Maestro de primaria de Merced se jubila tras 35 años. Era el ‘rey del 5 de Mayo’

(English below)

Ernie Díaz puso fin a su carrera docente como empezó, enseñando en tercer grado en la Gracey Elementary situada en la N West Avenue de Merced.

Diaz, de 61 años, se jubiló en junio tras 35 años de docencia.

Los estudiantes de AVID de la escuela organizaron una asamblea sorpresa para homenajear a Díaz por su jubilación. Se le convocó a una reunión ficticia de emergencia del IEP para evitar que se enterara de la celebración.

Para aquellos que no conozcan a Díaz, su amiga de toda la vida y compañera de trabajo Blanca Arceo lo describe como un maestro modelo.

“Siempre está contento. Es un hombre muy dulce. Compasivo con la enseñanza. Muy amigable con todos, no solo alumnos, familias, compañeros de trabajo y hasta con sus anteriores alumnos que ha tenido por años”, dijo Arceo.

Nacido en Los Reyes, Michoacán, México, Díaz tenía tres años cuando su familia se trasladó a Estados Unidos.

La importancia de la educación le fue inculcada a una edad muy temprana. Díaz cuenta que su padre los llevaba a él y a sus hermanos a trabajar en los campos de tomate durante el verano.

“Nos decía: ‘Si no siguen en la escuela esto es lo que van a hacer’. Y yo decía: ‘De ninguna manera, papá. De ninguna manera’”, cuenta Díaz. “Y fui el primero de mi familia en ir a la universidad”.

Díaz supo por primera vez que quería ser maestro cuando estaba en la preparatoria mientras daba clases particulares a niños en la Planada Elementary. También le impactaron sus maestros y las habilidades que aprendió para dominar el inglés. Esto le inspiró a seguir la enseñanza para proporcionar estos servicios a los estudiantes en la población de aprendices de inglés.

Otros trabajos que cruzaron por la mente de Díaz fueron convertirse en un maestro de clases especiales de día o incluso trabajar para la Patrulla Fronteriza.

Díaz asistió a Fresno State, y obtuvo una licenciatura con énfasis en educación bilingüe en 1988.

Se convirtió en instructor sustituto para el Distrito Escolar de la Ciudad de Merced hasta que se abrió un puesto en Gracey Elementary. Díaz se convirtió en maestro de tercer grado en 1989 y ha estado allí desde entonces.

Ernie Díaz lleva 35 años en la misma escuela enseñando en tercer curso.
Ernie Díaz lleva 35 años en la misma escuela enseñando en tercer curso.

Se le conocía como el rey del Cinco de Mayo

Todos los días, los alumnos de la clase de Díaz repasan sus expectativas, con las siglas B.E.A.R.S., para las palabras en inglés que significan “cree en ti mismo, espera la excelencia, actúa con responsabilidad, respeta a los demás y muestra autocontrol”.

Los latinos representan casi el 90% de los alumnos de tercer grado de la escuela, según el Departamento de Educación del estado.

Su exalumna Dolores González-Flores, quien ahora tiene 35 años, dice que Díaz es el mejor maestro de tercer grado que cualquier alumno podría tener.

Tres adjetivos que González-Flores usó para describir a Díaz fueron atento, cariñoso y divertido.

“Es muy conocido y querido en la comunidad”, dijo González-Flores.

Uno de sus recuerdos favoritos con Díaz fue cuando ella y otro estudiante hicieron un viaje a la tienda de comestibles local para comprar piñatas para el Cinco de Mayo.

Díaz es el autoproclamado rey del Cinco de Mayo. Durante muchos años colocó adornos, hizo piñatas con sus alumnos y les enseñó el significado cultural de la festividad. Como maestro, dijo Díaz, hace mucha apreciación y concienciación cultural en su clase.

El actual director, José Muñoz, asignó alumnos más difíciles al aula de Díaz por su compasión y aceptación de un reto difícil.

