Only in Dade, la historia detrás de la plataforma social que tiene enganchada a Miami

Una camioneta está estacionada al borde de la vía, dos hombres se pelean, uno amenaza y golpea al aire con una pala de construcción, y el otro responde con una patineta. Un testigo de la escena alerta en español: ‘Te vas a desgraciar la vida, brother...” y le comenta a su acompañante: “Si le da con esa pala, lo j----”.

Un día cualquiera en Miami, una de las noticias del día de Only in Dade, una plataforma de social media que muestra con videos lo que se vive en el sur de la Florida, la locura del tráfico, las respuestas agresivas, y sobre todo, por contraste, la necesidad de lograr un entendimiento, una mejor comunicación, un respeto a la convivencia en este mundo loco.

A veces es un animal salvaje que cruza la calle, un cocodrilo que espera pacientemente en la puerta de una casa a que un incauto ponga el pie fuera; un loco que se aventura en un scooter por el expressway y que parece impasible cuando los carros le pasan chiflando; un señor que va a resolver un trámite en una oficina pública con un guacamayo posado en el hombro. Los videos de Only in Dade prueban el axioma de que “una imagen vale más que mil palabras” y que a nadie le amarga un buen rato porque reírse es a veces la única opción, y el humor casi siempre conlleva una reflexión.

La plataforma tiene 1.3 millones de seguidores en su perfil de Instagram y 326,000 en Facebook, por lo que califica perfectamente para la serie del Herald 305 Influencers. Only in Dade se describe como “Citizen journalism” o periodismo ciudadano y representa “The good, the bad and the funny”, según la presentación de su página.

Emilio Estefan, copropietario, y Lenny Carter (der.), fundador de Only in Dade, plataforma de medios sociales que hace un periodismo ciudadano con el que refleja la vida en el sur de la Florida, mediante videos, a veces humorísticos, que envían las personas.
Emilio Estefan, copropietario, y Lenny Carter (der.), fundador de Only in Dade, plataforma de medios sociales que hace un periodismo ciudadano con el que refleja la vida en el sur de la Florida, mediante videos, a veces humorísticos, que envían las personas.

Curiosos por saber quién está detrás de Only in Dade, cómo consiguen los videos, si la gente se los envía, y hasta un poco celosos de por qué no los mandan a nosotros, el Nuevo Herald se fue a entrevistarlos a su oficina en Bird Road, y nos encontramos con un equipo divertido que trabaja en un espacio creativo, decorado con un mural con flamencos, gallos, un muñeco de Pepe Billete y otros objetos un poco cliché, que se han convertido en símbolos de Miami.

Conversamos con Emilio Estefan que, con su olfato de productor, vio la posibilidades que tenía la plataforma y se convirtió en copropietario de Only in Dade, y con Lenny Carter, su fundador y CEO.

Aquí la historia de la plataforma social que los miamenses chequean a cada rato, en cada toma del cafecito o en su versión más generosa, la colada, a veces apoyados en una “ventanita”, porque la noticia –o “el chisme”– es una cosa muy seria por estas tierras.

Las mejores ideas a veces llegan en un bar

El nombre del sitio surgió, como tantas cosas en Miami, de una broma en un bar. “Estábamos en un “sports grill” y algo pasó y dije: ‘Oye, eso solo sucede en Dade’. Y así empezó el nombre”, contó Carter, el empresario cubanoamericano que empezó el sitio como una página de memes y de Facebook en el 2013.

Entonces comenzaron a “evolucionar” y a publicar historias, “contenido generado por el usario”, con ayuda de las personas que los etiquetaban, rememoró Carter. Hoy reciben alrededor de 300 a 400 videos diarios, y hacen un proceso de fact checking para elegir lo que publican.

Lenny Carter y Emilio Estefan en las oficinas de Only in Dade, plataforma de medios sociales que hace un periodismo ciudadano con el que refleja la vida en el sur de la Florida, mediante videos.
Lenny Carter y Emilio Estefan en las oficinas de Only in Dade, plataforma de medios sociales que hace un periodismo ciudadano con el que refleja la vida en el sur de la Florida, mediante videos.

