Máximo Kirchner contó qué estaba haciendo cuando se enteró del atentado a Cristina Kirchner y qué le dijo a sus hijos

Máximo Kirchner dio una extensa entrevista a El Destape
Máximo Kirchner dio una extensa entrevista a El Destape - Créditos: @Captura de video

A casi dos meses del atentado contra la vicepresidenta Cristina Kirchner en la puerta de su casa de Recoleta, el diputado nacional e hijo de la exmandataria, Máximo Kirchner, reveló cómo se enteró de que habían intentado asesinar a su madre y, en una postura crítica ante parte de la prensa, también contó cómo los medios le ayudaron a explicarle a sus dos hijos, Emilia y Néstor Iván, qué le había pasado a su abuela.

“Me había ido tarde del Congreso a comer a la casa de unos buenos amigos. Ni bien llegué, a los cinco o diez minutos, me suena el teléfono. Veo que es el secretario de Cristina. Digo: ‘Lo atiendo en un ratito’. Estábamos en el medio de una charla y llamaron a otro teléfono. Y me dijeron: ‘Venite’. Y ahí habré llegado a las 10 de la noche, no me acuerdo”, narró en El Destape sobre la noche de ese 1 de septiembre, a la vez que consideró que hubo un “contexto” para que “operen este tipo de grupos” que fueron contra la vicepresidenta.

En medio de críticas a quienes hablaron de que el arma con que Fernando Sabag Montiel apuntó a la antes mandataria era “de juguete”, Kirchner ahondó sobre cómo le contó a sus hijos lo que había pasado. “Quiero agradecerles a los medios porque me sirvió para que la madre de los nenes los convenciera de que era una pistola de juguete”, dijo y acotó: “Nos sirvió para que mis hijos creyeran que no era tan grave la situación”.

Incluso, dijo que tras esa estrategia que utilizaron junto a Rocío García -la madre de los pequeños- para que no se enteraran de la totalidad de lo que había ocurrido, a él no lo volvieron a consultar. “Fue el cumple de Emilia el viernes, estuvieron con la abuela, no preguntaron en ningún momento nada”, manifestó el diputado nacional. “Aquellos que querían denigrar, nos sirvió. Imaginate que es la abuela, es eso”, puntualizó. Disconforme con el tratamiento mediático del intento de magnicidio, Kirchner cuestionó también que “pareciera que es un hecho más” lo que ocurrió.

Máximo Kirchner y Cristina Kirchner
Máximo Kirchner y Cristina Kirchner

En tanto, el líder de La Cámpora expresó que, en el momento en que su madre fue atacada, él no tenía custodia. “Ahora otra vez con toda esa lógica”, lamentó y contó: “Había rechazado [la seguridad] porque Bullrich la retira, va achicando la custodia de Cristina, se la retiran a mis hijos en el sur y la verdad que, ni de valiente ni no valiente, yo ya no tenía custodia desde esos días y tampoco la quise a partir de 2019″.

Además narró que tras el intento de asesinato a su madre le ofrecieron ponerse chaleco antibalas para participar de un acto, pero dijo que se negó. “No podemos resignar la manera de hacer política en la Argentina”, consideró. “Si me tengo que subir a un acto con un chaleco no es el país en el que uno quiere vivir. Si te va a pasar algo, es mejor que te pase en esos lugares, haciendo algo, pero no voy a resignar esa posibilidad. Sería malísimo para todas y todos que tengas que subir con un chaleco antibalas. Es que no estamos funcionando bien como sociedad a la hora de la práctica política. La rechacé por eso; ni por valiente, ni por nada, sino por convicciones propias”, expresó.

Asimismo, en otro tramo de la entrevista, el diputado nacional develó una coincidencia: que Cristina Kirchner le había compartido la entrevista que dio en plena calle a Crónica TV Brenda Uliarte para quejarse por los planes sociales, mientras vendía copitos. Ese reportaje se hizo antes de que la novia de Sabag Montiel y ahora detenida en la causa llegara a Juncal y Uruguay el 1 de septiembre. “Me lo mandó Cristina porque veníamos discutiendo por las características de los planes y cómo llevarlos adelante”, sostuvo.

En tanto, dijo que se entera del avance del expediente “al ritmo que lo publican los medios” y prefirió no ahondar sobre el supuesto vínculo comercial que habrían tenido la firma Caputo Hermanos con el apresado Jonathan Morel, uno de los miembros de Revolución Federal, este grupo investigado en otra causa por incitación a la violencia, apología del crimen e intimidación pública, en la que Cristina Kirchner es querellante.

“Cabe preguntarse qué sucedería si fuese al revés y ahí es donde uno nota la doble vara, si yo hubiera aprendido carpintería por YouTube”, ironizó Kirchner en relación a la teórica compra de muebles que le habría hecho la compañía a Morel. “Buenos muebles... ¿De qué madera serán? Me parece que no son de buena madera”, acotó el líder camporista. Antes, desde la defensa de Caputo Hermanos habían aseverado que Luis “Toto” Caputo, que fue secretario de Finanzas en el gobierno de Mauricio Macri, no integra esa empresa.