Murió Alexei Navalny: Novichok, el peligroso agente nervioso con el que fue envenenado en 2020
MOSCÚ.- Al trágico final del líder opositor ruso, Alexei Navalny, quien falleció este viernes en una prisión rusa en la que cumplía una pena de 19 años por “extremismo”, le precedieron otros sospechosos episodios que lo tuvieron al borde de la muerte. El más conocido fue el envenenamiento que sufrió en Siberia en 2020.
Consciente de los peligros que lo acechaban al enfrentarse constantemente al régimen de Vladimir Putin, Navalny dijo en una ocasión: “Si deciden matarme, significa que somos increíblemente fuertes y que tenemos que utilizar ese poder y no rendirnos”.
Fue en agosto de 2020 que se descompensó en un vuelo de Tomsk, en Siberia, a Moscú. El piloto realizó un aterrizaje de emergencia, salvándole la vida, y Navalny luego fue trasladado en avión a Berlín para recibir tratamiento.
Al examinar a Navalny, los médicos del prestigioso Hospital Charité se alarmaron tanto que llamaron al Ejército alemán. El detractor de Putin no sufría de bajo nivel de azúcar en la sangre ni de un veneno común en novelas detectivescas como arsénico o cianuro. Según funcionarios alemanes, los médicos sospechaban que era algo mucho más peligroso, que requería la atención de especialistas en armas químicas militares.
Casi dos semanas después, el gobierno alemán confirmó los temores de los médicos: Navalny había sido envenenado con un agente nervioso de grado militar de la familia Novichok, una potente clase de arma química desarrollada por la Unión Soviética que se utilizó al menos una vez antes en años recientes en un ataque contra un enemigo del Kremlin.
El Novichok, un arma de la era soviética diseñada para uso militar, se utilizó contra Sergei Skripal, un exespía soviético, y su hija en un ataque en 2018 en Salisbury, Inglaterra, que el gobierno británico atribuyó al servicio de inteligencia militar de Rusia, el GRU.
Después de despertar de un coma inducido médicamente, Navalny afirmó que el veneno había sido colocado en su ropa interior en su hotel antes de abordar un vuelo en Siberia. Había viajado a la región para ayudar a organizar candidatos de la oposición antes de las elecciones locales.
Los restos del veneno fueron hallados en una botella de agua, en un hotel donde se había hospedado el opositor.
Los funcionarios rusos negaron la existencia de pruebas de envenenamiento, y un médico en Omsk, la ciudad siberiana donde su avión hizo un aterrizaje de emergencia, dijo que Navalny había sufrido un “desequilibrio en carbohidratos”, posiblemente causado por bajo nivel de azúcar en la sangre. La esposa y el médico personal de Navalny desestimaron el diagnóstico como ridículo. Laboratorios en Suecia, Francia y Alemania confirmaron más tarde que había sido envenenado.
Por su parte, Putin criticó una investigación conjunta de medios de comunicación que afirmó haber identificado a un equipo de asesinos del servicio de seguridad ruso FSB. “Si alguien hubiera querido envenenarlo, habría acabado con él”, dijo.
En diciembre de 2020, cuatro meses después de su envenenamiento, Navalny se hizo pasar por un ayudante de un alto funcionario de seguridad ruso y engañó a un oficial de inteligencia para que confesara un complot para matarlo. Todo quedó grabado.
Sin embargo, la agencia de inteligencia interna de Rusia, el Servicio Federal de Seguridad, calificó el video de Navalny como una falsificación.
Al mes siguiente, a pesar de enfrentar una sentencia de prisión casi segura, Navalny regresó a Rusia después de pasar meses en Alemania recuperándose del intento de envenenamiento. Fue arrestado a su llegada en un aeropuerto de Moscú.
Justo después de dos semanas, recibió una sentencia de prisión que lo envió a una colonia penal en Vladimir. En abril de 2023, surgieron sospechas de que había sido envenenado nuevamente en prisión tras sufrir un fuerte dolor de estómago, según informó entonces The Guardian. Estas, sin embargo, nunca fueron confirmadas.
En diciembre pasado fue trasladado a la Colonia Penal IK-3, conocida como “Lobo polar” en Siberia, donde murió este viernes. Aún se desconoce la causa de su muerte.
La muerte de Navalny deja a la oposición sin su figura más conocida antes de las presidenciales, unos comicios en los que los principales políticos críticos con el gobierno están vetados.
Con información de AFP, Reuters y The New York Times