Alberto Fernández viajará este lunes a Brasil para festejar el triunfo de Lula

Alberto Fernández y Lula Da Silva, en la Casa Rosada
Alberto Fernández y Lula Da Silva, en la Casa Rosada - Créditos: @Presidencia

Medidos, desde el presidente Alberto Fernández hacia abajo, los funcionarios nacionales repitieron ante cualquier micrófono que se les acerque que el mayor deseo era el de “elecciones limpias y en paz”. Pero estaba claro que el Gobierno –y el Frente de Todos en su conjunto– apostaba sus fichas casi sin disimulos a un triunfo de Luiz Inacio Lula da Silva en el ballottage, ansiosos por inaugurar una “nueva era” en los vínculos con Brasil y dejar atrás la frialdad y la aspereza personal y política que signó el vínculo Gobierno con el presidente Jair Bolsonaro.

“El triunfo de Lula es merecido y le hace bien a la región”, dijo el Presidente a las 19.50 en una entrevista con Radio 10, cuando ya la tendencia en favor del líder del PT era irreversible. “El vínculo entre Brasil y Argentina será más profundo, realista y sincero”, agregó el Presidente, y expresó su deseo de que “Argentina, Brasil y México puedan constituir un eje, sería muy bueno para todo el continente”, agregó el primer mandatario, quien manifestó sus “ganas de ir a darle un abrazo” a Lula, a quien llamó por teléfono un rato después, en los próximos días.

Poco antes de la medianoche, desde el Gobierno confirmaron a LA NACION que el mandatario viajará este lunes a San Pablo para concretar su deseo y reunirse cerca del mediodía con el presidente electo. El embajador de la Argentina en el país vecino, Daniel Scioli, se encuentra ultimando los detalles del encuentro.

De estrecha relación, las conversaciones entre ambos comenzaron la semana pasada cuando Alberto lo llamó a Lula por su cumpleaños, pero el jefe del Estado argentino estaba a la espera del resultado de las elecciones brasileñas para tomar la decisión. Al parecer, el líder del PT también estaría planeando un viaje a Buenos Aires.

Fernández no se olvidó de recordar los “agravios que recibía del gobierno de Brasil” por parte de la gestión de Bolsonaro, agravios que, según él, “callé porque entendí que el vínculo debería ser irresistible”. Dijo que hizo silencio “convencido de que deber era callar y preservar el vínculo”. “ Esa hostilidad no la voy a tener que padecer, ahora el vínculo será más profundo y mucho más realista”, agregó, en relación al vínculo que espera con Lula da Silva.

Fernández también recordó, en 2019, visitó a Lula en la cárcel. “Hay conductas donde la especulación no tienen cabida. Hay momentos en que no hay que especular, había que estar al lado de Lula”, argumentó.

Unos instantes después de la salida radial del Presidente, la vicepresidenta Cristina Kirchner también hizo pública su satisfacción por el regreso de Lula al poder. “Hoy más que nunca, amor y mucha felicidad. Gracias pueblo del Brasil. Gracias compañero Lula por devolverle la alegría y la esperanza a nuestra América del Sur”, escribió la vicepresidenta.

En las horas previas, la ansiedad por el triunfo del PT se tradujo en la avanzada de funcionarios y dirigentes del Frente de Todos que llegaron a Brasil en las últimas horas, mientras el Presidente sigue con atención los resultados desde la quinta de Olivos. Nadie descarta un viaje del Presidente en las próximas horas si es que el triunfo de Lula se concreta.

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Eduardo de Pedro llegó ayer, invitado por el tribunal electoral de San Pablo, al mando de una delegación del Ministerio del Interior. “Tengo el honor de encabezar la comitiva del @MinInteriorAR en el marco de las actividades previstas por el Tribunal Regional Electoral de San Pablo. Traigo el saludo de los argentinos y el deseo de que mañana sea otra gran jornada de la democracia para el pueblo hermano de Brasil”, escribió De Pedro en la red social Twitter.

Una de sus exsubordinadas en Interior, que luego se convirtió en ministra de Economía y hoy preside el Banco Nación, Silvina Batakis, también llegó a Brasil, invitada a participar de un encuentro con analistas organizado por el embajador argentino en Brasil, Daniel Scioli. Batakis llegó tarde al encuentro, del que sí participaron el embajador, De Pedro y la titular del Inadi, Victoria Donda.

“Es obvio que Lula tiene un mayor compromiso con la integración latinoamericana, con el Mercosur y una gran relación personal con Cristina y también conmigo”, dijo Scioli en una entrevista con LA NACION publicada este domingo. Scioli fue, durante los últimos tiempos, el único puente visible entre Fernández y Jair Bolsonaro, quienes no lograron saldar sus diferencias, dentro y fuera del Mercosur, y ni siquiera pudieron armar una reunión bilateral en sus casi tres años coincidiendo al frente de sus países.

