Pedro Peirano hizo de 31 minutos el show de todos

CIUDAD DE MÉXICO, noviembre 13 (EL UNIVERSAL).- Cuando Pedro Peirano se embarcó en la aventura de crear un programa similar a los que llegaban a su natal Chile en 2003, él contaba con nulo conocimiento en actuación y era recién egresado de la Universidad de Chile, como periodista.

Teniendo como inspiración Los Muppets o Plaza Sésamo, además de su propia profesión, se dio a la tarea, junto con su amigo Álvaro Díaz, de crear un show educativo que alentara la imaginación de los pequeños mediante la música y la preocupación sobre su propia comunidad.

"Era hacer uno de esos programas que nos gustaban a nosotros, con un humor que no dejaba fuera a nadie y que cuando lo ves de niño te representa algo, pero que cuando lo vuelves a ver de adulto es algo completamente diferente", compartió Peirano, creador de 31 minutos, y encargado de dar vida al títere Tulio Triviño.

El programa salió del aire oficialmente en 2014, año en el que comenzó a presentarse en shows en vivo con el resto del equipo del noticiero de títeres en la tarima, Juan Carlos Bodoque y Policaripio, entre otros personajes, aunque Peirano dice que el plan no era hacer un proyecto en vivo.

"Cuando el programa terminó, cada uno de los miembros de 31 minutos estábamos en algo diferente, fue cuando nos llaman del festival Lollapalooza para proponernos hacer una presentación en vivo, toda la gente fue a vernos y al día siguiente varias productoras nos estaban llamando para producir algo en vivo", contó.

Para lograrlo, rescataron los temas musicales empleados durante el programa, como "Mi muñeca me habló", "Señora devuélvame la pelota", "Me cortaron mal el pelo" o la icónica "Bailan sin César".

"Dudamos si poner canciones o no en el programa, las pusimos porque era una buena manera de colocarlas en la parte de espectáculos al final del noticiero, sin embargo nos dimos cuenta de que todo el mundo en el foro se la pasaba tarareándolas, ahí supimos que eso podía conectar con el público", compartió.

Contando los años que permanecieron en televisión (en México a través de la señal de Canal Once), son ya 19 años de trayectoria, y tanto chicos como grandes, mantienen cariño por la serie.

"Creemos que lo que ha pasado es que los que nos veían cuando niños ahora se la muestran sin ningún prejuicio a sus propios hijos, es un programa que se puede compartir de hijos a papás y de papás a hijos; es algo que ambos puedan disfrutar y comentar".

Este mes, 31 minutos vuelve a México con su ya conocido espectáculo, Calurosa Navidad, el cual se presentará en el Auditorio Nacional el domingo 20 de noviembre, para después llevarlo el 26 de noviembre a Monterrey y el 27 a Guadalajara.

Después, las marionetas y el staff viajarán a su país natal, Chile, donde el espectáculo navideño se ha convertido ya en toda una tradición anual al que asisten chicos y grandes.