Preparan un nuevo protocolo de monitoreo de petreles de Galápagos, ave con futuro incierto

Quito, 3 ene (EFE).- Seis instituciones y organizaciones vinculadas al archipiélago ecuatoriano de Galápagos preparan un nuevo protocolo de monitoreo de petreles, un ave marina que anida únicamente en las islas Galápagos y que enfrenta un futuro incierto.

Científicamente conocido como Pterodroma phaeopygia, esta ave pasa gran parte de su vida en el mar, alimentándose de calamares, peces pequeños e invertebrados.

Regresa a tierra solo para anidar, haciéndolo casi exclusivamente en las zonas altas de las islas Santa Cruz, Floreana, Santiago, Isabela y San Cristóbal. El petrel vuelve al mismo lugar para reproducirse. La hembra pone un único huevo por temporada, lo que la hace particularmente vulnerable.

El Petrel de Galápagos está catalogado como En Peligro Crítico en la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), informó este viernes la Fundación Jocotoco.

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Dicha fundación, junto con la Dirección del Parque Nacional Galápagos, Conservando Galápagos, la Fundación Charles Darwin, American Bird Conservancy y la Universidad San Francisco de Quito, trabajan en la protección de esta especie única.

Amenazas

Entre las amenazas que enfrenta el Petrel de Galápagos, que han reducido su población, figuran los depredadores invasores como las ratas, que consumen sus huevos y crías; plantas invasoras como la guayaba y la mora, que alteran su hábitat.

Además, pérdida de sitios de anidación; redes de pesca que atrapan accidentalmente a los petreles adultos; y el creciente nivel de contaminación marina, por lo que "las poblaciones de petreles están disminuyendo", indicó Jocotoco antes de apuntar que este problema no solo afecta al petrel, sino a todo el ecosistema de Galápagos.

A través de su guano, el petrel transporta nutrientes desde el océano hacia la tierra, enriqueciendo el suelo y promoviendo la biodiversidad. Además, su presencia sirve como un valioso indicador de la salud del ecosistema marino: menos petreles significa que otras especies también podrían estar afectadas.

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Protocolo

En respuesta a esta situación, las mencionadas instituciones y organizaciones buscan ampliar las áreas de monitoreo, fortalecer el control de especies invasoras y asegurar acciones de conservación efectivas.

Para ello, en conjunto, preparan un nuevo protocolo de monitoreo "que generará datos más sólidos y confiables".

"Con este protocolo y nuestras acciones colaborativas, esperamos estabilizar las poblaciones del Petrel de Galápagos y aumentar la resiliencia de los ecosistemas que habitan. Estamos comprometidos a restaurar el lugar del petrel en el archipiélago y aumentar su población a niveles más cercanos a los que tuvo en el pasado", comenta Patricia Isabela Tapia, Oficial de Conservación Marina en Fundación Jocotoco.

Reserva Los Petreles: Un refugio vital

Jocotoco creó la reserva Los Petreles en 2018 como un refugio esencial para proteger a esta especie de la extinción.

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Ubicada en la isla San Cristóbal, la reserva abarca 120 hectáreas y proporciona un hábitat esencial para el petrel. Es hogar de 7 colonias de anidación y 141 nidos monitoreados.

Además, la reserva se ha convertido en un centro de restauración ecológica, donde trabajan activamente en el control de especies invasoras y la restauración de ecosistemas degradados.

Jocotoco subraya que fomentar un profundo sentido de cuidado ambiental y conexión comunitaria es esencial para que la conservación sea sostenible, por lo cual involucran activamente a la comunidad local en las iniciativas de la reserva.

Reciben a organizaciones de investigación, promueven actividades educativas con estudiantes y organizan visitas especiales, como jornadas de reforestación, que conectan a las personas con la naturaleza.

También trabajan con agricultores locales, guardianes de importantes hábitats de anidación fuera de los límites de la reserva, situada en el archipiélago de Galápagos, ubicado a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas, y declarado en 1978 como patrimonio natural de la humanidad por la Unesco.

(c) Agencia EFE