“A los niños les iba muy bien en su clase porque sabían que se les quería, que se les cuidaba y que tendrían una oportunidad honesta de estar en el aula sin ningún prejuicio sobre quiénes eran”, dijo Muñoz.

Díaz dijo que no guarda rencor al pasado de un chico. Su trabajo es aceptarlos, dijo. Todos los estudiantes tienen la misma oportunidad de aprender; algunos solo necesitan más apoyo, dijo Díaz.

El COVID fue un reto para Díaz. Tanto, que contempló la posibilidad de jubilarse anticipadamente.

A pesar de todos los retos, fue difícil para Díaz alejarse tras enseñar a estudiantes durante generaciones.

“La gente me dice ‘eres un gran maestro’ y me dan ganas de llorar porque he estado allí 35 años y he tenido hijos que ahora son padres”, dijo Díaz.

“Me hace llorar porque, para mí, ser un gran maestro no es solo ser un maestro, es ser un amigo, un buen colega, una persona que trabaja en colaboración con otros maestros”.

Carta de un estudiante con motivo de su jubilación.
Carta de un estudiante con motivo de su jubilación.

Díaz dijo que un gran maestro hará todo lo posible por satisfacer las necesidades de los niños. Esta es una cosa que la exdirectora Sharon Spinardi recordaba de Díaz durante su tiempo en Gracey.

“Una de las cosas que más recuerdo de Ernie es que siempre estaba dispuesto a mejorar y a hacer los cambios necesarios para los estudiantes”, dijo Spinardi.

“Sus estudiantes lo amaban, simplemente lo amaban y confiaban en él y siempre fue tan cariñoso y amable”, dijo Spinardi.

El legado docente de Díaz continúa

Su hija Marissa Diaz continuará el legado enseñando primer grado en Rivera Elementary.

Originalmente interesada en el campo de la medicina, a Marissa le gustaba trabajar con niños y vio el impacto que la educación podría tener. Después de algunos ánimos y el apoyo de su padre, comenzó su camino hacia la enseñanza.

“Supongo que era una llamada para mí, pero yo no lo vi hasta que fui mayor, fue como ‘Oh, sí, supongo que quiero seguir sus pasos y dedicarme la educación, así’”, dijo Marissa Díaz.

Tras su jubilación, Díaz seguirá visitando Gracey de vez en cuando e incluso ayudará en la clase de su hija.

Díaz planea viajar con su esposa jubilada Marcy. Su primer viaje será a Nuevo México para asistir a la Fiesta Internacional del Globo® de Albuquerque. Otros viajes incluyen Italia y España. También planea pasar más tiempo con sus hermanos.

“A ( el personal de) Gracey, me gustaría decirle gracias por todos los maravillosos recuerdos que me dieron”, dijo. “Los quiero mucho, sigan educando a todos los estudiantes que vienen a nuestra escuela... porque son nuestro futuro. Gracias por ser un excelente personal y grandes amigos para todos nosotros”.

Merced CA elementary school teach retires after 35 years

Ernie Diaz ended his teaching career the way he started, teaching third grade at Gracey Elementary located on N. West Ave. in Merced.

The 61-year-old Diaz retired in June after teaching for 35 years.

The school’s AVID students organized a surprise assembly to honor Diaz’s retirement. He was called in for a make-believe emergency IEP meeting to keep him from finding out about the celebration.

For those who might not know Diaz, lifelong friend and co-worker Blanca Arceo describes him as a model teacher.

“He is always happy. He’s a very sweet man. Compassionate about teaching. Very friendly with everyone, not only students, families, coworkers, and even his previous students that he has had for years,” Arceo said.

Born in Los Reyes, Michoacán, México, Díaz was three years old when his family moved to the United States.

The importance of education was instilled at a very young age. Diaz said his father would take him and his siblings to work in the tomato fields during the summer.

