Lissa Vera: “Mis ahorros de Bandana se fueron cuando me quisieron secuestrar”
Lissa Vera recordó anoche uno de los momentos más difíciles de su vida. “Mis ahorros de Bandana se fueron cuando me quisieron secuestrar, que me tuve que borrar de mi barrio. Eso fue horrible”, contó.
La cantante, que estuvo invitada a PH: Podemos Hablar, habló del momento en el que la inseguridad y la persecución, debido a su fama, la obligaron a ella y a su familia a mudarse y empezar una nueva vida. “La noche que tenían pensado el hecho me estuvieron esperando en una esquina, ellos sabían todo mi itinerario. Fue en San Justo, pero esta gente era de Ciudad Evita”, relató.
“Salió mal porque yo no aparecí”, agregó antes de revelar cómo se enteró de la intención de los delincuentes. “Al otro día, un domingo bien temprano, fueron al lugar en donde trabajaba un pibe al que yo conocía desde chica y le dijeron todo lo que habían pensado hacer: ‘vos que la conocés, la estuvimos esperando’. Se ve que los pibes estaban pasados de rosca y le dijeron todo lo que iban a hacer”.
Este amigo de la infancia fue a contarle a su propio padre lo que había escuchado. “El papá de este chico fue a hablar con el mío. Yo justo tenía un viaje a Paraguay y en lugar de llevarme una valija a la gira me agarré tres y desaparecí”. Asustada, su familia también tuvo que irse de la zona. “A los tres o cuatro días mi papá agarró a mis hermanos, los sacó del colegió, agarró a mi vieja, pidió licencia en el trabajo y se fueron a vivir como un mes afuera, a Paraguay, con familia de allá”.
En pleno éxito de Bandana, Vera se vio obligada a mantener en privado estos hechos. “Tuvimos que guardarlo porque justo había salido la película, era plena locura y nadie tenía que enterarse porque era un escándalo, pero en un momento se filtró y explotó”, recordó.
“Cuando Gustavo Yankelevich vio que el problema era grave nos ayudó. Ni bien volvieron mis viejos nos fuimos a vivir como un mes a un hotel, hasta encontrar un lugar en donde alquilar”, contó sobre la medida que tomaron desde el equipo de Bandana para protegerla, después de que una amiga de la artista les dijera dónde encontrarla.
Con tan solo 20 años, Vera tuvo que enfrentarse a esta situación de miedo e incertidumbre. “Me quedé sola en un monoambiente en Palermo mientras mi familia estaba en Paraguay”, explicó. “Fue una de las cosas más jodidas que viví durante Bandana, la pasamos muy mal y la plata se fue en alquiler y en cosas. Cuando terminamos el contrato yo me quedé sin trabajo, con cinco mil pesos en el bolsillo y la vida, que no sabía a donde iba a terminar”.
“Como siempre mis viejos me dijeron, ‘tenés que acostumbrarte que la vida es así, hoy estás bien, mañana podés estar mal, tenés que agradecer y disfrutar lo que tenés y no enloquecer’. Siempre uno puede salir adelante, siempre que llovió paró y acá estoy, muy contenta”, culminó con tono positivo.