¿Por qué el gobierno de AMLO se toma con tanta calma la crisis del coronavirus?

A woman wears a surgical mask as a precaution against the spread of the new coronavirus COVID-19 during a Mass commemorating Ash Wednesday at the Cathedral in Mexico City, Wednesday, Feb. 26, 2020. Ash Wednesday marks the beginning of Lent, a solemn period of 40 days of prayer and self-denial leading up to Easter. (AP Photo/Fernando Llano)
(AP Photo/Fernando Llano)

La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró que el Coronavirus, surgido en China en diciembre, ya afecta a todos los continentes y puede ser caracterizado como una pandemia.

Once años atrás se originó en México la pandemia de influenza AH1N1 que rápidamente se expandió, causando en el mundo la muerte a cientos de miles de personas, según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU. En aquella ocasión las autoridades Federales y de la Ciudad de México decretaron el cierre de lugares concurridos, restaurantes, cancelación de eventos, cierre de escuelas y demás.

En opinión del presidente Andrés Manuel López Obrador la forma en la manejó en 2009 la pandemia de la influenza AH1N1 el gobierno de Felipe Calderón fue exagerada y se puso en pánico a la población.

Quien fuera secretario de salud aquel año, José Ángel Córdova, comentó al respecto que se actuó con responsabilidad y los comentarios del presidente ponían en evidencia que no leyó los reportes de aquel suceso, que por cierto fue atendido con éxito en la Ciudad de México por Marcelo Ebrard, lo que le valió ser nombrado el mejor Alcalde del Mundo. (La Silla Rota, 2 de marzo de 2020)

Las circunstancias de la Pandemia del Coronavirus son diferentes a lo sucedido en México hace 11 años. No obstante, las “recetas” son casi las mismas y se debe actuar con rapidez y tomar determinaciones que no gustan a López Obrador pero son necesarias para beneficio de la población, en particular de aquellos que no tienen acceso a los servicios de salud, hoy en crisis por causa de la “austeridad republicana” que redujo el presupuesto para ese sector y la determinación de su gobierno de centralizar los servicios por medio del Instituto de Salud para el Bienestar.

En todos los continentes los gobiernos están adoptando medidas para impedir el ingreso del Coronavirus a su territorio, realizan controles sanitarios en los aeropuertos, suspenden la asistencia de los estudiantes a las escuelas, cancelan actividades en las oficinas, reprograman eventos y espectáculos masivos y desarrollan campañas de higiene entre su población para disminuir los riesgos de contagio.

La estrategia del Gobierno es de mitigación, no tiene nada que ver con lo hecho en China ni con lo que está pasando en Italia. El subsecretario de Prevención y Promoción de Salud, Hugo López-Gatell, recomendó “tomar una medida de distanciamiento social evitando los saludos con besos o abrazo. Un saludo oriental (agachando la cabeza), pero sin tocarnos”. (Expansión, 28 de febrero 2020)

Cuando en Estados Unidos prohíben los vuelos que llegan a su territorio desde Europa, aquí el gobierno de López Obrador plantea la posibilidad de que los aviones que vienen de Europa aterricen en México. Lo que implica abrir la oportunidad para que el Coronavirus llegue al país en avión.

En el gobierno de López Obrador parece lejana la determinación de cerrar escuelas, centros de trabajo y cancelar eventos masivos, como ya sucede en países de Europa y Estados Unidos. Tomar estas decisiones parece impensable porque supondría cancelar las concentraciones que semanalmente se organiza para mantener su campaña permanente de propaganda y eso es impensable.

El ángulo económico de esta crisis fue referido por Arturo Herrera, secretario de Hacienda, quien dijo: “Estamos asegurando que los presupuestos para la Secretaría de Salud y de diversas agencias de salud están ahí, serán ejecutados sin mayores problemas y estamos realizando con anticipación las compras de medicamentos, equipos, etcétera que se van a utilizar.” (El Economista, 11 de marzo de 2020)

Desde diciembre se sabe que el Coronavirus llegaría a México y lo haría cuando el sistema de salud, en los últimos meses, ha experimentado falta de medicamentos para atender a los enfermos por los diferendos que el gobierno de López Obrador mantiene con las empresas distribuidoras.

Parece fuera de tiempo el anuncio del secretario de Hacienda de que se realizarán compras de medicamentos y equipos para atender la epidemia, no dijo que los proveedores están en el extranjero por lo que cuando llegue la crisis a México se habrán agotado o estarán escasos en el mercado internacional.

Las adquisiciones internacionales de medicamentos y equipos tardan meses en ser atendidas. Deben producirse cuidando cantidad y calidad y la cura para el coronavirus no existe, de manera que estamos ante otra mentira de la 4T. No aprenden.

El avance acelerado del Coronavirus en el mundo hace previsible que, en el momento en que se instale en México, la propagación será rápida, por lo que la mitigación y recomendaciones sanitarias instrumentadas por el gobierno de López Obrador serán insuficientes.

Lo que debes saber: