7 de los momentos más escandalosos de Le Pen en sus 35 años en el Parlamento Europeo

7 de los momentos más escandalosos de Le Pen en sus 35 años en el Parlamento Europeo

Jean-Marie Le Pen falleció este martes 7 de enero a la edad de 96 años. Líder del Frente Nacional (FN), partido que fue rebautizado como Agrupación Nacional (RN) cuando su hija Marine tomó el relevo, el veterano político fue eurodiputado durante 35 años. Durante este tiempo, dejó una huella imborrable en la Eurocámara. Desde insultos y negación del Holocausto hasta problemas legales, he aquí los momentos más polémicos del difunto eurodiputado.

1. "Las cámaras de gas fueron solamente un detalle de la Segunda Guerra Mundial"

Siempre provocador, Le Pen sacó el tema del Holocausto en una edición del programa 'Le Grand Jury' de 'RTL' en 1987. "No digo que las cámaras de gas no existieran. Sin embargo, creo que no son más que un detalle en la historia de la Segunda Guerra Mundial", afirmó.

Esta indignación resurgió en el Parlamento Europeo en 2009, donde se mantuvo firme en su postura. "Me mantengo firme en mi posición de que las cámaras de gas no son más que un detalle en la historia de la Segunda Guerra Mundial", señaló un irritado Le Pen, poniendo los ojos en blanco cuando la multitud de eurodiputados le abucheó de manera notable.

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Fue una idea que repitió a lo largo de décadas. A pesar de su arrepentimiento en 1995, en 1997 redobló la apuesta. "En un libro de mil páginas sobre la Segunda Guerra Mundial, los campos de concentración ocupan dos páginas, y las cámaras de gas, 15 líneas. Eso es lo que llamamos un detalle", indicó.

2. Cualquier cosa menos Le Pen

Le Pen era tan controvertido entre sus colegas del Parlamento Europeo que cambiaron su reglamento para impedirle presidir las sesiones. Hasta 2009, era tradición que el eurodiputado de más edad presidiera la primera sesión plenaria del Parlamento a la espera de que se eligiera a un nuevo presidente.

Para evitar esta situación, los eurodiputados de centro-derecha e izquierda impulsaron enmiendas al reglamento interno del Parlamento Europeo. Ahora, el presidente en ejercicio preside la primera sesión y, si no es reelegido, el vicepresidente más antiguo o el eurodiputado con más antigüedad en el cargo asume la función.

3. "Es como estar entre bolcheviques"

En el mes de septiembre de 2011, durante un debate sobre los atentados de Noruega ocurridos dos meses antes, Le Pen relacionó la integración de la población inmigrante con la masacre perpetrada por un ultraderechista. El eurodiputado francés de Los Verdes, Daniel Cohn-Bendit, se ofendió, declarando: "Es intolerable que el Parlamento Europeo acoja a un miembro que hace comentarios tan racistas y aborrecibles".

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En respuesta, un enfurecido Le Pen replicó: "He sido atacado por el pedófilo Cohn-Bendit. Tengo derecho a recordar que fue imputable por acoger a un terrorista de la Facción del Ejército Rojo. Tengo derecho a defender mi honor". Ante tales palabras, su hija Marine Le Pen no pudo sino reír. Cuando el entonces presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek, le cortó el micrófono, Le Pen gritó: "¡Aquí me siento como entre bolcheviques!".

4. Eurodiputados contra periodistas: una refriega parlamentaria

El poder de polarización de Jean-Marie Le Pen era tal que las tensiones se disparaban incluso cuando él no estaba en la sala. ¿El mejor ejemplo? En abril de 2002, estalló una pelea entre diputados y periodistas apostados en una de las salas de prensa del Parlamento Europeo.

Le Pen había cancelado en el último momento una rueda de prensa, alegando el temor a ser interrumpido por colegas hostiles que hacían campaña contra él. Así, el ambiente era tan desagradable que su ausencia provocó una refriega entre los periodistas a los que había dejado tirados y los eurodiputados presentes en la sala.

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El resultado fue una situación caótica, con periodistas y parlamentarios enfrentándose y profiriéndose insultos. Mientras la prensa se enfrentaba a los eurodiputados, ¿dónde estaba Le Pen? El político utilizó varias puertas traseras para encontrar el camino de vuelta a su despacho, donde saludó a un periodista y le aseguró que "no se encontraba desmotivado" por toda la agitación que rodeaba a su persona.

5. Un año de inhabilitación

Le Pen no era ajeno a los tribunales, donde comparecía con frecuencia por cargos de enaltecimiento de crímenes de guerra, negación del Holocausto, incitación al odio o insultos públicos. Sin embargo, fue una condena por violencia la que le costó su escaño en el Parlamento Europeo durante un año.

En 1997, el eurodiputado agredió a un candidato socialista durante las elecciones legislativas en la región de París. Fue condenado por la agresión un año después. Esta condena también le hizo perder temporalmente su puesto de consejero en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul.

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Tras una batalla legal en Francia y a nivel europeo, fue finalmente expulsado en abril de 2003, para volver en las elecciones europeas del año siguiente. "Una gran injusticia y sanciones totalmente desproporcionadas", declaró en el momento de su exclusión.

6. Adiós al "inútil" Parlamento Europeo

Tras 35 años sentado en el hemiciclo, Jean-Marie Le Pen no derramó lágrimas al despedirse del Parlamento Europeo. En lugar de ello, utilizó su discurso final, un amargo monólogo en francés de cuatro minutos de duración, para lamentar la supuesta "inutilidad" del Parlamento Europeo ante la "invasión migratoria".

"Ustedes, parlamentarios, que permanecieron ciegos, sordos y mudos, serán maldecidos por el futuro. Europa es impotente. Aún peor, paraliza las reacciones nacionales que deberían movilizar a sus pueblos".

Tras quejarse de que la institución "no es más que un molino de viento que arrastra sacos de arena en lugar de sacos de grano", Le Pen comentó que su único recuerdo, tras haber ejercido como eurodiputado, la friolera de ocho legislaturas consecutivas, era "un sentimiento de ineficacia". Terminó su discurso entre aplausos euroescépticos.

7. El escándalo de los empleos falsos del Frente Nacional

Jean-Marie Le Pen y su partido, el FN, fueron acusados de malversación de fondos entre 2004 y 2016. El veredicto se espera para el 31 de marzo de 2025, pero debido a su muerte, Le Pen nunca será acusado.

Así, el pasado mes de septiembre comenzó un juicio por la presunta malversación de fondos europeos por parte del partido de Le Pen. Veinticinco personas, entre ellas Jean-Marie Le Pen, están acusadas de desviar fondos europeos, destinados a pagar asistentes parlamentarios a eurodiputados, a personas que en realidad trabajaban para el partido entre 2004 y 2016.

Jean-Marie Le Pen fue declarado no apto para asistir al juicio debido a su frágil estado de salud. Su abogado declaró "que ya no podía viajar y que sus facultades están muy mermadas."