North Miami Beach busca camino a seguir tras varias polémicas

Cuando el alcalde de North Miami Beach, Anthony DeFillipo, fue arrestado el mes pasado, se convirtió en el tercer alcalde electo de la ciudad en ser arrestado en 11 años.

Fue la más reciente señal de agitación en una ciudad donde los comisionados han boicoteado las reuniones, el administrador municipal fue despedido, empleados del gobierno han sido arrestados por robar tarjetas de regalo destinadas al público y un juez restituyó a un comisionado que fue destituido.

Algunos habitantes están cansados de las tensiones y quieren que la ciudad siga adelante.

En una reunión de la comisión celebrada el martes, después que el comisionado restituido Michael Joseph lanzó una diatriba de 10 minutos contra el alcalde y el abogado municipal interino, algunos de los asistentes expresaron su consternación por el hecho que no mucho ha cambiado.

“Estoy totalmente decepcionada con lo que ha estado ocurriendo aquí”, dijo Irene Pellinger, antigua vecina de North Miami Beach y asidua a las reuniones de la Comisión . “No sé cómo van a unirse. Cuando incluso esta noche, Michael Joseph estaba acusando a la gente de proteger al ex alcalde”.

Durante los últimos seis meses, la ciudad se ha visto involucrada en una controversia derivada de las denuncias que DeFillipo vive en Davie, en el Condado Broward, y no en North Miami Beach, como exigen los estatutos de la ciudad. Ese asunto llegó a un punto crítico cuando DeFillipo fue arrestado y acusado de tres cargos de fraude electoral el 31 de mayo y luego suspendido de su cargo por el gobernador Ron DeSantis días después.

La controversia sobre el lugar de residencia del alcalde llevó a que tres miembros de la comisión se negaran a asistir a las reuniones, lo que a su vez provocó que Joseph fuera destituido de su cargo al determinarse que no asistió a las reuniones de la Comisión durante más de 120 días, como se requiere. Un juez del Tribunal de Circuito de Miami-Dade ordenó su reincorporación el 13 de junio.

También el mes pasado, dos empleados municipales fueron arrestados por abuso del sorteo de tarjetas regalo de Publix. El ex director de Recursos Humanos Andrew Bejel y la ex asistente de Asuntos Públicos, Jennifer C. Hillmon, fueron acusados de un cargo de estafa organizada. Hillmon también fue acusada de un cargo de hurto mayor y Bejel fue acusado de dos cargos de hurto menor.

Un nuevo administrador municipal espera ahora crear unidad. “Creo que, en general, tenemos que tomarnos un respiro”, declaró Mario Díaz al Miami Herald días antes de jurar el cargo. “Necesitamos una especie de recogimiento y ver dónde estamos juntos como equipo y qué camino tomamos juntos para avanzar y hacer avanzar la ciudad en beneficio de nuestros residentes y empresas”.

El Herald habló con empresarios, funcionarios electos antiguos y actuales y residentes sobre cómo veían la agitación en la ciudad. Y aunque algunos se sentían frustrados con las circunstancias, otros dijeron que creen que la ciudad puede superarlo. Oros, como Pellinger, no están muy seguros.

“Realmente no sé cuál es la resolución”, dijo mientras asistía a la reciente reunión de la Comisión. “No sé qué nos deparará el futuro”.

‘Fue vergonzoso’

Antes de DeFillipo, otros dos alcaldes de North Miami Beach fueron arrestados. En 2018, el entonces alcalde George Vallejo acordó renunciar a su cargo y aceptar el arresto domiciliario como parte de un acuerdo de culpabilidad por infringir leyes estatales de financiamiento de campaña. Vallejo se declaró culpable de presentar un reporte falso sobre un gasto de $5,000 por parte de un comité de acción política y de autorizar un gasto ilegal por esa cantidad por parte del comité durante su campaña de reelección de 2015.

En 2012, el ex alcalde Myron Rosner fue arrestado y se declaró culpable de un cargo de compensación ilegal relacionado con publicidad de campaña y fue sentenciado a cumplir tres años de libertad condicional.

El abogado de DeFillipo, Michael Pizzi, dijo que los cargos de su cliente no deberían compararse con los de sus predecesores. “Lo que es único en el arresto del alcalde es que, a diferencia de otros casos, aquí no se ha alegado que el alcalde se beneficiara económicamente”, dijo. “Es puramente una denuncia ridícula sobre si votó o no en la circunscripción correcta”.

El ex representante estatal Joseph Geller, cuya práctica legal se centra en las relaciones gubernamentales, dijo que la ciudad no debe ser definida por la historia de sus alcaldes anteriores. “No estoy a favor de que la gente no recuerde su historia, pero la historia no controla sus acciones de cara al futuro”, dijo. “La persona debería aprender de ella, pero no le controla”.

Melissa Winchester, antigua vecina de North Miami Beach, dijo que estuvo involucrada con el Programa para Adolescentes del Washington Park Community Center cuando el padre de DeFillipo, Kenneth, era comisionado y recordó un momento en que hizo una donación al programa. “Me siento como si el alcalde hubiera deshonrado el nombre de su padre”, dijo.

“Me encanta mi ciudad. Esta es una gran ciudad, pero todo lo que ves es desorden cada vez que te das la vuelta”, dijo. Winchester, como agente de prisiones de Miami-Dade, dijo que estuvo en la cárcel el día que DeFillipo fue fichado.

