Maduro desata ola de represión ante masivas protestas cuestionando su victoria electoral

El gobernante venezolano Nicolás Maduro se encontraba bajo intensa presión el martes, en medio de las exigencias de la comunidad internacional de que presente pruebas respaldando el controversial anuncio de que ganó las elecciones presidenciales del domingo y miles de venezolanos salían a las calles para protestar en contra de lo que llamaron un fraude electoral de proporciones históricas.

Las fuerzas de seguridad de Maduro también se encontraban en las calles, tratando de contener las manifestaciones, la mayoría de ellas pacíficas, a favor del candidato presidencial opositor Edmundo González y su mentora, la líder opositora María Corina Machado, deteniendo al menos a 177 personas, incluyendo al líder opositor Freddy Superlano, quien fue obligado a salir de su vehículo por hombres vestidos de negro.

Grupos de derechos humanos informaron que al menos 11 personas habían muerto durante las protestas celebradas después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el régimen, declarara que Maduro había ganado la elección con el 51% de los votos.

La oposición asegura que el anuncio del consejo es una mentira descarada y que González en realidad ganó con cerca del 70% de los votos.

Mientras se intensificaban las protestas a favor de González, el ministro de Defensa de Venezuela, Vladimir Padrino López, apareció frente a las cámaras advirtiendo que Maduro es víctima de un intento de golpe de Estado lanzado por grupos extremistas.

“Estamos en presencia, sencillamente, así lo digo, de un golpe de Estado. Un golpe de Estado fraguado nuevamente por estos factores fascistas de la derecha extremista, apoyado por supuesto por los factores imperiales, el imperialismo norteamericano y sus aliados y sus lacayos y cipayos”, manifestó Padrino López en declaraciones brindadas por la televisión estatal.

Se trata de “un golpe de Estado en marcha, para lo cual el presidente comandante en jefe de la fuerza armada nacional bolivariana Nicolás Maduro Moros se ha puesto al frente para detenerlo nuevamente y junto a él el pueblo de Venezuela que lo eligió presidente para el próximo periodo presidencial”, enfatizó.

Los altos funcionarios del régimen también pidieron la detención de la cúpula opositora. El presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, uno de los principales lugartenientes de Maduro, dijo ante el Congreso venezolano que el fiscal general del país debería detener tanto a González como a Machado.

Mientras tanto, la comunidad internacional continuó acumulándose en contrato del régimen socialista de Caracas, incrementándose el número de países latinoamericanos exigiendo que las autoridades electorales de Maduro entreguen los registros de votantes debidamente auditados, demostrando que efectivamente el gobernante consiguió los votos para salir reelecto.

Otros incluso fueron más allá. El gobierno peruano, por ejemplo, anunció que reconoce a González como el presidente electo de Venezuela.

Más temprano el martes, el secretario general de la Organización de los Estados Americanos, Luis Almagro, instó al régimen a realizar nuevas elecciones bajo un consejo electoral reformado y bajo la supervisión de observadores de la OEA y la Unión Europea. El grupo multilateral convocó a una reunión para el miércoles por la tarde para discutir la situación en Venezuela.

Mientras tanto, Estados Unidos dijo que ha estado monitoreando de cerca la situación en Venezuela y pidió a los funcionarios de Maduro que publiquen “resultados electorales completos, transparentes y detallados”, incluso por mesa de votación.

“Esto es especialmente crítico dado que hay señales claras de que los resultados electorales anunciados por el Consejo Nacional Electoral de Venezuela no reflejan la voluntad del pueblo venezolano tal como se expresó en las urnas el 28 de julio. También estamos revisando otros datos electorales compartidos por organizaciones de la sociedad civil y los informes de los observadores electorales internacionales”, dijo en un comunicado la portavoz del NSC, Adrienne Watson.

En una multitudinaria concentración de simpatizantes celebrada el martes por la tarde en las calles de Caracas, Machado dijo que ahora la campaña opositora cuenta con el 80% de las actas de votación, documento oficial que recoge el conteo final de todos los votos obtenidos en cada uno de los centros electorales.

Con las actas obtenidas, queda en evidencia que González ganó con cerca del 70% de todos los votos.

Más de 15,700 centros de votación fueron instalados en Venezuela para recibir a más de 21 millones de votantes registrados, aunque se estima que cuatro millones de ellos ya se encontraban fuera del país sudamericano.

El pronunciamiento de Machado van en contra de los resultados anunciados la madrugada del lunes por el CNE, entidad controlada férreamente por el régimen y que carece de supervisión independiente, y que dijo que Maduro había ganado las elecciones al obtener el 51.2% de los votos, tras revisar el 80% de las actas de votación.

Según las cifras del consejo, González sólo obtuvo el 44.2% de los votos, pero la oposición insiste en que esto son números escritos en un papel de servilleta por el presidente del CNE, Elvis Amoroso, a espalda de los números registrados en las actas de votación.

El anuncio del CNE allana el camino para un tercer período presidencial de Maduro que expiraría en el 2031 y que extendería hasta una tercera década la revolución socialista iniciada por su predecesor y mentor, el fallecido presidente Hugo Chávez.

Sin embargo, González y Machado no se han dejado intimidar por las amenazas que ellos y sus seguidores están recibiendo del régimen e insisten en que los números que ellos habían recibido del propio CNE antes de que el consejo inexplicablemente suspendiera la transmisión de los datos, era que el candidato opositor estaba derrotando a Maduro con una votación de más del 65%.

En base a los datos que habían acumulado, es simplemente imposible que Maduro haya ganado la elección, sostuvo Machado el lunes en una rueda de prensa.

La reportera Ana Claudia Chacin contribuyó con este reporte.

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