"Representé al pueblo contra el clasismo", dice "Huacho" Díaz
MÉRIDA, Yuc., junio 7 (EL UNIVERSAL).- Joaquín "Huacho" Díaz Mena (Morena) sostiene que Yucatán seguirá siendo seguro, y para esa tarea contará con el apoyo del actual titular de Seguridad Pública (SSP), Luis Felipe Saidén Ojeda, quien -afirma- ya aceptó ser ratificado.
En entrevista con EL UNIVERSAL, dice que su triunfo no les sorprendió porque ofreció bienestar para la gente y eso hizo la diferencia. También reconoce que se debe al presidente López Obrador.
Señala que no habrá "cacería de brujas" con el gobierno saliente, pero con mayoría en el Congreso, revisarán las leyes que se aprobaron, particularmente en materia judicial.
¿Cómo planea usted mantener a su estado como el más seguro del país?
—Pues, primero que nada, como lo dije en campaña, ratificar al secretario Luis Felipe Saidén Ojeda, creo que la seguridad de la que disfrutamos los yucatecos no pertenece a este sexenio y ni siquiera a un partido político, debido a la forma de ser del yucateco. Somos gente pacífica que, incluso, el yucateco por adopción viene y toma nuestras costumbres, porque quiere que su familia viva tranquila aquí.
Yo voy a darle al próximo secretario de Seguridad Pública todo el presupuesto y las herramientas para seguir blindando a Yucatán, cámaras de seguridad y todo lo que necesité el C-5, y como me comprometí en campaña, Yucatán seguirá siendo seguro, es uno de los activos que tenemos que cuidar como yucatecos.
¿Ya habló con Saidén Ojeda?, ¿aceptará?
—Sí, en todo momento hemos estado en coordinación y comunicación y él por supuesto que está en la mejor disposición. Ha demostrado un enorme amor por Yucatán al entregarse todos estos años a cuidar y proteger la seguridad de los ciudadanos.
¿Cómo planea dar certidumbre a inversionistas ante la llegada de un gobierno morenista?
—Yo propuse en campaña que la promoción del estado la vamos a llevar a cabo en consenso con el empresariado; planteé un nuevo pacto con el empresario yucateco para que, de una manera consensuada, podamos definir cómo promover el estado, esa es una idea mía.
Tengo un hermano que es director de desarrollo económico de la ciudad de Pittsburgh, Mississippi, y allá lo nombraron las cámaras empresariales en consenso y con el gobierno, y el gobierno de Estados Unidos le da el recurso para promover la inversión. Esa es la idea, trabajar todos para hacer de Yucatán esa plataforma logística para la relocalización de empresas internacionales que buscan el nearshoring con Estados Unidos y aprovechar que tenemos cerca el mercado más grande del mundo con el proyecto Renacimiento Maya, que nuestra próxima presidenta de México, Claudia Sheinbaum, adoptó como suyo.
Vamos a unir el Tren Maya con el puerto Progreso, modernizar el puerto de altura, crear parques industriales con gas natural y hacer el segundo anillo metropolitano, que sería el segundo anillo periférico de Mérida, todo esto va a brindar oportunidades para que empresas internacionales que quieran estar cerca de Estados Unidos vean en Yucatán esa plataforma logística para terminar de manufacturar sus productos, y a nosotros nos va a dar empleos mejor pagados para nuestra gente. Eso nos va a tener que llevar a revisar la pertinencia de las carreras en las universidades, precisamente para que tengamos la fuerza laboral que el mercado requiere a mediano plazo.
Su triunfo, el pasado 2 de junio, fue la sorpresa de la noche, ¿a usted le sorprendió?
—No, yo lo veía venir desde la campaña, yo veía cómo la gente se estaba volcando hacia la Cuarta Transformación, por lo que representó nuestro proyecto. Yo representaba al pueblo en contra del elitismo y el clasismo.
Yo vengo de un municipio muy pequeño, que es San Felipe, represento a pescadores, ganaderos, maestros, trabajadores de restaurantes, profesionistas, estudiantes, y lo que yo llevo en esta campaña es decirle al niño o al joven de cualquier comunidad de Yucatán, por muy pobre o pequeña que sea, que los sueños sí se pueden alcanzar, que no vean el caso de Huacho Díaz Mena como un caso de suerte, que le fue bien en la vida, no. Yo creo que uno lo debe de planear, estudiar, prepararse y trabajar, levantarse de sus fracasos.
De mis padres aprendí, desde niño, que sólo sirviendo a los demás se puede uno realizar como persona. Entonces, yo a eso le apostaba y creo que la gente votó porque nosotros ofrecimos acabar con la desigualdad. Si bien Yucatán tiene un crecimiento económico, ha sido para unos cuantos. Nosotros proponemos dar las herramientas desde el gobierno para la igualdad en el acceso a la educación de calidad con becas, con más universidades y buena atención a la salud, y una buena atención a la cultura y el deporte en las colonias de Mérida y en las comunidades. Si los niños y los jóvenes tienen acceso a eso, van a estar lejos de la drogadicción y el alcoholismo y pueden plantearse un mejor futuro. Yo creo que ofrecer bienestar para todas y todos es lo que hizo la diferencia en esta campaña; la gente vio en Huacho un representante del pueblo para el pueblo.
