti Spíritus. Llegó muy tarde al béisbol de Grandes Ligas (32 años). De haberlo hecho jovencito hubiera estado entre las superestrellas de esta pelota. En ocho temporadas mantiene promedio de .281, con 939 imparables, 222 dobles, 462 impulsadas, 432 anotadas, embasamiento de .326 y 27 bases robadas.

Conquistó el título de bateo de la Liga Americana en 2021, con .319. A la defensa obtuvo el premio Guante de Oro en 2021. Su average defensivo de .995 como inicialista lo ubica en el puesto 18 de todos los tiempos. Ha sido uno de los grandes peloteros de las Series Nacionales y con el equipo Cuba en eventos internacionales.

Kendrys Morales: Nació en Fomento, Las Villas. Terminó su carrera con 213 jonrones, 740 impulsadas, slugging de .453, embasamiento de .327 y OPS de .780. Anotó 584 carreras y sumó 1,289 con promedio de .265.

En nueve campañas superó los 20 jonrones con dos por arriba de 30. Remolcó más de 100 carreras dos veces. En 2015 ganó los premios Bate de Plata y Mejor Bateador Designado (Galardón Edgar Martínez).

Yoenis Céspedes (La Potencia): Oriundo de Campechuela, Granma. En ocho temporadas completó 165 jonrones, 528 impulsadas, 870 imparables, embasamiento de .327, con 475 anotadas, 43 bases robadas, slugging de .497 y .273 de promedio.

Sumó más de 80 remolques en cinco campañas; dos de ellas por encima de 100. Superó los 20 jonrones en cinco ocasiones con dos por arriba de 30. Logró un premio Bate de Plata en 2015. A la defensa ganó el galardón Guante de Oro como jardinero izquierdo. Participó en dos Juegos de Estrellas.

Sus números fueron buenos hasta el momento de sufrir una lesión que mermó su carrera. Tiene 37 años y su posibilidad de regreso a las Grandes Ligas es reducida.

Yasiel Puig (Caballo Loco): Natural de Cienfuegos. Problemas de disciplina le arrebató la oportunidad de convertirse en una superestrella de Grandes Ligas. En siete temporadas sumó 132 jonrones, 415 impulsadas, 441 anotadas, 834 imparables, 79 bases robadas, .348 de embasamiento, slugging de .475, un OPS de .823 y .277 de promedio.

Su defensa fue excelente, su brazo poderoso y sus tiros precisos a las bases. Tiene 33 años y sus posibilidades de regresar a Grandes Ligas son mínimas.

Orlando Hernández (El Duque): Lanzador inteligente con excelente control y una curva efectiva frente a bateadores derechos. Ganó 90 y perdió 65 con 4.13 de efectividad. Ponchó a 1,086 en 1,314.2 entradas con un WHIP de 1.263. Brilló en series de postemporada terminando con 9-3 y 2.55 de efectividad, con 107 ponches en 106 entradas.

Fue elegido el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana en 1999. Posee cuatro anillos de Serie Mundial, tres de ellos con los Yankees de Nueva York y el otro con los Medias Blancas de Chicago. Es bueno indicar que se inició tarde en Grandes Ligas teniendo 32 años.

CUBANOS EN LAS LIGAS NEGRAS

Martín Dihigo (El Inmortal): Nació en Matanzas. Estrella de la pelota profesional cubana, de los torneos de Latinoamérica y de las Ligas Negras de Estados Unidos. Está considerado el jugador más versátil de todos los tiempos. Fue elegido a Cooperstown en 1977 por el Comité Especial de las Ligas Negras.

Cristóbal Torriente: Nació en Cienfuegos. Fue uno de los mejores bateadores en la historia de las Ligas Negras de Estados Unidos y en la pelota profesional cubana.

Sobre Cristóbal Torriente y José Méndez dijo en una ocasión el grandioso Babe Ruth: “Con Torriente y Méndez en mi equipo ganamos el campeonato en el mes de septiembre y nos vamos de pesca en espera de la Serie Mundial’’. Pertenece a Cooperstown desde el 2006, elegido por el Comité Especial de dicho béisbol.

José de la Caridad Méndez (El Diamante Negro): Nació en Cárdenas, Matanzas. Uno de los grandes serpentineros en la historia de las Ligas Negras de Estados Unidos. Derrotó en varias ocasiones a equipos de Grandes Ligas en juegos de exhibición.

El famoso mánager John McGraw, dijo sobre Méndez: “Si pudiera pintarlo de blanco sería uno de los mejores lanzadores de Grandes Ligas’’. Elegido a Cooperstown en 2006 por el Comité Especial de las Ligas Negras.

Alejandro Oms. “El Caballero”: Excelente bateador de promedio en las Ligas Negras de Estados Unidos y en la pelota profesional cubana. Buen jardinero defensivo y corredor rápido en las bases. Para muchos, Oms merece estar en Cooperstown por su brillante historial en las Ligas donde sólo la pelota era blanca.

MENCIÓN DE HONOR

José Fernández. Brillante lanzador de los Miami Marlins que ganó 38 partidos y perdió 17 con 2.58 de efectividad. El cubano nacido en Santa Clara el 31 de julio de 1992 ganó el premio de Mejor Novato y estuvo en dos Juegos de Estrellas. Ponchó a 589 bateadores en 471.1 entradas con un WHIP de 1.054.

En su última temporada en 2016 retiró por los strikes a 253 bateadores en 182.1 episodios. El paso que llevaba lo hubiera convertido en uno de los mejores serpentineros latinos en Grandes Ligas. Pero falleció en Miami el 29 de septiembre del 2016 a los 23 años en un trágico accidente marítimo.

NOTA: Existen varios jugadores activos que poseen un enorme talento y que en estos momentos están brillando en Grandes Ligas que pudieran engrosar esta lista en los próximos años, entre ellos el jardinero de los Rangers de Texas, Adolis García.