LONDRES.- El príncipe Harry cumplirá 40 años este domingo, con su residencia fijada en Estados Unidos, alejado de la familia real británica y sin miras a una pronta reconciliación. Hace cuatro años cortó sus lazos con la monarquía británica, enfrentado a su hermano Guillermo, heredero de la corona, y se instaló cerca de Los Ángeles, junto a su esposa estadounidense, Meghan Markle, y sus dos hijos.

A pesar de su alejamiento físico, la opinión pública y los medios de comunicación británicos siguen muy pendientes de sus pasos.

“Estaba ansioso por los 30, estoy entusiasmado por los 40″, afirmó este viernes el príncipe en un comunicado transmitido a la BBC, añadiendo que convertirse en padre le había dado una “nueva perspectiva de la vida”.

“Ser padre es una de las mayores alegrías de la vida y sólo me ha hecho sentirme más motivado y comprometido a hacer de este mundo un lugar mejor”, añadió en el texto.

El príncipe celebrará su 40 cumpleaños con una celebración privada en su casa de Montecito, en el sur de California, donde vive con su esposa Meghan, de 43 años, y sus dos hijos.

• Carlos III: qué tan popular es la monarquía británica bajo su reinado

Con su traslado a Estados Unidos, alejó a su familia de la presión mediática que había sufrido desde su nacimiento, el 15 de septiembre de 1984.

Regalo millonario

Harry dejó de percibir fondos públicos en 2020, al renunciar a ser miembro activo de la familia real, pero consiguió su anhelada independencia económica.

Con su autobiografía, En la sombra, publicada en enero de 2023, la prensa británica afirma que logró unos ingresos de 22 millones de libras (28,7 millones de dólares), al tiempo que se habla que la pareja cobró en 2022 unos 100 millones de dólares de Netflix por un documental que protagonizaron.

“La vida es hoy más difícil que nunca para los jóvenes miembros de la familia real británica. Tienen que desarrollarse como personas y crear un papel que valga la pena para sí mismos, mientras están constantemente bajo la atención de los medios” explica Mark Garnett, profesor de ciencias políticas en la Universidad de Lancaster, a la AFP.

Mientras tanto, los 40 años vendrán con un regalo millonario para Harry. Según reportó el diario británico The Times, la reina madre, la madre de la Isabel II, creó un fondo fiduciario familiar especial para sus bisnietos en 1994, cuando Harry tenía sólo 10 años. Allí había 19 millones de libras esterlinas (hoy, casi 25 millones de dólares), una parte de la cual recibirá el hijo menor de Carlos al cumplir 40.

Según informaban los reportes de ese momento, el dinero debía llegar a Guillermo y Harry en dos pagos: el primero cuando cumplieran 21 y el segundo, cuando alcanzaran los 40. Si bien nunca se aclaró cuánto debía recibir cada uno de ellos, sí se informó que Harry recibiría más dinero para compensar los beneficios de Guillermo al ser Príncipe de Gales y heredero a la corona.

Lejos de su familia y de su país

Una de las causas de su “huida” a Estados Unidos fue librar de esa presión mediática a sus dos hijos, Archie y Lilibet, de cinco y tres años respectivamente, como confesó Meghan Markle en una entrevista televisiva que hizo a ambos, en Estados Unidos en 2021, la presentadora Oprah Winfrey.

“La presión de los medios fue particularmente difícil para el príncipe Harry, quien probablemente nunca se iba a convertir en rey y perdió a su madre cuando era un niño, en circunstancias trágicas. El público británico ha mostrado simpatía por él, pero la opinión está dividida ahora que su compromiso con el país prácticamente ha terminado”, añade Garnett.

Los duques de Sussex viven en Montecito, en California, en un barrio que cuenta entre sus vecinos a la actriz Gwyneth Paltrow y a la cantante Katy Perry. Su casa, de nueve habitaciones, está valorada en unos 14 millones de dólares, y tiene vistas al Pacífico, gimnasio, cine y piscina.

En un extenso artículo, el diario británico Sunday Times citó a amigos anónimos que decían que Harry se encontraba en una encrucijada infeliz en su vida y un exasesor citado dijo: “Todo lo que hace es pasar tiempo mirando hacia atrás”.

Pero fuentes cercanas al príncipe dijeron que Harry miraba hacia el futuro con entusiasmo y una lista de proyectos, incluido otro especial de Netflix, este sobre el mundo de élite del polo profesional.

A finales de este mes asistirá a eventos en Nueva York para Travalyst, su iniciativa para hacer que la industria de viajes sea más sustentable, y para The Diana Award, la organización benéfica creada en honor a su difunta madre, la princesa Diana.

Desde Estados Unidos, el príncipe mantiene una lucha encarnizada con los medios de comunicación británicos, contra los que ha presentado varias demandas judiciales, a los que acusa de conseguir información de manera ilegal.

El duque de Sussex reprocha también a esos periódicos haber maltratado a su esposa y los considera culpables de la muerte de su madre, la princesa Diana, en un accidente automovilístico en 1997 en París, cuando era perseguida por los paparazzi.

Sus esporádicos viajes al Reino Unido por estos asuntos judiciales escenifican el alejamiento de su familia, al no mantener contacto con ella.

“Está completamente aislado. Cualquier sugerencia de un regreso, incluso con un papel menor dentro de la monarquía, me parece completamente irreal”, afirma Pauline MacLaran, profesora de la Universidad Royal Holloway, a la AFP.

Harry solo rompió ese aislamiento el 6 de febrero pasado, en un viaje relámpago a Londres para visitar a su padre tras el anuncio del cáncer que padece Carlos III.

El príncipe evita a su hermano mayor, el heredero Guillermo, a quien calificó de irascible y violento en sus memorias, una definición que solo contribuyó con su distanciamiento. Ni siquiera acercó a ambos el cáncer de la esposa de Guillermo, Kate Middleton, anunciado casi al mismo tiempo que el de Carlos III.

“Los informes sugieren que, si bien Carlos estaría abierto a que su hijo y su nuera volvieran a tener algún lugar, Guillermo no estaría en absoluto abierto a eso”, dijo Anna Whitelock, profesora de Historia de la Monarquía en City, Universidad de Londres, dijo.

Además, en un documental reciente de ITV, Harry dijo que su preocupación por la seguridad de su familia inmediata (está involucrado en acciones legales contra el gobierno británico después de que le quitaron la protección policial) significaba que no regresaría a su país, especialmente en medio de la hostilidad de la prensa sensacionalista.

“Sigue siendo peligroso, y todo lo que se necesita es un lobo solitario, una persona que lea estas cosas para actuar según lo que ha leído, ya sea un cuchillo o ácido, lo que sea, y estas son cosas que preocupan genuinamente a yo”, dijo.

Aun lejos de su país, cada uno de sus pasos es seguido de cerca.

Los críticos lo culpan por la negatividad, diciendo que fue él quien eligió hablar sobre la ruptura con su padre, el rey y su hermano mayor, el príncipe William, en la televisión y en sus memorias, mientras vivía de su origen real. Sus partidarios responden que está bajo presión debido a su misión autoproclamada de hacer que los jefes de los periódicos rindan cuentas.

Agencias AFP y Reuters

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR | EN VIDEO

El príncipe Harry se alojó con la familia de su madre en su última visita al Reino Unido