Yo creo que los que se llamaron sorprendidos fueron los medios de comunicación que de alguna manera estaban pagados por la oposición y querían dar una imagen de que el PAN iba a ganar en Yucatán, por indicación del gobernador saliente. Yo siempre les dije que como califiqué Yucatán no quiere decir que así va a quedar la próxima elección; en muchas décadas pasadas los gobernadores salían bien calificados y perdían su siguiente elección.
¿Los programas del gobierno federal influyeron en este triunfo?
—En 80% yo me debo a Andrés Manuel López Obrador, que el presidente me haya invitado en 2018 a ser candidato a ser gobernador. No me engañó, me habló claro, me dijo que era una situación de sacrificio para que yo meta carrera, "es muy difícil ganar Yucatán, pero si vienes de candidato me vas ayudar", y él gana en 2018 con 42% y yo me quedé con 21% de votación, pero al invitarme a ser su representante aquí y enseñarme a trabajar pecho a tierra, sin tanto ruido, llegando a todos los rincones de las comunidades con las vacunas, con los programas sociales, por supuesto que influyó, el resultado es la respuesta de los yucatecos, de lo bien que nos fue con López Obrador.
Nos consintió el presidente, 600 mil yucatecos recibieron 10 mil millones de pesos en programas sociales, pero además de eso, el proyecto integral del Tren Maya, el nuevo hospital Horán, la remodelación del Kukulkán, el gran parque de La Plancha, el museo del meteorito, las obras de Chelem, Chuburná, Chicxulub, Izamal, Dzibichen, Pisté, Chichén Itzá, Valladolid, todas esas obras van incidiendo en el desarrollo de Yucatán.
Y ahora, con la doctora Claudia Sheinbaum, quien nos adoptó en esta campaña, que haya venido a tocar la guitarra con María San Felipe y un servidor, a cantar, ese acto en el Monumento a la Patria tiene décadas que no se veía algo similar. Y con la doctora vimos cómo se volcó la gente y adoptó el proyecto Renacimiento Maya, lo cual nos ayudó mucho.
Hay quien dice que el gobierno de Mauricio Vila entregó Yucatán a Morena, ¿qué opina de eso?
—Estoy totalmente en contra de esa postura, puesto que él, incluso, despreció la confianza que le dieron los yucatecos como gobernador al dejar el cargo [para hacer campaña para llegar al Senado], no es cualquier cargo para pedir licencia e irse a hacer campaña para darle respiración de boca a boca a tu candidato. Creo que es una falta de respeto al yucateco, y se metió a hacer campaña e hicieron eventos en municipios, eventos grandes para ayudar a la candidatura de su partido, y le ganamos en buena lid. La gente de Yucatán nos dio 16 diputaciones de 21, cinco diputaciones federales de seis, dos senadurías, estamos en 50 municipios.
Tenemos la confianza en la mayoría de los yucatecos, y tenemos que analizar también por qué votó la gente por nosotros. Si nos dieron el Congreso del estado es porque quieren que se revisen las leyes que se cambiaron, que pudieron haber hecho daño al yucateco, leyes que dañan a los trabajadores a través del ISSTEY, también la ley del Poder Judicial que violentó las carreras judiciales de los trabajadores para poner panistas como magistrados, sin que tuvieran ninguna carrera judicial.
Creo que es antiético, yo no juzgaría que alguien sea panista o priista, siempre y cuando cumpla con una carrera judicial, lo que no puede ser es que por cuestiones partidistas se violente a quienes han trabajado muchos años. Vamos a revisarlo porque tenemos mayoría en el Congreso del estado. Además, hicieron un cambio en la ley que yo no estoy de acuerdo, que los nuevos magistrados que terminen, ya no será el gobernador en turno quien va a mandar una terna, sino que será el propio Tribunal de Justicia, quieren seguir poniendo panistas, y eso creo que no es correcto. Se va a revisar.
¿Habrá revisión por parte de su gobierno al anterior?
—No vengo con una intención de cacería de brujas, soy propositivo, siempre lo he sido. Vengo a construir los mejores años para Yucatán y no quisiera distraerme en escarbar el pasado. Sin embargo, creo que hay organismos encargados de la revisión de cuentas y cada quien, a través de la Auditoria Superior del Estado, tendrá que hacer su trabajo; creo que las instancias correspondientes deberán cumplir su objetivo, yo no vengo con ninguna cacería de brujas.
Física y mentalmente, ¿cómo se siente para gobernar?
—Muy bien, estamos preparados. Creo que los años que han pasado me dan la madurez política y el conocimiento de los sectores. Cuando yo empiezo, a los 24 años, como alcalde de San Felipe, pues era muy joven; sin embargo, conozco a los sectores de la población.
El accidente [automovilístico] fue en la madrugada [del 29 de mayo], nos metimos debajo de la cama de una grúa. Afortunadamente yo tenía el respaldo del asiento hacia atrás y eso es lo que me salva la vida; de haber venido sentado no estaríamos platicando, pero física y mentalmente me encuentro bien. Me deben dar de alta en unos ocho días, me reconstruyeron el ojo derecho y el lóbulo, no perdimos la visibilidad.