Publican el plan de ataque de EE.UU. compartido por error en un chat y compromete más a los funcionarios de Trump

Captura del chat
Captura del chat

WASHINGTON. - El consejero de seguridad nacional de Donald Trump, Michael Waltz, asumió el martes “toda la responsabilidad” por la creación del chat grupal de altos funcionarios de la administración en Signal y en el que, por error, se incluyó al periodista Jeffrey Goldberg, quien filtró información altamente sensible sobre los ataques aéreos planeados por Estados Unidos en Yemen.

Según The Atlantic, Waltz habría agregado a Goldberg por error, permitiéndole acceder a información altamente sensible sin ser detectado. El incidente fue calificado por críticos como una grave amenaza a la seguridad nacional.

Sin embargo, al ser interrogado en Fox News, Waltz admitió haber creado el grupo pero evitó asumir toda la culpa, insultó a Goldberg y alegó que aún investigaban cómo ocurrió la filtración, mencionando que consultaba con Elon Musk. Sin pruebas, sugirió que el periodista pudo haber accedido deliberadamente.

Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.
Captura del chat de guerra filtrado por error en EE.UU.

Trump, por su parte, ofreció declaraciones contradictorias, insinuando que un subordinado de Waltz podría haber agregado a Goldberg. No obstante, minimizó el incidente, calificándolo como un “pequeño error” en meses de gestión y, al igual que el secretario de Defensa Pete Segseth, aseguró que no se había compartido información clasificada.

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En respuesta a las declaraciones de los funcionarios de Trump, la revista estadounidense The Atlantic publicó el miércoles lo que, según afirmó, era el texto completo del chat, incluyendo detalles cruciales como la hora de los ataques y los tipos de aviones utilizados, en este caso un F-18.

El jefe de redacción de The Atlantic explicó que escribió el artículo de seguimiento para permitir que el público viera los textos tal como son, en aras del interés público, luego de las afirmaciones de los funcionarios de Trump, quienes acusaron a Goldberg de mentir sobre el contenido del chat. En consecuencia, su equipo se puso en contacto con las agencias gubernamentales involucradas en el grupo para preguntar si se oponían a la publicación de los mensajes. Algunas de estas agencias respondieron afirmativamente, expresando su desacuerdo con la difusión de los textos.

La cadena de mensajes comenzó a las 11.44 (hora del este) el 15 de marzo, 31 minutos antes de que despegara el primer avión de guerra estadounidense para llevar a cabo el ataque. Pete Hegseth, secretario de Defensa, abrió la conversación con un anuncio sobre una actualización inminente. Los mensajes posteriores detallan las armas involucradas, el objetivo a atacar y su ubicación exacta.

Poco después, un mensaje de seguimiento profundiza en más detalles sobre los armamentos y la programación de los ataques. A las 13.48 (hora del este), Waltz envió un mensaje con inteligencia en tiempo real sobre la situación del ataque en Yemen. Esta información detallada generó una ola de respuestas positivas entre los miembros del chat, quienes expresaron su satisfacción con los desarrollos.

Captura del chat
Captura del chat

Más tarde esa misma tarde, Hegseth publicó otra actualización, informando que los ataques continuarían durante la noche, confirmando así la prolongación de la operación.

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El artículo expone cómo una simple cadena de mensajes en una plataforma de mensajería encriptada como Signal puede poner en riesgo la seguridad nacional, exponiendo detalles clasificados a actores no autorizados.

La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, descalificó el último artículo de The Atlantic como “otro engaño escrito por un antagonista de Trump conocido por su sensacionalismo”. Aunque no quedó claro a quién se refería Leavitt, el artículo tiene dos autores: Goldberg y Shane Harris, un experto en agencias de inteligencia de Estados Unidos.

Leavitt afirmó en X que el artículo había admitido que el contenido del chat no eran planes de guerra.

Por su parte, el vicepresidente estadounidense JD Vance afirmó que la revista The Atlantic “sobrevendió” la filtración sobre los planes para un ataque en Yemen. En un mensaje publicado en la red social X, Vance destacó: “Está muy claro que (Jeffrey) Goldberg sobrevendió lo que tenía”.

Por su parte, el asesor de seguridad nacional Mike Waltz agregó: “Sin ubicaciones. Sin fuentes ni métodos. Sin planes de guerra”.

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El caso ha generado indignación. El senador Mark Warner lo consideró un acto de negligencia con información clasificada, mientras que el líder de la Mayoría del Senado, Chuck Schumer, lo describió como “una de las filtraciones más impactantes de inteligencia militar en mucho tiempo”. Otros senadores señalaron que los implicados pudieron haber violado la Ley de Espionaje al coordinar acciones de seguridad nacional a través de una plataforma no autorizada.

Durante la audiencia del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes celebrada esta semana, el principal demócrata, Jim Himes, expresó su preocupación sobre la filtración de los mensajes de Signal, afirmando que “todos aquí saben” que Rusia o China podrían haber obtenido esos mensajes y haberlos transmitido a los hutíes. En su intervención inicial, subrayó que la información sensible contenida en los textos podría haber alterado los planes de los enemigos para “derribar aviones o hundir barcos”.

“Solo por la gracia de Dios no estamos de luto por pilotos estadounidenses muertos”, señaló Himes, refiriéndose a las posibles consecuencias de la filtración. El congresista destacó que, frente a un error de tal magnitud, la única respuesta adecuada es “disculparse, asumirlo” y detener todas las acciones hasta comprender qué salió mal y cómo evitar que se repita en el futuro.

Agencias AFP y Reuters