“Cuando nos llega un video, obtenemos múltiples ángulos para saber qué está sucediendo en tiempo real. Nos ponemos en contacto con ellos”, explica Carter, indicando que a veces se trata de un gran evento que se celebra en el condado o un accidente, como la caída de un helicóptero de una brigada contra incendios en Broward, el 28 de agosto, en la que murieron dos personas.

“Recibimos como 10 videos, con cinco ángulos diferentes del helicóptero”, ejemplifica Carter, reconociendo que, como el periodismo tradicional, funcionan siguiendo el proceso de “trial and error”, y que a veces pueden equivocarse, pero que el 95% de su contenido es preciso.

¿Cuál fue el momento decisivo de despegue de Only in Dade?

“El vídeo de mayor impacto fue cuando llegó el COVID-19 en el 2020. Hubo un caso en el hospital Kendall Regional y obtuvimos información privilegiada y muy creíble. Lo publicamos y tuvimos muchas reacciones negativas por eso, pero terminó siendo verdad”, dijo Carter sobre los comienzos de la pandemia.

El primer video que se hizo viral fue el de alguien asando un puerco sobre una camioneta, en medio de la carretera.

“Se detuvieron y comenzaron a asar un cerdo y luego entregaron el cerdo real al cliente”, apuntó Carter, recordando que fue en el 2017 y que obtuvieron millones de vistas.

“Eso solo sucede en Dade” fue lo que le dijo Lenny Carter a un amigo en un bar y de ahí surgió el nombre de la plataforma Only in Dade, que tiene el sabor de la ciudad, como dice Emilio Estefan.
“Eso solo sucede en Dade” fue lo que le dijo Lenny Carter a un amigo en un bar y de ahí surgió el nombre de la plataforma Only in Dade, que tiene el sabor de la ciudad, como dice Emilio Estefan.

La audiencia de Only in Miami quiere un descanso de las noticias malas, precisa. “Si tienen 15 minutos para reír, eso es lo que nos dedican, y así lo recibimos”, dijo Carter, indicando que como hacen un periodismo ciudadano “no tienen ni opiniones ni prejuicios, más bien se mantienen en el medio”.

El equipo de Only in Dade es como “una familia disfuncional”, que se mueve en un ambiente divertido y que está consciente de que tienen una gran responsabilidad.

¿Hay videos que deciden no publicar?

“Recibimos muchos videos sin censura, así que nos mantenemos alejados del ‘homeless shaming’, de avergonzar a los desamparados. Recibimos mucho de eso, lo creas o no. No sabes a cuánta gente le gustaría andar desnuda por la ciudad”, comenta.

También descartan los videos de crueldad hacia los animales, los que contienen insultos raciales, enfatiza.

Un padrino como Emilio Estefan

Al final, en un cuartico donde las mesas se decoran con discos de Alvarez Guedes y fotos de Walter Mercado, nos esperaba Emilio Estefan, que contó cómo se interesó en Only in Dade y decidió apoyarlo.

“Para mí es algo normal. Los que estamos en la producción siempre estamos viendo el futuro de la tecnología, la evolución del mercado”, dijo Estefan, que percibió Only in Dade como un medio para llegar a los más jóvenes, “a una generación que está todo el día en el teléfono”.

“La gente está interesada en ver lo que es más real”, dijo, indicando que las redes sociales tienen “el coraje” de hacer las preguntas que quizás no se hacen en medios tradicionales como la televisión.

Al mismo tiempo reconoce en el streaming una libertad para los creadores, que no dependen de la elección de una sola persona, una ventaja que le hubiera gustado tener cuando comenzó su carrera y las grandes disqueras le decían que tenía que cambiarse el nombre o el estilo de música.

Con esa experiencia, viendo “la pasión” de Carter y de su equipo por Miami, “una ciudad única”, decidió apostar por Only in Dade e incluso tiene la visión de producir más contenido para teléfonos celulares, como un espacio dedicado a Miami Beach y a la diversidad de la ciudad, que se llamará Live from Ocean Drive.

“Quiero dejar un legado, me da orgullo que una persona diga que luchamos por ella, para que puedan seguir siendo auténticos, porque así me siento, como el niño que trabajaba en un restaurante por propinas”, concluyó Estefan, recordando sus comienzos en la música y su vida de inmigrante.

Logo de “Live from Ocean Drive”.
Logo de “Live from Ocean Drive”.