El presidente de Colombia anunció la gratuidad universitaria y criticó a Javier Milei por querer cobrarle a los extranjeros

El presidente argentino, Javier MIlei, y su homólogo colombiano, Gustavo Petro
El presidente argentino, Javier MIlei, y su homólogo colombiano, Gustavo Petro

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, anunció este sábado que firmó un decreto para establecer la gratuidad universitaria en instituciones públicas de su país a partir de 2024. Si bien la quita de aranceles era una de las promesas de la campaña que lo llevó al Ejecutivo colombiano, Petro había criticado el viernes al presidente de la Nación, Javier Milei, por permitir que las universidades públicas argentinas arancelen a extranjeros no residentes en la ley ómnibus que envió al Congreso.

En lo que, finalmente, fue el anticipo de lo que anunció este sábado, Petro había manifestado su intención de que los colombianos que estudian en la Argentina sigan haciéndolo en su país de origen sin pagar. “Recibiremos 20.000 estudiantes colombianos que se educaban gratuitamente en la Argentina. Literalmente son expulsados de ese país, para ellos no hubo la llamada ‘libertad’. Vamos a gestionar para que puedan continuar sus estudios en Colombia sin mayor obstáculo y también de manera gratuita”, publicó en su cuenta de X.

He firmado el decreto de gratuidad en la educación pública superior en Colombia. Fue promesa de campaña y hoy es una realidad”, informó Petro en su cuenta de X. “Buscaré que la educación superior sea un derecho para toda persona que habite en Colombia. En ese camino destinaré para el año entrante 2,8 billones [de pesos colombianos] del presupuesto nacional y se destinará 1,5 billones para incrementar la infraestructura universitaria”, añadió el mandatario.

En Colombia, la nueva política de gratuidad comenzará a implementarse a partir del primer semestre de 2024 y será de manera gradual. En un inicio se aplicará “la flexibilización de requisitos en relación con el estrato socioeconómico, la edad, la nacionalidad, la priorización de poblaciones indígenas, afrodescendientes, víctimas del conflicto armado, personas en condición de discapacidad, madres cabeza de familia, personas privadas de la libertad”, según detalla un comunicado del Ministerio de Educación en su página web.

“Estamos dando un paso significativo hacia la consolidación de la educación como un derecho fundamental, para que todas y todos los colombianos tengan la oportunidad de acceder a una educación de calidad que les permita vivir con dignidad, en condiciones de equidad”, dijo la ministra de Educación, Aurora Vergara, luego de conocerse la firma del decreto.

Mientras tanto, la senadora María José Pizarro, autora de la Ley 2.307, por la cual se establece la gratuidad en la educación superior pública colombiana, señaló a través de sus redes sociales: “¡Es una realidad! A partir de ahora la educación superior pública será gratuita para todas y todos los colombianos”.

“Esta ley es un triunfo del movimiento estudiantil, del movimiento profesoral, que durante décadas estuvieron luchando para que todas las personas en Colombia pudieran acceder a una educación gratuita”, agregó Pizarro. Colombia, con un sistema similar al de Estados Unidos, llama pre grado a la etapa que concluye con la titulación de grado, pero que luego suele requerir de una especialización que ya pasa a ser contada como posgrado. El decreto de Petro no menciona los posgrados, por lo que se entiende que seguirán siendo pagos.

Argentina, lejos de ser una excepción

La gratuidad universitaria está consagrada en la mayoría países de América Latina y en muchos alrededor del mundo. En Uruguay, la Universidad de la República, la institución de mayor prestigio y que casi monopoliza la totalidad de la enseñanza pública en ese país, es no arancelada. Cuenta con más de 130.000 alumnos en un país que tiene apenas tres millones de habitantes.

En Chile, después de innumerables manifestaciones que pedían cambios estructurales en el sistema educativo universitario, fue establecida una gratuidad parcial durante el último gobierno de Michelle Bachelet. Muchos de esos dirigentes estudiantiles luego llegaron a los principales puestos de la administración pública: Gabriel Boric, el actual presidente, fue la máxima autoridad de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile en 2012; un año antes había ocupado ese cargo su actual secretaria general de su gobierno, Camila Vallejo. El ministro de Desarrollo Social hasta hace pocos meses, Giorgio Jackson, también fue un destacado líder estudiantil hace más de diez años. Llegó a la presidencia de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica en 2011.

En Brasil las universidades públicas de mayor prestigio, como la Universidad Federal de Río de Janeiro o la Universidad de Sao Paulo, también son no aranceladas. Ecuador establece en su Constitución la obligatoriedad de la enseñanza gratuita en el nivel superior desde 2008, aunque la aplicación no es, a día de hoy, del todo lineal. Otros países como México, Cuba, Costa Rica y Venezuela también brindan educación superior no arancelada en el nivel superior.

Uno de los últimos países de la región que quitó los aranceles fue Paraguay. En 2020, en plena pandemia, el Congreso paraguayo aprobó la ley conocida como de “arancel cero” que fue promulgada por el expresidente Mario Abdo. En el resto del mundo destacan países como Grecia, Alemania, Finlandia y Noruega, entre otros, con educación gratuita en todos sus niveles, incluido el universitario.