Organizaciones demandan al gobernador de Yucatán por frenar reforma contra terapias de conversión

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Organizaciones y colectivos LGBTTTIQA+ presentaron una demanda de amparo contra el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal por no promulgar ni publicar en el Diario Oficial la reforma que prohíbe las llamadas terapias de conversión o ECOSIG aprobadas desde 2021 en la entidad.

Kanan Derechos Humanos y el Colectivo por la Protección de Todas las Familias en Yucatán informaron en un comunicado que a dos años de la aprobación, la reforma está vigente debido a que no ha sido promulgada, lo que impide que se denuncien estos actos de violencia contra la comunidad LGBTTTIQA+.

“Debido a que los derechos de la comunidad LGBTQ+ no han sido tomados en consideración por parte del gobernador durante toda su gestión, nos vemos en la necesidad de obligarlo desde la sociedad civil a hacer su trabajo por la vía judicial para contrarrestar la violencia institucional contra la población LGBTQ+ que ha caracterizado a toda su administración”, dice el comunicado.

demanda terapias de conversión yucatán
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El 25 de agosto de 2021 el Congreso de Yucatán aprobó que se reformara el Código Penal local para castigar con hasta tres años de prisión o 200 días de multa “a quienes obliguen, permitan, consientan o apliquen terapias, métodos, tratamientos o actos que anulen o repriman el libre desarrollo de la personalidad, la orientación e identidad sexual, expresiones o manifestaciones de género provocando daños a la capacidad física o mental de la víctima”.

La demanda de amparo contra Vila Dosal fue interpuesta el 29 de agosto y admitida este jueves 31 por el Juzgado Primero de Distrito, el objetivo es obligar al gobierno de Yucatán la publicación de la reforma constitucional.

¿Qué son las “terapias de conversión” o ECOSIG?

En junio de 2022, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó los resultados de la Encuesta Nacional sobre Diversidad Sexual y de Género 2021 (ENDISEG), según la cual una de cada 20 personas se identifica como LGBTI+ en México. Es decir, se calcula que 5.1 % de la población mexicana de 15 años y más forma parte de la diversidad sexual.

A pesar de que la lucha por los derechos humanos de este grupo ha avanzado significativamente, aún persisten múltiples formas de discriminación y violencia, una de las más crueles son las incorrectamente llamadas “terapias de conversión” o “terapias reparativas”, también conocidas como Esfuerzos para Cambiar la Orientación Sexual y la Identidad de Género (ECOSIG).

Los ECOSIG consisten en someter a una persona a intervenciones con el objetivo de transformar su orientación sexual o identidad de género para ajustarla de conformidad con los parámetros hetero y cisnormativos que rigen la sociedad.

Estos supuestos tratamientos muchas veces son de tinte religioso, algunos incluso afirman apoyarse en fundamentos médicos y psicológicos; no se limitan a un determinado entorno, pues pueden ocurrir en iglesias, campamentos, establecimientos médicos o psicológicos, o conferencias, por mencionar algunos.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) identificó que estas “terapias” son una práctica común en el continente. Los tratos a los que son sometidas las víctimas van desde el abuso verbal, como son amenazas e insultos, hasta agresiones físicas como golpes y electrochoques. Algunas personas son privadas de la libertad en condiciones insalubres y de hacinamiento, sin acceso a agua o alimentos; otras incluso sufren abusos y violaciones sexuales.

La CIDH, en su Informe Anual 2020, expresó su preocupación por la persistencia de las “terapias de conversión” en el continente americano, específicamente en México. De acuerdo con el INEGI, la ENDISEG 2021 reveló que 9.8% de las personas entrevistadas fueron obligadas a asistir con un médico, autoridad religiosa u otra persona para “corregir” su orientación sexual, mientras que 13.9% para “corregir” su identidad de género.