“El pueblo hermano de Brasil mañana tiene dos opciones: elige la democracia o el autoritarismo, la libertad o el odio. Con mucha esperanza acompañamos a @LulaOficial”, publicó Donda en sus redes sociales, junto a una foto, sonriente y haciendo con sus manos el gesto que unifica a los partidarios del expresidente.

Mucho menos medida, la exembajadora en Gran Bretaña y Venezuela Alicia Castro llegó a Brasil sin ocultar su favoritismo por Lula. “Una victoria para @LulaOficial puede corregir la injusticia de su encarcelamiento fraudulento de 2018 que instaló a Bolsonaro. Renovar la esperanza en América Latina y más allá y garantizar que la Amazonía esté protegida”, escribió la actual dirigente de Soberanxs, el partido que también integran el exministro de Economía Amado Boudou, y el exvicegobernador bonaerense Gabriel Mariotto.

La exministra de la Mujer, Elizabeth Gómez Alcorta, y la diputada Cristina Brítez son también parte de la avanzada kirchnerista, que aguarda con nerviosismo los cómputos finales.

De la “caminhada da vitória” a la frustración

La primera vuelta en Brasil dejó un sabor amargo para la amplia comitiva oficialista que buscó festejar por anticipado un triunfo de Lula da Silva, que asomaba como amplísimo favorito para imponerse el 2 de octubre pasado. De Daniel Scioli a Victoria Tolosa Paz, una larga lista de funcionarios y legisladores oficialistas rompieron el equilibrio y se mostraron con el candidato del PT en San Pablo.

El embajador Scioli, y el cónsul argentino en San Pablo y exembajador en China, Luis María Kreckler, participaron de la “Caminhada da vitória”, el cierre de campaña del líder del Partido de los Trabajadores (PT) en la ciudad de San Pablo, junto con la flamante ministra de Desarrollo Social, Tolosa Paz, quien llegó de Buenos Aires. Scioli, sin embargo, negó a LA NACION haber participado de la movilización con el resto de los argentinos.

El sábado previo a la elección, Tolosa Paz publicó un tuit con una foto junto a Scioli tras la caminata proselitista de Lula en San Pablo, último acto antes de las urnas. “Brasil tiene la esperanza de volver a tener un presidente que ponga en el centro de la escena los derechos de los trabajadores”, escribió la ministra.

Tolosa Paz fue la principal espada del Frente de Todos en suelo brasileño. Viajó en condición de observadora internacional invitada por la justicia electoral de San Pablo, aunque dedicó parte de su estadía a acompañar a Lula.

La noche de la elección, la ministra de Desarrollo Social se mostró con el expresidente brasileño (2003-2010) en una foto publicada en sus redes y manifestó su deseo de “construir la victoria” para el 30 de octubre y “poder celebrar nuevamente”.

Junto a Tolosa Paz, el tribunal paulista invitó a la misión de observación a otros seis argentinos, dos de ellos funcionarios en el consulado argentino en San Pablo. Además, fueron convocados la jefa de gabinete de asesores de la Cancillería, Luciana Tito; el director de Asuntos Electorales de la Cancillería, Eduardo Ramón Lucero; el militante peronista Iván Salcedo, cercano a Santiago Cafiero e identificado como consultor del Ministerio de Economía; y Estanislao Graci Susini, asesor del directorio de Aeropuertos Argentina 2000.

En todos los casos, según confirmaron fuentes del tribunal electoral a LA NACION, los costos del viaje fueron asumidos por las propias instituciones de los invitados.

También se sumaron al cierre de campaña de Lula en San Pablo la subsecretaria de Asuntos Nacionales de Cancillería y militantes del Movimiento Evita, Marina Cardelli, y la diputada nacional del Frente de Todos y militante de Barrios de Pie Natalia Souto.

Viajaron también a Brasil el diputado por la provincia de Buenos Aires Federico Fagioli, del frente kirchnerista Patria Grande; la diputada del Frente de Todos por Misiones Cristina Britez; el diputado por la provincia de Buenos Aires Lisandro Bormiolo y la diputada provincial platense por el Frente de Todos Lucía Iañez.

Todos ellos siguieron los resultados en el búnker de Lula, en un hotel céntrico de cuatro estrellas de la ciudad de San Pablo. Esperaron el escrutinio, también con dirigentes del PT, el funcionario del PAMI Nicolás Canosa, integrante de la comisión de política exterior del Instituto Patria, y la militante kirchnerista Sofía de Nicolo, de la misma comisión en el Patria.