“He would tell us ‘If you don’t stay in school this is what you’re going to do.’ And I said ‘No way dad. No way,’ ” Diaz said. “And I was the first one in my family to go to college.”

Diaz first knew he wanted to become a teacher in high school while tutoring kids at Planada Elementary. He also was impacted by his teachers and the skills he learned to become proficient in English. This inspired him to pursue teaching to provide these services to students in the English Learner population.

Other jobs that crossed Diaz’s mind were becoming a special day class teacher or even working for the Border Patrol.

Diaz went on to attend Fresno State, and earned a bachelor’s degree with an emphasis in bilingual education in 1988.

He became a substitute instructor for the Merced City School District until a position opened at Gracey Elementary. Diaz became a third-grade teacher in 1989 and has been there ever since.

He was known as the Cinco de Mayo king

Everyday students in Diaz’s class go over their expectations which is the acronym B.E.A.R.S. This stands for “believe in yourself, expect excellence, act responsibly, respect others, and show self control.”

Latinos make up almost 90% of the school’s third-graders, according to the state Department of Education.

Former student Dolores González-Flores, now 35, said Diaz is the best third-grade teacher any third-grader could have.

Three words that González-Flores used to describe Diaz were attentive, caring, and fun.

“He’s very well-known and loved in the community,” González-Flores said.

One of her favorite memories with Diaz was when she and another student took a trip to the local grocery store to grab piñatas for Cinco de Mayo.

Diaz is the self-proclaimed Cinco de Mayo king. For many years he would put up decorations, make piñatas with his students, and taught them the cultural significance of the holiday. As a teacher, Diaz said, he does a lot of cultural appreciation and awareness in his classroom.

Current principal José Muñoz assigned tougher students to Diaz’s classroom because of his compassion and acceptance of a tough challenge.

“The kids did very well in his classroom because they knew that they were loved, that they were cared for, and that they would get an honest shot at being in the classroom without any prejudgement of who the student was,” Muñoz said.

Diaz said he doesn’t hold a kid’s past against them. His job is to accept them, he said. Every student has the same opportunity to learn; some just need more support, said Diaz.

COVID was a challenge for Diaz. He contemplated if early retirement was next.

Through all the challenges, it was hard for Diaz to step away due to teaching students for generations.

“People tell me that you’re a great teacher and it makes me want to cry because I’ve been there 35 years and I have had kids that are now parents themselves,” Diaz said.

“It makes me cry because, to me, being a great teacher is not only being a teacher, it’s being a friend, a good colleague, a person that works collaboratively with other teachers.”

Diaz said a great teacher will do everything possible to meet kids’ needs. This is one thing that former principal Sharon Spinardi remembered about Diaz during her time at Gracey.

“One of the things that sticks out in my mind with Ernie is that he was always willing to improve and to make the changes necessary for the students,” Spinardi said.

“His students loved him, they just loved him and they trusted him and he was always so caring and kind,” Spinardi said.

The Diaz teaching legacy continues

Daughter Marissa Diaz will continue the legacy teaching first-grade at Rivera Elementary.

Originally interested in the medical field, Marissa liked working with kids and saw the impact education could have. After some encouragement and support from her father, she started on her path to teaching.

“I guess it was a calling for me, but I just didn’t see it until you know once I was older, it was like ‘Oh yeah, I guess I did want to follow into his footsteps and do education as well,’” Marissa Diaz said.

With his retirement, Diaz will still visit Gracey from time to time and even help out in his daughter’s classroom.

Diaz plans on traveling with his retired wife Marcy. His first trip will be to New México to attend the Albuquerque International Balloon Fiesta®. Other trips include Italy and Spain. He also plans on spending more time with his brothers.

“To Gracey, I would like to say thank you for all the great memories that you gave me. I love [you] very much and continue to educate all students that come to our school … because they are our future,” Diaz said. “Thank you for being a super staff and great friends to all of us.”