¿Qué salió mal con el Inter Miami? ¿Por qué el equipo de Messi no cumplió con las expectativas? | Opinión
Y así como si nada, los playoffs de la MLS continuarán sin el Inter Miami, el primer clasificado, el equipo más publicitado y mejor pagado de la historia de la liga estadounidense, el club con el mejor récord de la temporada regular que lidera el astro argentino Lionel Messi, posiblemente el mejor jugador de todos los tiempos.
Messi regresó a Sudamérica esta semana con la selección de su país para entrenar con vistas al partido del jueves en Paraguay en la eliminatoria mundialista, mientras que los ejecutivos de la MLS y Apple TV hacen todo lo posible para despertar el interés en una postemporada que acaba de perder a su principal estrella y fuente de generar dinero.
Mientras tanto, nos preguntamos: ¿cómo es posible que el Inter Miami con una plantilla repleta de luminarias, con un récord muy superior y la ventaja de jugar en casa perdiera una serie de tres partidos contra un Atlanta United que exhibió problemas en toda la campaña, finalizó en el noveno puesto y avanzó a los playoffs tras ganar el puesto de comodín en un repechaje con Montreal?
El club rosanegro marcó 79 goles durante la temporada regular y Atlanta anotó 46. El equipo que dirige Gerardo “Tata’’ Martino ganó 22 partidos y su rival solo 10.
¿Cómo el equipo de Messi, que sufrió apenas cuatro derrotas en la campaña de 34 partidos, perdió dos juegos seguidos contra Atlanta en el lapso de una semana?
Y luego viene la pregunta más importante: aunque el trofeo del Supporters’ Shield por tener el mejor registro en la temporada regular se exhibe con orgullo en la vitrina de trofeos del Inter Miami, y la FIFA le otorgó al equipo un codiciado puesto en la Copa Mundial de Clubes de 2025, ¿puede considerarse realmente a este club el mejor equipo de la liga tras su eliminación en la primera ronda de los playoffs?
Guzan un héroe inesperado
Abordemos todo desde el comienzo.
Miami perdió en parte porque el portero de Atlanta Brad Guzan, de 40 años, estuvo brillante, tuvo siete paradas en el tercer y decisivo partido y numerosas atajadas espectaculares a lo largo de la serie, incluidos unos cuantos disparos que venían de los botines de Messi que normalmente entran.
Guzan consiguió eclipsar a las numerosas estrellas del conjunto local.
En el otro extremo del campo, los fallos defensivos, sobre todo en los contraataques, también tuvieron su parte de culpa.
Martino es conocido por emplear un estilo de posesión y una ofensiva de alto octanaje, que es entretenido de ver y trajo como resultado 79 goles.
Pero eso también puede suponer un alto riesgo porque deja al equipo vulnerable cuando los atacantes no corren hacia atrás para defender los espacios abiertos.
El técnico argentino estaba dispuesto a arriesgar porque el equipo tenía muchas posibilidades de superar a sus rivales y la estrategia casi siempre funcionaba.
Pero la defensa de Miami carecía de estabilidad y una serie de lesiones en la zaga no ayudaron.
Martino pareció encontrar una solución fiable haciendo que Sergio Busquets, uno de los mejores centrocampistas defensivos de todos los tiempos, jugara más retrasado para permitir que el novato Yannick Bright corriera, desorganizara a los rivales y realizara pases inteligentes al ataque.
Busquets y Bright no acapararon tantos titulares como Messi y Luis Suárez, pero fueron clave en el éxito del Inter Miami.
De hecho, el único partido del playoffs que ganó Miami fue el primero donde Busquets y Bright jugaron los 90 minutos.
Una contusión en el abdomen durante el primer juego partido hizo que Busquets se perdiera el segundo y saliera en el tercero desde el banco al minuto 78 el pasado sábado.
Bright, por su parte, abandonó el segundo juego en el descanso por una lesión en los isquiotibiales y su equipo arriba 1-0.
Los dos goles de Atlanta en la victoria 2-1 se marcaron después de que Bright abandonara el partido.
A pesar de la ausencia de ambos futbolistas en la alineación titular del tercer partido, Martino optó por alinear a Matías Rojas, que había impresionado en los últimos entrenamientos.
Parecía una decisión inteligente pues Rojas marcó pronto, pero Atlanta contraatacó rápido y Jamal Thiare marcó un par de dianas en los tres minutos siguientes y ni siquiera el empate de Messi fue suficiente para mantener con vida a Miami.
Un final inesperado
Podemos discutir eternamente si el árbitro debería haber pitado el penalti con el defensa Tomás Avilés derribado mientras Bartosz Slisz marcaba de cabeza el gol de la victoria.
El equipo rosanegro pudo haber evitado ese gol y no lo hizo.
Atónitos y desconsolados, los aficionados del Inter Miami abandonaron en silencio las instalaciones del Chase Stadium el sábado por la noche, mientras los jugadores del Atlanta celebraban.
No era el final que esperaban ni el equipo local ni sus aficionados.
El año comenzó con una gira mundial de 24,000 millas por cinco países donde solo ganaron uno de los seis partidos y tuvo que soportar una pesadilla de relaciones públicas en Hong Kong, cuando 40.000 aficionados abuchearon y exigieron reembolsos al darse cuenta de que Messi, descartado por lesión, no jugaría.
El fenómeno de Messi trasciende la cancha y llega al escenario cargado de buen humor
A pesar de los agotadores viajes, las lesiones leves del astro argentino, Suárez y Busquets, y la polémica en Asia, el Inter Miami se recompuso al comienzo de la temporada de la MLS y en verano dominaba, con y sin Messi.
El club sudfloridano era claramente el mejor equipo de la liga de cara a los playoffs, pero sin una Copa de la MLS que mostrar, la temporada será recordada como un fracaso.
Desde el punto de vista comercial el 2024 fue un éxito rotundo para el Inter Miami.
Su tercera equipación retro de color aguamarina y naranja se convirtió en la más rápidamente vendida en la historia de MLSstore.com.
Messi ocupa el primer puesto en la lista de las franelas más vendidas de la MLS y el primer lugar mundial en ventas de camisetas Adidas.
La mayoría de los partidos con más espectadores esta temporada llegaron cuando jugaba el Inter Miami, quien se convirtió en el equipo deportivo de Estados Unidos más seguido en TikTok (9,4 millones de seguidores).
Pero no hay trofeo por lograr esa marca.
Jordi Alba dice que un sistema de playoffs es una forma injusta de coronar a un campeón de temporada.
En otras ligas del mundo, el club que finaliza en lo más alto de la clasificación gana el título.
El lateral izquierdo español sugiere que el líder de la Conferencia Este juegue contra el de la Conferencia Oeste en un partido o serie por el campeonato.
Es una buena idea. De todas formas una campaña de 10 meses es demasiado larga.
Que el Este juegue contra el Oeste y ya está. Parece lógico, pero no es así como lo hacemos aquí.
Hacemos playoffs y no siempre ganan los mejores.