Lionel Messi, el rompe récords: sonrisas, dos pases exquisitos y dos “casi gol” que dejaron a todos con las ganas

Lionel Messi saluda a Gianni Infantil antes del partido de Argentina y Canadá de la Copa América
Lionel Messi saluda a Gianni Infantil antes del partido de Argentina y Canadá de la Copa América - Créditos: @Anibal Greco

ATLANTA, (enviado especial).- Lionel Messi salió feliz. Cuando entró y cuando se fue. Antes de salir al césped por el túnel del imponente estadio que marcó el debut de la Copa América 2024 saludó uno por uno a todos los chicos que acompañaban a ambos planteles, que se le abalanzaban sin poder creer tenerlo tan cerca. El capitán entró al campo de juego con una gran sonrisa. Se fue igual.

Dos pases exquisitos que salieron de su zurda terminaron en los tantos de los goleadores, Julián Álvarez y Lautaro Martínez. A esto sumó un par de “casi gol”, tras dos mano a mano con el arquero canadiense, una de las grandes figuras de la noche.

Más allá del ánimo, el gran capitán de esta selección volvió a jugar como Messi en la calurosa noche de Atlanta.

Lionel Messi
esquiva a Maxime Crépeau durante el partido frente a Canadá, pero no pudo convertir
Lionel Messi esquiva a Maxime Crépeau durante el partido frente a Canadá, pero no pudo convertir - Créditos: @Anibal Greco

Para empezar, volvió a hacer eso que hace desde hace años: batir un récord. Como titular en el debut argentino en el Mercedes Benz Stadium se convirtió en el jugador con más presencias en la historia de esta competición: llegó a 35 partidos en su séptima edición disputada. Superó de esta manera al arquero chileno Sergio Livingstone, quien había llegado a 34 encuentros jugados siete décadas atrás.

El rosarino atesora diferentes momentos en su historia en el torneo continental. La última fue la más recordada: campeón en el Maracaná para cortar una sequía de 28 años. Pero también tuvo de las otras. Tres finales perdidas, en 2007, 2015 y 2016, las dos últimas frente a Chile. Un tercer puesto en 2019. Y aquella gran frustración que él mismo recordó días atrás, la de 2011 de local, cuando la selección fue eliminada en Santa Fe frente a Uruguay. “No recuerdo ningún insulto en especial, pero sí que me dijeron de todo. A mí y a toda la selección. Fue bastante duro. Me putearon de todos los colores”, recordó aquí en Atlanta.

Durante gran parte del partido Messi se ubicó como el jugador más adelantado, recostado sobre la derecha y entre los centrales canadienses. Más atrás se plantó Julián Álvarez, el incansable 9 que enloquece a los defensores cuando presiona y es letal cuando debe definir.

El comienzo del 10 fue como el del resto del equipo. Canadá se adelantó en el campo argentino durante los primeros diez minutos. En ese lapso hubo solo un par de llegadas para el equipo de Scaloni. Un disparo de Paredes desde afuera del área y una definición de Messi, que recibió un pase del jugador de la Roma, ingresó por el sector izquierdo del área grande y definió cruzado, muy cerca del palo derecho del arquero Crépeau. A partir de ahí, hubo un lapso en el que la selección empezó a jugar como Argentina. Tenencia de pelota, juego asociado y un capitán más activo.

Cuando los canadienses volvieron acercarse al Dibu Martínez con un planteo agresivo, al 10 el partido le quedó lejos. Algunas pinceladas, como cuando lanzó un pase desde la derecha que cruzó toda el área y Acuña no pudo definir. De ahí hasta el final del primer tiempo, metió un túnel al borde del área y un tiro libre que se fue por arriba del travesaño.

Lionel Messi cae entre varios rivales canadienses
Lionel Messi cae entre varios rivales canadienses - Créditos: @Anibal Greco

El segundo tiempo arrancó otro partido para Argentina. Solo cuatro minutos habían pasado cuando Messi consumó su primera obra de la noche de Atlanta. Tras una gran combinación por la derecha metió un excepcional pase filtrado para Alexis McAllister, quien chocó contra el arquero y la definición quedó servida para Julián Álvarez. En la jugada siguiente, otra habilitación de cabeza del 10 para el 9, que casi convierte el segundo.

Volvió a recostarse sobre la derecha del ataque, como el hombre más adelantado de la selección. A los 20 del segundo tiempo llegó su primer “casi gol”. Un gran pelotazo del Dibu Martínez desde su propia área lo dejó solo frente a Crépeau: definición cruzada, tapó el arquero y, en el rebote, volvió a eludir al guardameta, definió por encima pero la pelota pegó en la espalda de Cornelius. Messi volvió a sonreír y saludó a su arquero por la excepcional habilitación. Trece minutos después volvió a quedar solo para encarar un ataque en velocidad ante el arquero: se la picó pero se le fue ancha por el palo derecho.

Lionel Messi frente a Derek Cornelius
durante el partido entre Argentina y Canada por el
Grupo A de la Copa America 2024
Mercedes-Benz Stadium
Lionel Messi
Lionel Messi frente a Derek Cornelius durante el partido entre Argentina y Canada por el Grupo A de la Copa America 2024 Mercedes-Benz Stadium Lionel Messi - Créditos: @Anibal Greco

Otro pase exquisito para De Paul de atrás de mitad de cancha que terminó en foul. “Adentro, adentro”, le cantó a Otamendi. El centro fue preciso al punto penal pero el defensor desvió su cabezazo. El estadio quedó enmudecido cuando Messi recibió un durísimo golpe en la rodilla izquierda por parte del 15, Bombito. Cuando se recuperó, se gritó como un gol.

Faltando dos minutos llegó lo mejor de la noche. Tras una gran combinación colectiva el rosarino metió una extraordinaria habilitación entre las espaldas de los centrales para dejar solo al recién ingresado Lautaro Martínez, que definió con gran categoría. 2 a 0 y el gran capitán como una de las figuras, junto a Julián Álvarez. El partido se terminó tras un tiro libre ideal para el 10, pero el arquero dejó con las ganas a los 70.000 espectadores que vinieron ver al gran ídolo global.

Tras el partido, Messi reconoció: “Sabíamos que iba a ser así porque sabíamos de lo que era capaz Canadá. Y fue un rival muy duro, muy físico. El primer tiempo nos costó un poco más, ellos son intensos y físicamente fuertes. Por suerte encontramos el gol rápido en el segundo tiempo, pudimos jugar un poquito mejor, pero siguió siendo complicado”.

Y agregó: “Hace mucho que venimos haciendo esto nosotros. Tenemos la paciencia de tener la pelota, de moverla, a veces se nos hacía difícil encontrar los espacios, pero la mayoría de los rivales juegan distinto contra nosotros y nosotros tenemos que tratar de seguir teniendo el control para, cuando llegue nuestra oportunidad, aprovecharla”.

El romperrécords. El que pareció disfrutar desde el comienzo de otra mágica noche ahora va por otra marca personal. La de superar a su compatriota Norberto “Tucho” Méndez, quien brilló en los años 40, ganó tres ediciones y es el máximo goleador de la Copa América . Para eso le pueden quedar hasta cinco partidos, si la selección llega hasta la final. Debería convertir cuatro goles. Nada imposible para el gran capitán que acostumbró al mundo a que siempre puede volver a asombrar. Y el que vuelve a ilusionar a todo un país. Desde mañana, la próxima escala será Nueva Jersey.