“Me sentí avergonzada al oír que tenía que cerrar el edificio por mi alcalde”, dijo. “Tuve que liberar a mi alcalde. Trabajo en fichar y liberar. No lo fiché, pero lo procesé. Fue vergonzoso”.

Winchester dijo que espera que él pueda recuperarse de la situación. DeFillipo tiene programada una vista de lectura de cargos para el 30 de junio.

Reacción de la comunidad

De los habitantes de North Miami Beach con los que habló el Herald, muchos dijeron que no sabían del arresto del alcalde o de los acontecimientos que condujeron a él, pero una vez enterados dijeron que se sentían decepcionados.

Héctor Villarreal expresó su preocupación por la posibilidad de que DeFillipo viviera fuera de la ciudad. “Como vecino de la zona, solo espero que seamos capaces de encontrar a alguien más que viva aquí y que esté más involucrado”.

Propietarios y empleados de negocios frente al Ayuntamiento de North Miami Beach tampoco sabían del arresto de DeFillipo. Algunos llevaban allí unos meses y otros unos cuantos años.

“Si es ilegal y sabes que es ilegal y sabes que si lo haces hay consecuencias, entonces no debes hacerlo”, dijo Rosie Lucero, gerente de AMPM Smoke Shop. “Porque no sé si eres mi alcalde y vas a hacer cosas que pongan en peligro a todos los que estamos aquí”.

También se preguntó si tal vez fue un error y si tuvo tiempo de actualizar su licencia a tiempo para cambiar de distrito electoral y votar. “También soy humana y sé lo que hacen los humanos”, dijo. “No juzgo porque quizá se le olvidó”.

Los funcionarios electos son conscientes que la ciudad tiene un problema de imagen y que el gobierno necesita recuperar la confianza de la comunidad. “El consenso general es que hay incertidumbre y una decepción en el gobierno de la ciudad”, dijo el comisionado McKenzie Fleurimond. “Creo que sucede que todas estas cosas pasan consecutivamente. Y la imagen de la ciudad en este momento no es buena. Pero estamos trabajando para recuperar esa confianza”.

Joseph dijo que piensa trabajar para que la Comisión avance. “Creo que cada comunidad tiene sus problemas”, dijo. “Creo que North Miami Beach es muy singular en el sentido que la demografía es única y hermosa, y tenemos varios puntos y formas diferentes de interactuar con nuestro gobierno o de ser activos. Estas cosas van a suceder”.

La comisionada Fortuna Smukler dijo que las acusaciones en torno a DeFillipo, el hecho que la ciudad tuviera tres alcaldes arrestados y los empleados arrestados por las tarjetas regalo causaban molestia.

“Da una mala impresión”, dijo. “Sé que es vergonzoso, y es vergonzoso para los buenos habitantes que se preocupan. Espero que cambie, pero cada vez que damos un paso adelante, damos dos hacia atrás”.

Doblar la esquina

Por ahora, el vicealcalde Jay Chernoff ejerce de alcalde en funciones en la Comisión de seis personas.

Para seguir adelante, J.C. Planas, abogado especializado en elecciones y asesor gubernamental, dijo que el litigio en curso entre los miembros de la Comisión, en el que Chernoff apela la decisión de restituir a Joseph, debería abandonarse. “Que Chernoff apele una decisión muy racional de un juez muy respetado creo que no ayuda”, dijo Planas. “Creo que Chernoff debería, obviamente, intentar hacer las paces”.

Planas dijo que con una Comisión de seis personas, en lugar de las siete habituales, probablemente habrá más votaciones 3 a 3.

Para el ex representante estatal Joseph Geller, la solución es sencilla: “Solo tienen que trabajar juntos y mirar al futuro”, dijo. “Todos necesitan no permitir que las dificultades controlen sus acciones. Y necesitan cooperar y seguir adelante”.

A pesar de la frustración, los residentes y los comisionados tienen la esperanza de que las cosas cambien con la llegada de Díaz como administrador municipal, meses después que su predecesor Arthur Sorey III fue destituido.

Díaz fue recientemente administrador de la villa de Biscayne Park y, antes de eso, fue jefe de gabinete en North Bay Village, donde guió a la ciudad a través de la pandemia del COVID-19.

Díaz dijo que el cambio no ocurrirá de la noche a la mañana: “No siempre puedes precipitarte a actuar, y ahí es donde las cosas tienden a empezar a desmoronarse”.

Geller dijo que es clave que Díaz una a la Comisión. “Cualquier buen administrador tiene que ayudar creando consenso entre los funcionarios electos. Eso no es exclusivo de esta situación, en la que ha habido cierta disfunción. Eso es lo que hace un buen administrador”, dijo, haciendo hincapié en que un administrador municipal no establece la política.

En sus primeros meses en el cargo, Díaz tiene previsto evaluar los proyectos en curso, como mejoras al Washington Park Community Center. Dijo que planea celebrar una reunión de asamblea con los vecinos sobre la forma de abordar las necesidades del centro.

Pero la mayor prioridad es el presupuesto. “Estamos trabajando con los departamentos para poder crear eso y llevarlo a la Comisión para que puedan discutir e identificar cuáles son sus prioridades”, dijo Díaz.

Declaró al Herald que no tenía miedo de sumergirse en la agitación que se ha tragado a North Miami Beach en las últimas semanas. “Llegué a esta oportunidad con los ojos bien abiertos”.