La selección de fútbol de Estados Unidos en Qatar dio el primer gran paso en su camino al Mundial 2026

No hay ninguna duda de que la selección de fútbol de Estados Unidos hizo un papel más que decoroso en la Copa del Mundo de Qatar 2022 donde dejó muy grata impresión y lista la mesa para ser un gran anfitrión del Mundial 2026.

EEUU avanzó a octavos de final en tras empatar con Inglaterra (0-0) y Gales (1-1), vencer heroicamente a Irán (1-0) con gol de su capitán Christian Pulisic.

En esta instancia perdió (3-1) con Países Bajos que tuvo más pegada después de estar gran parte del partido a merced de los norteamericanos.

Nada que reprochar. Los jugadores regresaron a casa con la frente en alto después de caer con las botas puestas, dándolo todo y con la sangre en el ojo al saber que pudieron llegar más lejos.

El seleccionador Gregg Berhalter ha hecho un gran trabajo, pero sabe que esto fue un punto y seguido. La nueva meta es el Mundial 2026 en casa donde tiene la obligación no solo de llegar más lejos, sino de ir por el título.

Cierto que la meta se antoja ambiciosa, pero tiene cuatro años más para reparar algunas fallas y seguir creciendo.

El USMNT (por su siglas en inglés), más que agregar talento, necesita mejorar en ambas áreas. Precisa al menos de un central más dominante y de un delantero centro goleador de nivel mundial.

No está claro si se puede encontrar entre los jugadores que ya están, si hay que nacionalizar a alguno o si el ariete que busca tiene ahora 15 o 16 años, pero hay que colgar ya el cartel de se busca.

Jesús Ferreira, Ricardo Pepi, Haji Wright y Josh Sargent son buenos, pero se necesita mucho más en ataque, al igual que en la defensa central donde Cameron Carter-Vickers puede hacerse uno de los fijos.

El resto del grupo seguirá mejorando y se espera que llegue al máximo nivel. Ahí están el portero Matt Turner; los laterales Serginho Dest y Antonee Robinson, los volante Tyler Adams (que Mundial hizo), Yunus Musah y Weston McKennie y los delnateros Timothy Weah y Pulisic. Con Gio Reina y Brenden Aaronson pujando por un puesto.

Después del accidente futbolístico que le hizo perderse el Mundial de Rusia 2018, la selección de las barras y las estrellas se ha convertido en un referente en la Concacaf al superar en todo a una potencia del área como México y a Canadá, pese que esta se clasificó en primer lugar para luego estamparse en su primera Copa del Mundo.

En Qatar 2022, la selección estadounidense dio un golpe en la mesa al entrar entre las 16 mejores, lo cual es un mejor reflejo del extraordinario trabajo que se está haciendo en el país con el fútbol a todos los niveles, con la liga (MLS) entre las mejores del continente, una selección femenina que es la mejor del mundo y un semillero de niños y jóvenes futbolistas.

En el mundo no se imaginan que el deporte más practicado en Estados Unidos es el fútbol, que además cuenta con grandes recursos, torneos, instalaciones, y sobre todo, la voluntad de hacer más grande este deporte.

Las televisoras y los anunciantes se han dado cuenta del filón que es el soccer y han aumentado significativamente los horarios de transmisión lo que hace que sea uno de los deportes más populares que compite con tradicionales ligas como la NBA, la NFL y la MLB.

En ningún otro deporte levanta tanto el sentimiento patriótico y se grita U.S.A. como en el fútbol y esta selección ya ha atraído la atención y ha recibido el apoyo de grandes deportistas, personalidades y público en general, incluyendo el presidente de esta gran nación Joe Biden. Se espera muy pronto conseguir algo grande dentro de cuatro años.