El Sinn Féin adelanta al DUP como principal fuerza norirlandesa en la administración local

Dublín, 20 may (EFE).- El Sinn Féin se ha convertido por primera vez en la principal fuerza en las administraciones locales de Irlanda del Norte, por delante del probritánico DUP, tras las elecciones locales celebradas el pasado jueves en la provincia.

Cuando apenas quedan por contabilizar 12 de un total de los 462 puestos que componen los once consejos de la región, la formación nacionalista obtuvo 139, por 121 del Partido Democrático Unionista (DUP), en segundo lugar.

También avanzó hoy con 65 el Partido de la Alianza, multiconfesional y de centro liberal, que ya se convirtió en la tercera formación regional en la última cita con las urnas.

El Partido Unionista del Ulster (UUP) obtiene hasta ahora 53 concejalías, 39 el Partido Socialdemócrata y Laborista (SLDP, nacionalista) y 33 el resto de las formaciones.

La vicepresidenta del antiguo brazo político del ya inactivo IRA, Michelle O'Neill, aprovechó la ocasión para instar al DUP a poner fin a su boicot en la Asamblea de poder compartido de Stormont.

El rechazo del DUP a los arreglos comerciales acordados por Londres y Bruselas sobre el encaje de Irlanda del Norte pos-Brexit, recogidos primero en el controvertido Protocolo y ahora en el llamado Acuerdo Marco de Windsor, mantiene en el limbo el Ejecutivo de Belfast desde febrero de 2022.

O'Neill tildó de "histórico" el resultado cosechado en los comicios locales y dijo que la campaña de su partido se había centrado "en un liderazgo positivo, en la restauración del ejecutivo, en hacer que la política funcione, y eso ha resonado entre el electorado".

En estos comicios locales, el DUP defendía 122 concejalías, por 105 del Sinn Féin, 75 del Partido Unionista del Ulster (UUP), 59 del Partido Socialdemócrata y Laborista (SLDP, nacionalista) y 53 del Partido Alianza, mientras que el resto es de otras formaciones.

Según los medios locales, el número de votantes en estos comicios aumentó ligeramente en áreas consideradas de mayoría nacionalista o republicana y se detectó también una ligera bajada en zonas de mayoría unionista.

Poco más de 1,3 millones de norirlandeses con derecho a voto fueron llamados el pasado jueves a las urnas, tras una campaña marcada por la crisis del Gobierno autónomo, que permanece suspendido desde hace más de un año.

El complejo sistema electoral norirlandés, de transferencia de voto, ralentizó el proceso de recuento que, en ocasiones, puede prolongarse durante varios días hasta confirmar la composición exacta de los consejos.

(c) Agencia EFE