El Senado de México aprueba la controvertida reforma judicial de López Obrador que habilita la elección de jueces por voto popular
CIUDAD DE MÉXICO.- El Senado de México aprobó el miércoles de madrugada una polémica propuesta de reforma al poder judicial, impulsada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador. Esta controversial enmienda constitucional hará que todos los jueces se elijan en elecciones, un cambio que los críticos temen politice la rama judicial y ponga en peligro la democracia mexicana.
En una sesión maratónica que duró más de 12 horas, y que debió ser pausada por la interrupción de manifestantes en el edificio del Senado, el partido gobernante Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y sus aliados lograron los dos tercios finales de los votos necesarios para aprobar la reforma, que ha provocado protestas, una huelga de trabajadores judiciales y volatilidad en el mercado.
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Trabajadores del poder judicial que se manifiestan afuera del Senado de la República en contra de la reforma judicial iniciaron una marcha en apoyo a sus compañeros de la del Tribunal Superior de la Ciudad de México. pic.twitter.com/6LWMXW6RNc— Uno TV (@UnoNoticias) September 9, 2024
La iniciativa se aprobó la semana pasada con facilidad en la cámara baja, donde Morena y sus aliados tienen una amplia mayoría. El Senado era el mayor obstáculo para la propuesta, que requería deserciones de legisladores opositores para salir adelante.
La propuesta necesita ahora la ratificación de las legislaturas de 17 de los 32 estados de México. Se cree que el partido en el gobierno tiene el apoyo necesario tras sus buenos resultados en elecciones recientes.
“Los jueces, con honrosas excepciones (...), están al servicio de una minoría rapaz que se ha dedicado a saquear al país”, afirmó el presidente este miércoles en su habitual conferencia de prensa. También afirmó que el máximo tribuna se encuentra al servicio de los mayores grupos criminales y de ser un aliado de sus adversarios políticos. El presidente mexicano se manifestó en contra los detractores de esta reforma y afirmó que “México dará un ejemplo al mundo” porque el poder judicial, así como se encuentra ahora solo está subordinado a los poderes económicos y “no imparte justicia”. Según sus dichos, para él resulta “importantísimo terminar con la corrupción y la impunidad” y eso se logrará con la legitimidad de jueces “elegidos por el pueblo”.
La traición que hizo posible la reforma
Uno de esos cambios de posición llegó el martes del opositor Partido Acción Nacional (PAN), cuando un legislador que antes se había posicionado en contra de la reforma pidió una baja médica y su padre, un exgobernador, sugirió que votaría a favor. El legislador regresó a su escaño para dar a la propuesta el último voto que necesitaba.
Miguel Ángel Yunes, fue tildado de traidor por sus compañeros de bancada.
“Hubiera sido más decente, querido amigo, que nos dijeras ‘los voy a traicionar’”, le espetó el senador y presidente del PAN, Marko Cortés, a Yunes padre, desde el presidio.
“¡Cobarde y traidor eres tú!”, le respondió Yunes.
Más tarde, ya en la sede improvisada a la que se tuvo que trasladar la sesión por las protestas, apareció el propio Miguel Ángel Yunes hijo para confirmar su voto favorable a la reforma.
“Ni cobarde, ni traidor, salí del hospital para venir a dar las razones de mi voto y para responder a quienes en lo últimos días y también hoy me han agredido. He sido objeto de un linchamiento público”, dijo Yunes desde el estrado.
Sesión interrumpida
El martes por la noche, apenas unas horas después de que Morena pareciera haber conseguido los votos necesarios, manifestantes con tuberías y cadenas irrumpieron en la cámara. Al menos una persona se desmayó.
Los inconformes dijeron que los legisladores no estaban escuchando sus demandas. Ingresaron ondeando banderas de México y pancartas en contra de la reforma, y algunos senadores de la oposición se les sumaron mientras gritaban consignas dentro de la cámara del Senado. Afuera del recinto, otros estallaron en júbilo cuando los noticieros anunciaron que el Senado tomaría un receso.
Entre ellos se encontraba Alejandro Navarrete, un empleado del poder judicial de 30 años de edad, quien dijo que personas como él que trabajan en los tribunales acudieron para exigir al Senado que rechace la propuesta “sabiendo el peligro que presenta la reforma”.
“Decidieron traicionar a su nación y venderse por cualquier capital político que les ofrecieron, nos sentimos obligados a entrar al Senado”, dijo Navarrete mientras ondeaba una bandera de México. “Nuestra intención no es violentar, no pretendemos lastimarlos. Pero pretendemos dejar establecido que la sociedad mexicana no va a permitir que nos lleven rumbo a una dictadura”.
💥#Ahora | “¡Queremos ver a Yunes! ¡Yunes traidor, te vendiste al dictador!”: manifestantes que lograron ingresar al recinto, exigen la presencia del senador Miguel Ángel Yunes Linares (@YoconYunes).
📹 @NelSanMar pic.twitter.com/wGAkTfTX6U— Animal Político (@Pajaropolitico) September 10, 2024
Pero poco después, el Senado volvió a reunirse en otro lugar y retomó el debate sobre la propuesta. La primera votación a favor llegó poco después de la medianoche.
Empleados judiciales y estudiantes de derechos han protestado contra el proyecto durante semanas.
Detractores y analistas afirman que la medida, la cual haría que los jueces sean elegidos por voto popular, pone en riesgo la independencia judicial y representa un duro golpe para el sistema de contrapesos del gobierno.
López Obrador -un populista que ha tenido marcadas diferencias desde hace tiempo con los organismos reguladores independientes, que ha ignorado fallos judiciales y lanzado fuertes críticas contra jueces- asegura que su plan acabaría con la corrupción al facilitar sancionar a los magistrados. Sus detractores afirman que la medida perjudicará al poder judicial, llenará las cortes con jueces afines al partido en la presidencia y permitirá que cualquier persona con un título en derecho se convierta en juez, e incluso facilitaría que políticos y delincuentes puedan influir en los fallos del tribunal.
La propuesta ha generado preocupación entre los inversionistas e incluso el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, se refirió al plan como un “riesgo” para la democracia y una amenaza económica.
Agencias AP y Reuters