Rusia reanuda su participación en el acuerdo sobre grano del mar Negro

Por Ali Kucukgocmen y Jonathan Landay

ANKARA/MIJOLÁIV, Ucrania, 2 nov (Reuters) -Rusia dijo el miércoles que reanudaría su participación en un acuerdo para liberar las vitales exportaciones de cereales desde una Ucrania devastada por la guerra, tras suspenderlo el fin de semana, lo que había amenazado con exacerbar el hambre en todo el mundo.

Moscú anunció el repentino cambio de rumbo después de que Turquía y las Naciones Unidas contribuyeron a mantener el flujo de grano ucraniano durante varios días, sin que Rusia participara en las inspecciones.

El Ministerio de Defensa ruso dijo que había recibido garantías por escrito de Kiev según las que Ucrania no utilizará el corredor de cereales del mar Negro para realizar operaciones militares contra Rusia.

Kiev no comentó inmediatamente este asunto, pero ha negado en el pasado haber utilizado el corredor marítimo acordado como cobertura para ataques.

"La Federación Rusa considera que las garantías recibidas por el momento parecen suficientes, y reanuda la aplicación del acuerdo", dijo el comunicado del ministerio.

El acuerdo sobre los cereales, que se alcanzó hace tres meses, tiene por objetivo ayudar a evitar la hambruna en los países más pobres introduciendo más trigo, aceite de girasol y fertilizantes en los mercados globales, así como aliviar el drástico aumento de los precios.

La posibilidad de que se acabara esta semana había reflotado el temor a una hambruna en el mundo e hizo subir los precios de los alimentos.

Rusia suspendió su participación en el acuerdo durante el fin de semana, alegando que no podía garantizar la seguridad de los barcos civiles que cruzan el mar Negro debido a un ataque a su flota en esa zona. Ucrania dijo que era un pretexto falso.

Sin embargo, el anuncio de Rusia no detuvo los barcos, que se retomaron el lunes sin la participación de Moscú, con la gestión de Turquía y Naciones Unidas.

El presidente turco, Tayyip Erdogan, dijo que el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigu, había comunicado a su par turco que el acuerdo sobre el grano del 22 de julio, negociado por Turquía y las Naciones Unidas, seguiría funcionando a partir del mediodía del miércoles.

"Los transportes de grano continuarán como se acordó antes a partir de las 12 (pm) de hoy", dijo Erdogan.

Las compañías de seguros habían interrumpido la emisión de nuevos contratos, lo que hacía prever que los envíos podrían detenerse en unos días, dijeron fuentes del sector. Sin embargo, la aseguradora Ascot, del mercado Lloyds de Londres, dijo a Reuters, tras el anuncio de reanudación del miércoles, que había retomado la cobertura de nuevos envíos.

EL FUTURO ES INCIERTO

"Se trata claramente de algo positivo para los usuarios y consumidores de cereales, que complacerá al sector alimentario y proporcionará cierta tranquilidad, ya que los precios deberían bajar", dijo Mark Lynch, socio de Oghma Partners, una empresa de asesoramiento financiero para las industrias de consumo.

"Sin embargo, prevemos que probablemente se mantenga alguna prima de riesgo debido a la fragilidad del acuerdo y a la guerra en curso en Ucrania", dijo Lynch.

Andrey Sizov, director de la consultora agrícola Sovecon, centrada en Rusia, dijo que la decisión de Moscú era "un giro bastante inesperado", pero que el acuerdo seguía siendo inestable, dada la incertidumbre sobre si se prorrogará más allá de su vencimiento el 19 de noviembre.

"Parece que el debate sobre este tema continuará", dijo Sizov.

Un diplomático europeo informado de las conversaciones sobre el grano dijo a Reuters que era probable que el presidente ruso, Vladimir Putin, usara la necesidad de una prórroga como forma de ganar influencia y dominar la cumbre del G20 que se celebrará del 13 al 16 de noviembre en Indonesia.

(Información adicional de Pavel Polityuk en Kiev, Ezgi Erkoyun en Ankara y otras oficinas de Reuters; redacción de Grant McCool, Lincoln Feast y Philippa Fletcher; editado en español por Flora Gómez y Javier López)