Steinmeier llama a defender la democracia en el 75 aniversario de la Ley Fundamental
Berlín, 23 may (EFE).- El presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, llamó hoy a defender los logros de la libertad y la democracia en el 75 aniversario de la promulgación de la Ley Fundamental, que calificó de "obra maestra" y "gran regalo" que merece no sólo ser recordado, sino cuidado, preservado y protegido día a día.
En su discurso en el acto de Estado cerca del edificio del Reichstag con motivo del aniversario de la Ley Fundamental y de los 35 años de la Revolución Pacífica que precedió al fin de la República Democrática Alemana (RDA), Steinmeier recordó que aunque la democracia triunfara en Alemania, "no está garantizada para siempre".
"Otros no la protegerán. Sólo nosotros podemos protegerla. De nosotros depende", dijo, al referirse a los que quieren debilitarla y socavarla, a los que desprecian sus instituciones e insultan y denigran a sus representantes, y de los que advirtió que están ganando fuerza.
"Hoy nos toca hacernos valer en tiempos difíciles. Nos corresponde a nosotros seguir escribiendo la historia de nuestra democracia", subrayó, y llamó, en el 75 aniversario de la Constitución, a renovar su promesa y preservar el legado de una Alemania libre, democrática y buena.
La Ley Fundamental, que garantiza la libertad y exige responsabilidad, señaló, fue concebida como provisional, "abierta para aquellos en el Este a los que la potencia de ocupación soviética impidió emprender el camino hacia la democracia" y supuso "un punto de partido hacia un futuro mejor".
"Nunca fue creada para la eternidad y, sin embargo, ha perdurado" y después de tres cuartos de siglo, "no es en absoluto vieja, ni mucho menos anticuada, aunque sea entretanto una de las constituciones más antiguas del mundo", y se ha convertido en modelo para muchas otras, añadió.
El presidente aludió a la feliz coincidencia histórica del doble aniversario que Alemania celebra este año con los 75 años de la Carta Magna y los 35 años de la revolución que llevaron a la caída del muro de Berlín y se refirió a los años 1949 y 1989 como "los dos hitos decisivos" de la historia de la República Federal.
"Damos las gracias a quienes nos dieron los cimientos de un nuevo orden liberal y democrático. Y damos las gracias a quienes derrocaron la dictadura hace 35 años e hicieron posible la democracia en toda Alemania", destacó.
Steimeier expresó su preocupación por el embrutecimiento de las formas en materia política al referirse a las noticias casi diarias de agresiones físicas a cargos públicos y voluntarios, y subrayó que la democracia necesita competencia y también disputa, pero no violencia, que no hace más que sembrar desconfía y silencia a las personas.
Una época de retos
Por otra parte, señaló que Alemania vive una época de prueba, con una crisis detrás de otra, como la pandemia, la inflación el cambio climático, el terror de Hamás, la guerra y la catástrofe humanitaria en Oriente Próximo, y advirtió de "años duros y difíciles", para cual la respuesta es hacerse valer, con realismo y ambición, y no esconder la cabeza.
También se refirió a la amenaza que representa Rusia y que "no desaparecerá sin más" y en ese sentido calificó de imperativo invertir en seguridad y defensa y reforzar la Alianza.
Al acto de Estado, que fue iniciado con doce campanadas y durante el cual también se leyeron fragmentos de la Ley Fundamental, acudieron, además del actual canciller, Olaf Scholz, sus predecesores, Angela Merkel y Gerhard Schröder, así como el expresidente alemán Christian Wulff.
Asimismo, figuraban entre los invitados destacados los presidentes de la Cámara Baja y del Senado, así como del Tribunal Constitucional, Bärbel Bas, Manuela Schwesig y Stephan Harbarth.
La superviviente del Holocausto Margot Friedläender, de 102 años fue saludada cariñosamente por Merkel.
La Orquesta Filarmónica de Berlín interpretó sinfonías de Johannes Brahms y Ludwig van Beethoven, además del himno de Alemania para cerrar el acto de Estado.
(c) Agencia EFE